La Razón de Vivir: Teto Medina dijo no tener idea de por qué está detenido y su defensa pidió la excarcelación
El conductor y panelista de TV fue indagado por el fiscal Daniel Ichazo, funcionario a cargo de la investigación sobre una comunidad de rehabilitación de adictos
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Marcelo Medina, popularmente conocido como Teto, al ser indagado por el fiscal Daniel Ichazo dijo no saber por qué está detenido y su defensa, encabezada por el abogado Adrián Tenca, pidió su excarcelación en la causa donde se investiga una asociación ilícita dedicada a cometer delitos como reducción a la servidumbre, trabajos forzados, asociación ilícita, abandono de persona, usurpación de título y autoridad e incumplimiento de los deberes de funcionario público.
Tenca confirmó que su cliente, en su declaración indagatoria, sostuvo no tener idea de por qué esta detenido. Medina fue detenido ayer en un departamento de Palermo por personal de la Policía Federal Argentina y detectives de la policía bonaerense.
Fuentes judiciales aseguraron que Teto Medina dijo desconocer lo que sucedía dentro de las quintas donde se trataba a jóvenes adictos a drogas. Incluso, contó que nunca se quedó a dormir allí. “Hay testimonios que dicen lo contrario”, indicó un investigador que conoce esta causa. “Medina dijo que no recorría los lugares, que solo iba al patio y a los quinchos. De todas maneras, hay pruebas que reclutaba a pacientes a cambio de dinero”, agregó con un dato adicional: Su número telefónico figuraba en el grupo de WhatsApp llamado Staff.
La Justicia investiga a una supuesta organización criminal que actuaba bajo la fachada de una comunidad terapéutica, llamada La Razón de Vivir, cuyo objetivo declarado sería la recuperación a jóvenes adictos a la droga. Para la fiscalía, todo era un engaño.
“Cumplió un rol de darle charlas a los chicos [internos] Le pagaban 10.000 pesos por charla”, sostuvo Tenca al salir de la fiscalía N° 8 de Berazategui.
Además, explicó el abogado, Teto Medina cobraba 2500 pesos por cada paciente que llegaba por su recomendación a la comunidad terapéutica que hoy está bajo la mirada de la Justicia.
“Él (por Medina) iba simplemente los martes a dar una charla a los internos de 11 a 17 y cobraba 10 mil pesos, esa fue toda su participación”, había señalado Tenca poco antes de ingresar en la fiscalía. En ese momento, agregó: ”Hable con él ayer, me dijo que estaba muy tranquilo, que él no había cometido ningún delito y que nunca ninguno de los chicos a los cuales él le daba las charlas le hizo referencia a que sufría algún tipo de castigo o maltrato”.
Teto Medina es uno de los 17 detenidos que tiene esta causa, iniciada por las denuncias de una decena de personas que aseguraron haber sido víctimas de explotación laboral y maltratos en alguna de las siete quintas que la comunidad terapéutica tenía en La Matanza, Florencio Varela (en tres barrios), General Rodríguez, Almirante Brown y la localidad cordobesa de Bialet Massé.
Esa investigación derivó en más de 20 allanamientos ordenados por el juez de Garantías Adrián Villagra y realizados ayer por personal de la División Delitos Cibernéticos contra la Niñez y la Adolescencia de la Policía Federal Argentina (PFA) y de la Dirección de Investigaciones de Delitos de Trata de Personas de la policía bonaerense.
Medina aparece, en la división de tareas descripta por la Justicia, como “la cara visible y pública” de la organización. Según el fiscal Ichazo, Medina se valió de sus propias redes sociales para captar más víctimas y mantenía contacto semanal con esos jóvenes en las quintas para fortalecer su sometimiento y reducción a la servidumbre; también se aseguró que el propio Medina se definía, en sus apariciones mediáticas, como “operador socio-terapéutico”.
“No tiene ninguna participación en nada de lo que le están imputando”, señaló, en cambio, el abogado de Medina.
La defensa del conductor televisivo plantearía que los trabajos realizados para la comunidad terapéutica La Razón de Vivir no implicaban estar al tanto de lo que sucedía en las quintas de recuperación, sino que simplemente se cumplía con un servicio por el que se recibía una asignación monetaria.
“No se le expusieron pruebas en su contra, ni siquiera hay escuchas telefónicas que lo involucren”, aseguró el abogado Tenca al confirmar que, tras cumplirse el trámite de la indagatoria, había pedido la excarcelación de Teto Medina.
Entre los arrestados figura el sindicato líder de esa organización, identificado por fuentes de la investigación como Néstor Ezequiel Zelaya, que fue uno de los sospechosos que estuvo frente al fiscal Ernesto Ichazo. Ese hombre se negó a declarar, pero su abogado, Marcelo Biondi, anticipó que podría pedir ampliar la indagatoria la próxima semana, una vez que la defensa tenga en claro las pruebas que sustentan la acusación.
En declaraciones a la prensa, el abogado afirmó que “lo que sí les puedo asegurar es que las personas que se han comunicado conmigo desde el día de ayer que tomé la defensa, que son más de 80 o 90 personas, refieren todo lo contrario a lo que se dio a conocer desde la investigación en forma pública con respecto a que no hubo ningún tipo de acción que los haga trabajar en estado forzoso ni en condiciones deplorables”.
Y agregó: “Ninguna de las personas que están detenidas deberían estar detenidas por estas calificaciones graves que se han adjudicado”.
Por su parte, el fiscal Ichazo había argumentado, en el momento de concretarse los allanamientos, que “la investigación comenzó por denuncias de las propias víctimas”. Y comentó: “Tiene que ver con el contexto de reducción a la servidumbre, trabajo forzoso y medicación no controlada, además de las ganancias económicas por lo que les hacían trabajar y no les pagaban”.
Autoridades sanitarias de Buenos Aires y de la Sedronar informaron que esa comunidad terapéutica, supuestamente dirigida por Zelaya, no se encontraba habilitada para trabajar en la recuperación de adictos a drogas.
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