Inseguridad en Cariló: recuperaron 29.000 dólares y 126.000 pesos, parte del botín de una serie de robos

MAR DEL PLATA. Tras una serie de allanamientos, la policía bonaerense detuvo a tres supuestos delincuentes y secuestró 29.000 dólares y más de 126.000 pesos, dinero que sería parte del botín de una serie de robos ocurridos los últimos días en la ciudad balnearia de Cariló, partido de Pinamar.

La semana pasada, LA NACION había informado de una serie de robos que había alertado y preocupado a la comunidad de Cariló. Los hechos delictivos habían ocurrido en un contexto de falta de móviles y personal policial, situación advertida y denunciada hace tiempo por vecinos y referentes de distintos sectores del distrito.

La modalidad delictiva repetida es la del ingreso a viviendas aprovechando la ausencia de sus propietarios o cuando están presentes, pero sin tomar contacto con ellos.

Unas veces, los delincuentes actúan cuando los dueños de casa duermen y otras cuando se encuentran en dependencias alejadas del escenario donde vieron que hay valores para sustraer.

Fuentes judiciales y policiales confirmaron esta seguidilla de robos que se acentuaron entre las vacaciones de invierno y el pasado fin de semana largo de agosto, oportunidad en la que 19 víctimas se presentaron en la comisaría para dar cuenta del accionar de los delincuentes.

La mayoría de los robos los sufrieron propietarios, entre ellos un diplomático argentino. También algunos inquilinos que se habían alojado en algunas de estas viviendas, todas en un escenario dominado por frondoso bosque y calles oscuras durante las noches, un escenario característico de este balneario, ya que no tiene iluminación en la vía pública.

La investigación emprendida por personal de Subdelegación Departamental de Investigaciones (Sub DDI) de Villa Gesell, encontró pistas que llevaron a identificar a posibles sospechosos, algunos de los cuales habían llegado a la zona para desempeñarse en obras de construcción en pleno desarrollo en este frente de playas.

Los tres allanamientos solicitados por el fiscal de Pinamar Juan Pablo Calderón fueron autorizados el pasado viernes por el juez de Garantías de Villa Gesell, David Mancinelli, y permitieron aprehender a tres de los supuestos autores de los robos, además de armas y una importante cantidad de dinero en efectivo.

Según un detalle al que accedió LA NACION, en domicilios de Villa Gesell en los que residían los supuestos delincuentes se incautaron un revólver calibre .32 largo que tenía pedido de secuestro activo y 20 municiones. También se secuestró una pistola marca Browning calibre 9 milímetros, con la numeración limada y diez proyectiles.

“No hay elementos para vincular estas armas a los hechos que se investigan”, confiaron fuentes del caso.

De los tres aprehendidos, solo uno quedó detenido, por tenencia de arma ilegal. Otro de ellos tenía pedido de paradero activo de un juzgado de Menores y el tercero un pedido de captura librado por un tribunal del Departamento Judicial Dolores.

Todos, según surge de la investigación previa, trabajaban en obras en la zona. En al menos uno de los casos a metros del inmueble donde concretaron uno de los robos. Esa situación les habría permitido cumplir con tareas de inteligencia previa y tener conocimiento directo de movimientos de moradores de viviendas que luego fueron blanco de robos.

Estos hechos coinciden con la aún vigente falta de patrulleros que tiene Pinamar, situación que en distintos niveles también se da en otros distritos de la costa atlántica. Entienden que los móviles que los móviles que deberían recorrer esas calles fueron derivados por el Ministerio de Seguridad bonaerense como refuerzo para comunas del conurbano.

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