La Justicia le otorgó la excarcelación a Marcelo “Teto” Medina, pero sigue imputado en la causa
La medida alcanzó a otros diez acusados de integrar una asociación ilícita que funcionaba en la comunidad terapéutica La Razón de Vivir
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La Justicia de Garantías de Quilmes concedió la excarcelación extraordinaria para el conductor de televisión Marcelo “Teto” Medina y otros diez acusados de integrar una asociación ilícita que funcionaba en la comunidad terapéutica La Razón de Vivir, que tenía centros de rehabilitación de adictos a las drogas en Florencio Varela, La Matanza, Almirante Brown, General Rodríguez y en la localidad cordobesa de Bialet Massé.
“Soy un buen tipo y esto para mí fue terrible”, aseguró Teto Medina al dejar la sede de la Dirección Departamental de Investigaciones (DDI) de Quilmes, donde estuvo detenido.
Más allá de la excarcelación, el conductor de televisión sigue procesado en esta causa y para continuar en libertad deberá presentarse una vez al mes en el juzgado y no acercarse a los predios de la comunidad terapéutica La Razón de Vivir. Esas reglas también deberán ser acatadas por los restantes excarcelados.
A partir de la resolución firmada por el juez Adrián Villagra, quedaron presos seis acusados que habían sido detenidos con Medina durante los 26 allanamientos realizados la semana pasada en viviendas de los sospechosos y en quintas que funcionaban como centros de tratamiento.
Las autoridades sanitarias y de la Sedronar informaron en el momento de los operativos que esos lugares no estaban habilitados para tareas de asistencia a personas con problemas de adicciones a sustancias psicoactivas.
Según fuentes judiciales, además de Medina, entre los acusados beneficiados con la excarcelación extraordinaria figura una mujer policía, cuyo defensor había pedido que la causa pase a la Justicia Federal. Ese reclamo aún no fue definido.
Medina estaba detenido, acusado de ser la “cara visible” de una asociación ilícita denunciada por estafas, reducción a la servidumbre y explotación laboral en, al menos, una comunidad terapéutica destinada a la rehabilitación de personas con adicciones que él promocionaba y que –como se consignó– no estaba habilitada, y donde se dieron a conocer las charlas motivacionales que el conductor brindaba.
En la cuenta de Instagram de la organización La Razón de Vivir hay videos publicados en los que se puede ver que Medina era un invitado asiduo a las reuniones con los jóvenes que intentan dejar atrás el consumo de drogas. El conductor, que trabajaba como operador socioterapéutico en adicciones, hablaba sobre su propia experiencia con las drogas y cómo las adicciones lo alejaron de sus hijos.
Así lo reconoció en su indagatoria, aunque fue enfático en afirmar que dio esas charlas de buena fe, que jamás recibió comentarios de los jóvenes sobre algunas de las situaciones descriptas en la acusación y que de ninguna manera tenía conocimiento de que en las quintas se llevara adelante alguna actividad ilegal. Fue el único de los 17 detenidos que aceptó declarar en la fiscalía N° 8 de Quilmes, a cargo de Daniel Ichazo.
“Él iba simplemente los martes a dar una charla a los internos de 11 a 17 y cobraba 10.000 pesos, esa fue toda su participación”, había explicado el abogado Adrián Tenca poco antes de la indagatoria de Teto Medina.
El conductor de televisión fue liberado ayer, pasadas las 18.30, y sostuvo un contacto con la prensa al salir de la dependencia policial situada en Quilmes, en la que estuvo detenido desde la semana pasada.
“Soy un buen tipo y esto para mí fue terrible, nunca lo viví; lo único que quiero es decirles gracias a los chicos [por los jóvenes que están internados en el centro de tratamiento bajo sospecha judicial]; es que les voy a seguir dando charlas motivacionales, no los voy a abandonar, quiero seguir haciendo lo que hago, recuperar a los chicos con adicciones”, expresó .
Y agregó: “Ahora quiero irme con mis hijos”.
El líder, en prisión
Entre aquellos que continuarán en prisión se encuentra el presunto líder de la investigada comunidad terapéutica, Néstor Ezequiel Zelaya. Para el fiscal Ichazo, es el responsable de establecer los mecanismos de control que debían aplicarse en las quintas donde estaban internados los adictos. Así quedó establecido en la acusación con la cual la fiscalía sostuvo los pedidos de arrestos.
En ese escrito judicial también se señaló a ese imputado como el presunto responsable de definir cuáles serían los tipos de violencia física, psicológica y simbólica que sufrirían las víctimas en procura de someterlas para la explotación laboral.
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