La banda de los Rolex: la caída de los ladrones que roban relojes de lujo en Palermo, Puerto Madero y Belgrano
Tras un exhaustivo análisis de las cámaras de seguridad y otras tareas investigativas, la Policía de la Ciudad desbarató una organización acusada de haber protagonizado seis hechos en el lapso de un mes
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LA NACIONGabriel Di Nicola
El primer golpe fue el 26 de agosto pasado, dos minutos antes de las 14. La víctima caminaba por el barrio de Belgrano cuando fue atacada por detrás por un delincuente que, después de sujetarlo por el cuello, le arrancó el Rolex que llevaba puesto en su muñeca izquierda. El ladrón se subió a una moto conducida por un cómplice y escapó. La secuencia fue filmada por la cámara de seguridad de un local gastronómico. No fue un caso aislado: en menos de un mes hubo otros cinco robos similares en Palermo y Puerto Madero.
Pero, por un tiempo, la banda de los Rolex no va a operar más. Después de una exhaustiva investigación que incluyó el análisis de numerosas imágenes captadas por el Centro de Monitoreo Urbano (CMU) del gobierno porteño, detectives judiciales y personal de la Policía de la Ciudad identificaron y detuvieron a seis sospechosos acusados de haber protagonizado esos robos. Dos de ellos cayeron el mes pasado en una espectacular persecución que se extendió a través de los carriles exclusivos del Metrobus y terminó en Vicente López.
Así lo informaron a LA NACION fuentes judiciales. La investigación, a cargo del fiscal José María Campagnoli, comenzó el 2 de septiembre pasado cuando el personal de un local gastronómico situado en La Pampa y Castañeda aportó a las autoridades de la Comisaría Vecinal 13A de la Policía de la Ciudad las imágenes del violento hecho ocurrido a las 13.58 del 26 de agosto pasado.
La banda de los Rolex volvió a operar dos días después, en Palermo; la víctima fue un subcomisario de la Policía de la Ciudad que almorzaba en un restaurante.
Dos semanas después la organización criminal “se mudó” a Puerto Madero y su víctima fue un automovilista que circulaba en un Ford Mustang por Alicia Moreau de Justo y Azucena Villaflor. Se trató de un violento ataque donde los ladrones actuaron en dos motos y un auto.
“Los hechos en estudio no resultan ser episodios aislados, sino que la investigación promovida ha puesto al descubierto el funcionamiento de una organización criminal cuya permanencia en el tiempo se observa acreditada desde el 26 de agosto de 2021, abocada a la comisión de delitos contra la propiedad en el ámbito de la ciudad de Buenos Aires, en la modalidad coloquialmente conocida como motochorros. Esta se caracteriza por la actuación coordinada de distintos sujetos que, merced al seguimiento que realizan de las víctimas tanto en motocicletas como en automóviles, encuentran el momento propicio para abordarlas y despojarlas con suma violencia de elementos de valor. En los casos en estudio se trata de relojes marca Rolex”, sostuvo el fiscal Campagnoli en un dictamen presentado ante el juez en lo criminal y correccional porteño Manuel de Campos.
El primer ataque, el que ocurrió en Belgrano, no fue denunciado por la víctima, pero a partir del análisis hecho en el Centro de Monitoreo Urbano (CMU) se pudo determinar que los motochorros habían contado con el apoyo de cómplices que circulaban en un VW Up! blanco.
Es más: poco después de escapar de la escena del robo, el motochorro que se apoderó del Rolex se subió al auto, según el registro de las cámaras de seguridad analizadas por el personal de la Policía de la Ciudad. Los operadores del CMU pudieron determinar la chapa patente del vehículo.
Las filmaciones también dieron cuenta de que la banda utilizaba un Chevrolet Agile, vehículo que estuvo en la escena del robo en Palermo.
“La caída de esta banda demuestra, una vez más, el trabajo profesional de la Policía de la Ciudad. Los investigadores seguían desde hace meses a estos delincuentes y gracias al seguimiento de las cámaras del CMU determinaron el modus operandi utilizado, individualizando a sus miembros y los vehículos que usaban”, dijo a LA NACION el ministro de Justicia y Seguridad porteño, Marcelo D’Alessandro.
Como se dijo, las cámaras de seguridad fueron clave para reconstruir el trayecto que hicieron los ladrones después de cada golpe. Por ejemplo en el hecho de Puerto Madero, los investigadores determinaron que después del robo el conductor del Chevrolet Agile se detuvo en Independencia y Tacuarí. “En ese momento descendió uno de los delincuentes, cruzó hacia una estación de servicio y se encontró con otro hombre al que le habría entregado el reloj sustraído”, según el expediente judicial al que tuvo acceso LA NACION.
Los investigadores sospechan que los Rolex sustraídos eran reducidos poco después de cada robo. “Antes de llegar a sus domicilios, los ladrones ya habían entregado los relojes”, dijo un detective.
A partir del análisis de las chapas patente de los vehículos y otras medidas de prueba, los detectives judiciales y policiales pudieron determinar que los sospechosos residían en el partido de Moreno.
Después del robo en Puerto Madero, la banda de los Rolex volvió a Belgrano. El 12 de septiembre pasado, a las 14.50, atacó a un hombre en un Sucre y Castañeda. El robo fue visto por una oficial de la Policía de la Ciudad que si bien no pudo detener a los sospechosos, dio aviso para que personal de la División Servicios Especiales de Tránsito de la fuerza de seguridad porteña lograra “localizar” a los sospechosos que huían en una moto. Tras una cinematográfica persecución por los carriles exclusivos del Metrobus, fueron detenidos en Vicente López.
Faltaba detener a otros integrantes de la banda. Es que a pesar de aquellos arrestos, la organización continuó con sus golpes y el 24 de septiembre pasado le robaron el reloj a una mujer que caminaba por República Árabe Siria al 3100.
Ese mismo día, dos horas después, los delincuentes volvieron a atacar. En esa oportunidad, en Costa Rica y Humboldt; a la víctima le robaron un Rolex Oyster Perpetual Data cuando estaba sentada a la mesa de un restaurante.
Un día después, los ladrones volvieron a la ciudad de Buenos en el Chevrolet Agile blanco y la chapa patente activó el sistema de alerta del denominado Anillo Digital, lo que permitió que la Policía de la Ciudad interceptara el vehículo y detuviera a tres sospechosos.
Fuentes judiciales resaltaron el trabajo de análisis hecho por los operadores del CMU y del Anillo Digital que permitió identificar y detener a los presuntos asaltantes.
“La tecnología aplicada a la seguridad dio resultados una vez más y las cámaras del CMU y el Anillo Digital, permitieron hacer un seguimiento de los delincuentes, atraparlos y ponerlos a disposición de la Justicia”, concluyó D’Alessandro.
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