Ladrones saquearon un local de ropa en cuatro ingresos durante cuatro horas en la misma madrugada y mientras sonaba la alarma

Una banda conformada por dos hombres y dos mujeres desvalijó un local de ropa ubicado en la intersección de las calles Chilavert y Piedrabuena, en Villa Lugano. El hecho ocurrió en la madrugada del lunes, cuando los delincuentes ingresaron y salieron del comercio en cuatro ocasiones sin ser detenidos, a pesar de que la alarma del lugar sonó repetidamente durante al menos cinco horas y de que los patrulleros policiales se encontraban en las cercanías, según afirmaron vecinos cercanos al local a LA NACION.

El robo comenzó alrededor de las 00:55, cuando el primer integrante de la banda rompió los candados y la cerradura de la puerta con una barreta y rompió el vidrio de la entrada. Esta maniobra para acceder al comercio les llevó más de una hora y media. A las 2:30, tras forzar el ingreso, el primer ladrón entró, pero se retiró cuando comenzó a sonar la alarma. Sin embargo, a las 4:20, tres mujeres con linternas volvieron al local, y una de ellas ingresó rápidamente para tomar una cartera, retirándose también por el ruido de la alarma.

No satisfechos con lo robado, a las 4:30, el tercer ladrón ingresó y cargó varias bolsas de mercadería, incluyendo jeans, shorts y prendas exhibidas en la vidriera, mientras la alarma continuaba sonando. A las 4:36, el último robo se ejecutó por una mujer que se llevó todas las carteras de la estantería del local. Finalmente, una de las ladronas cerró la puerta del comercio, la cual había quedado entreabierta desde el último ingreso de los delincuentes, y abandonó la zona sin mayores problemas.

La encargada del local, quien llegó al lugar tras el aviso de la policía a las 8 de la mañana, expresó su frustración por la falta de intervención de las fuerzas de seguridad durante el robo. “No quiero recuperar la plata, quiero que los agarren”, señaló con indignación al compartir los detalles de lo sucedido y el valor de lo sustraído, estimado en al menos 3 millones de pesos. Según relató, vecinos aseguraron haber visto patrulleros cerca del comercio en varias ocasiones durante la madrugada, pero estos no descendieron de los vehículos, observando el local solo desde sus autos.

El local, que lleva funcionando en la misma dirección más de 15 años y nunca había sido robado, sufrió esta primera vez un asalto grave. A pesar de esto y de la cercanía de los patrulleros, no hubo intervención directa de la policía, que tampoco logró identificar a los ladrones con las cámaras de seguridad de la zona. Sin embargo, las cámaras del local muestran cómo todos los integrantes de la banda giraban hacia la calle Cosquín tras cada ingreso y salida del comercio.

En cuanto a los responsables, los registros de video no muestran con claridad si los delincuentes se trasladaban en algún vehículo o si residían en el barrio. El lunes anterior, según la dueña del local, la misma banda intentó forzar el ingreso a otro comercio de ropa infantil a pocas cuadras, aunque esa vez no lograron ingresar. Por el momento, la policía continúa la investigación sin haber realizado detenciones ni aportado novedades a los propietarios del comercio.

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