Horas decisivas: intentan develar si el cuerpo hallado en el río es el del empresario Eugenio Schneider
La Prefectura trasladó a la morgue de Gualeguaychú el cadáver hallado el sábado a la noche en la cosa de la isla Dolores, al sur de Concepción del Uruguay; su complexión física coincide con la descripción del hombre que desapareció el jueves a la tarde cuando se adentró en las aguas en la localidad de Casablanca, en Paysandú, donde es propietario de un frigorífico y uno de los mejores restaurantes de Uruguay
- 3 minutos de lectura'
La situación derivada de la desaparición de Eugenio Schneider, el empresario germano-argentino de 81 años radicado en Paysandú, y visto por última vez el jueves pasado a la tarde, entró en horas decisivas.
El sábado a la noche, personal de la Prefectura Naval Argentina encontró un cuerpo flotando a la altura del kilómetro 165 del río Uruguay, en la costa de la Isla Dolores, varios kilómetros más al sur de Casablanca, localidad uruguaya donde Schneider posee un frigorífico y una red de carnicerías, además de un restaurante considerado como uno de los mejores de Uruguay.
La fiscal de Concepción del Uruguay Gabriela Seró ordenó a la fuerza federal el traslado del cuerpo a la morgue judicial de Gualeguaychú, donde se determinará, mediante técnicas forenses, la identidad del fallecido y el mecanismo de su muerte.
No obstante, calificadas fuentes del caso dijeron a la nacion que, la contextura del cuerpo y la edad presumible podía coincidir con la descripción fisonómica de Schneider.
La Armada de Uruguay, que tiene jurisdicción en la margen oriental del río, informó en un comunicado que aquel cadáver, “según la complexión física y descripción, podría coincidir” con el empresario, por lo que “ya fue informada la familia y el señor cónsul argentino local a efectos de poder reconocer efectivamente el cuerpo”.
La última vez
Schneider fue visto por última vez el jueves. Al mediodía había almorzado en La Pulpería, su restaurante en Casablanca. Desde allí fue a su vivienda, la Casona de los Cuatro Vientos, construida en 1862. “Me voy al río”, dijo. Se despojó de sus ropas, caminó unos metros, cruzó un pequeño portón e ingresó directo al río. Al menos hasta antes de la pandemia solía nadar en esa zona. Había dejado de hacerlo cuando tuvo covid. Pero esta vez no regresó. Ese mismo día, a las 17, su familia radicó la denuncia en la Prefectura de Paysandú.
Schneider nació en Buenos Aires en 1940 y vivió hasta los 22 años en la Argentina. En esos años estudió Literatura Inglesa con Jorge Luis Borges en la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA. En 1978 llegó a Uruguay procedente de la selva valdiviana chilena y se convirtió en el dueño del Frigorífico Casa Blanca (Fricasa), que a su vez era propietario del pueblo entero de Casablanca.
Ese fue el último pueblo privado de Uruguay hasta que en 2004, en plena crisis financiera, Schneider firmó un acuerdo con el Estado: se entregaron todas las casas al Ministerio de Vivienda a cambio de la reducción de la deuda de Fricasa. Los antiguos ocupantes, que no pagaban renta, comenzaron a comprar sus viviendas con planes de financiación a largo plazo.
Fue el despegue del viejo saladero y frigorífico prácticamente quebrado. Hace seis años, en una entrevista con El País, Schneider valuó sus negocios en unos US$ 35 millones. Agregó que Fricasa realizaba el 3,5% de la faena de Uruguay y contaba con más de 630 empleados. El frigorífico abastecía a 18 carnicerías propias y exportaba a unos 40 países.
Fanático de la música barroca, casado, sus ocho hijos y una treintena de nietos y bisnietos suyos viven aún en las inmediaciones de Casablanca, en el departamento de Paysandú.
Otras noticias de Desaparición de persona
- 1
La desesperada reacción de un hombre al que le querían robar el auto con su hija en el interior
- 2
Jonatan Leiva: El policía que evitó que una mujer se arrojara al vacío desde el puente de una autopista
- 3
Mataron a golpes a una niña de cuatro años y por el crimen fue detenida su madrastra
- 4
“Nos aseguramos de que las cárceles no sean escuelas del crimen”, dijo Patricia Bullrich al inaugurar un penal federal