Horror en General Madariaga: Mató a su novia, escondió el cuerpo debajo de la cama y luego intentó suicidarse
La joven, de 22 años y madre de dos niños, tenía varias heridas de arma blanca; el presunto autor del femicidio, Damián Vegas, de 31, quedó internado, con lesiones leves.
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MAR DEL PLATA. El cadáver de Eugenia Montenegro, a quien su familia había visto por última vez el jueves en la ciudad de General Madariaga y a la que buscaban desde el inicio de este fin de semana, estaba debajo de una cama de su propia casa, donde su novio lo ocultó para luego irse a su domicilio, donde un allegado lo encontró con heridas cortantes en el cuello, en un presunto intento de suicidio tras cometer el crimen.
El cuerpo de la joven, de 22 años y madre de dos niños de una relación anterior, presentaba varias puñaladas entre pecho y cuello y evidencias de que habían transcurrido varias horas entre la violenta muerte y su hallazgo, logrado esta madrugada, con participación de personal policial y del Cuerpo de Bomberos.
Damián Vegas, de 31 y ahora aprehendido bajo acusación de femicidio, pudo ser trasladado hasta el Hospital Municipal de General Madariaga, donde quedó internado con custodia policial. Según se pudo conocer, la lesiones que se infligió son todas cortantes y menores, por lo que este martes ya estaría en condiciones de afrontar la declaración indagatoria.
La madre de Montenegro, según información a la que accedió LA NACION, fue la que realizó la denuncia una vez que transcurrió más de un día desde la última vez que supo de ella, una situación que consideró anormal y que la preocupó más de lo habitual.
El caso causó conmoción en esta pequeña localidad, donde a media tarde se realizó una marcha por calles céntricas para pedir justicia por el femicidio de Montenegro y acción de las autoridades para evitar nuevos hechos de violencia de género en el distrito.
Montenegro vivía en una pequeña y muy modesta casa, en el fondo del lote donde reside su madre, en calles 2 de Abril y Estados Unidos. Allí también recibía a sus hijos, que al momento de su asesinato estaban con su padre biológico.
La investigación se había puesto en marcha cuando, también según fuentes de la pesquisa, un familiar de Vegas llamó a un número de emergencias médicas para pedir asistencia para el hombre, que estaba desvanecido sobre el piso y bañado en sangre, en el patio de su casa de la calle Brasil al 600.
Ese dato coincidió con la inquietud de la madre de Montenegro, que se había acercado hasta la comisaría del distrito para advertir sobre una prolongada ausencia de su hija. Así llegaron hasta la casa de la joven y encontraron su cuerpo oculto debajo de la cama.
No hay registros de denuncias previas sobre hechos de violencia entre la pareja pero la madre de Montenegro confirmó que mantenían una relación “difícil” y confirmó que ella evitaba ir a la casa de su hija cuando Vegas estaba con ella.
La autopsia se realizaba esta tarde en Pinamar. Si bien en principio trascendió que el asesinato se habría cometido de “20 a 30 puñaladas”, fuentes de la investigación aseguraron a LA NACIÓN que solo vieron lesiones a la altura de cuello y pecho.
La causa judicial se tramita por estas horas en la Unidad Fiscal de Pinamar, que está a cargo de Juan Pablo Calderón e interviene en la jurisdicción por estar en turno. Ordenó una serie de peritajes –entre ellos, secuestro de armas blancas halladas en el domicilio de Vegas– para sumar evidencias que permitirían confirmar la hipótesis de un femicidio seguido de tentativa de suicidio. La investigación continuará a partir de este martes a cargo de su colega Walter Mércuri, a cargo de la Unidad Fiscal de General Madariaga.
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