Mar del Plata: brutal ataque racista a golpes contra un basquetbolista etíope a la salida de un bar de Playa Grande

MAR DEL PLATA.- La discusión comenzó en un boliche bailable de Playa Grande y terminó lejos del lugar, a los golpes y en desigualdad de condiciones. “Negrito”, le dijeron varias veces en forma despectiva a un basquetbolista etíope que integra el equipo Sub 19 de Racing Club, antes de atacarlo y dejarlo con lesiones que obligaron a su internación, en un hospital público local.

Desde el establecimiento sanitario confirmaron a LANACION que la víctima permanecerá al menos 24 horas, a la espera de su evolución, pero con resultados de estudios de alta complejidad que no generaron preocupación.

El caso derivó en una investigación penal, ahora a la espera de la declaración del damnificado para conocer su versión, y en una denuncia ante el Instituto Nacional contra la Discriminación ya que el disparador fueron expresiones y actitudes racistas.

El basquebolista Alfieri Welega Fresno había ido con amigos a un local bailable de Playa Grande. Allí se iniciaron los cruces con un grupo que lo molestó en varias oportunidades, siempre con referencias racistas.

Compañeros de Fresno contaron a la policía que el enfrentamiento se dio a unos 500 metros del local bailable y a dos cuadras del perímetro de seguridad que se dispone cada noche para controlar los centros de esparcimiento nocturno. “Éramos tres contra cinco”, dijo sobre la diferencia de fuerzas que se dio, con consecuencias lógicas para quienes eran minoría.

Las mismas fuentes médicas indicaron que esperaban que se recupere el paciente, ya que además de los golpes estaba bajo efectos de consumo de alcohol, por lo que consideraban que recién este sábado estaría en condiciones de lucidez plena como para declarar y, si todo marcha bien, recibir el alta médica.

Desde Racing Club realizaron una publicación en redes sociales en la que expresan su solidaridad con el jugador y su familia. “Repudiamos el ataque”, expresó el club de Avellaneda en su cuenta de Twitter, donde se agregó que el caso “ya fue denunciado ante Inadi”.

El club de Avellaneda ya había sufrido otro golpe a sus deportista juveniles el miércoles pasado, cuando uno de los futbolistas más prometedores de la cuarta división fue baleado en Rosario durante una pelea. Lautaro Ronchi se encontraba con amigos en el barrio La Tablada, donde había llegado unos días antes para visitar a su familia, cuando fue baleado por un agresor, con el que habrían discutido pocos minutos antes.

Ronchi intentó luchar con ese adolescente armado al trabarse la pistola antes del primer disparo, pero el agresor logró gatillar nuevamente y el balazo impactó en la cabeza del joven futbolista. Uno de sus amigos, Erik Díaz, murió al recibir cuatro disparos. Ronchi quedó internado en grave estado.

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