La madre de Candela acusó a la policía de encubrir a los homicidas
Carola Labrador también cuestionó al ex ministro Casal
Nancy Carola Labrador, madre de Candela Sol Rodríguez, la chica de 11 años raptada y asesinada en agosto de 2011, en Hurlingham, declaró ayer que Marcelo Tavolaro, el primer fiscal que instruyó la causa, "se dejó manejar" por los entonces jefes de la policía bonaerense. Dijo que la fuerza "encubrió a los autores" del crimen y que quien era ministro de Justicia y Seguridad de la provincia, Ricardo Casal, le "mintió".
"La policía encubrió a los autores y no quiso encontrarla viva [a Candela]", afirmó Labrador ante el Tribunal Oral Criminal (TOC) N° 3 de Morón, que juzga por el crimen a Leonardo Jara, de 37 años; Hugo Bermúdez, de 56, y Fabián Gómez, de 45. Ayer también, al hacer uso de la palabra, el acusado Jara dijo ser inocente y sostuvo que la causa "está armada de la A a la Z".
La madre de Candela señaló que los responsables de la policía bonaerense "taparon a gente de ellos". Señaló al comisario retirado Juan Carlos Paggi, que en 2011 estaba al frente de la fuerza; al ex superintendente de Seguridad Roberto Castronuovo; al ex ministro Casal; al fiscal Tavolaro, y a su secretaria letrada, Guillermina Rappazzo, según consignó la agencia de noticias Télam.
Todos ellos habían conformado el "comité de crisis" durante los nueve días que Candela estuvo desaparecida y, para la madre de la víctima, "ni siquiera al gobernador [Daniel Scioli] le dijeron la verdad".
"No creo que [Scioli] haya entorpecido la investigación; cada vez que iba me atendía muy bien, pero con Casal nunca nos quisimos", afirmó la mujer ante los jueces.
Según su testimonio, "ni la política, ni la policía, ni el fiscal" la ayudaron, porque Candela "estuvo nueve días esperando que la rescataran y nunca fueron a buscarla".
"Casal me dijo que Candela tenía un novio de 31 años y me mostró [imágenes de] cámaras de seguridad de la Capital; me decía que era ella [la chica], pero yo le decía que no", relató Nancy Carola Labrador.
En tanto, Alfredo Rodríguez, el padre de la víctima, también testificó ante el tribunal, pero sólo alcanzó a decir que no sabía por qué fue cometido el crimen, ya que sufrió una crisis de nervios y su declaración debió ser suspendida.
Rodríguez estuvo detenido por piratería del asfalto y ese antecedente llevó, en los primeros tiempos del caso, a trazar una línea de investigación basada en una posible venganza en su contra.
Temas
Más leídas de Seguridad
Drama en Mendoza. Murió un hombre que fue baleado por su madre anciana porque “no podía cuidarlo más”
40 segundos de horror. El violento ataque a cuchillazos de un hombre a una mujer en una pizzería de Núñez
Tiroteo en Villa Lugano. Un policía de la Ciudad recibió un balazo en el cuello mientras perseguía a un sospechoso