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Habló el padre del chico que apareció con un tiro en la cabeza en Palermo: ”Quiero saber cómo llegó mi hijo a ese lugar”

Laurentino, como se identificó el señor, dijo que se enteraron de la aparición del adolescente de 14 años el sábado por un llamado; estaba perdido desde el viernes, cuando no asistió al colegio

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Habló el padre del chico que estaba perdido y apareció con un tiro en la cabeza en Palermo
Laurentino, el padre del chico que estaba perdido y apareció con un tiro en la cabeza en Palermo

El padre del adolescente de 14 años que fue hallado con un disparo en la cabeza atrás del Club de Amigos, junto a las vías del ferrocarril Belgrano Norte, en el barrio porteño de Palermo, pidió saber de qué manera su hijo llegó a ese sitio, mientras que los investigadores intentan determinar si el menor fue víctima de un delito o intentó suicidarse. Esta mañana, el ministro de Seguridad de la Ciudad de Buenos Aires, Marcelo D’Alessandro, deslizó que la hipótesis de un secuestro está “en principio descartada”.

”Quiero saber cómo llegó mi hijo a ese lugar, porque no es fácil llegar. Eso es lo que quiero saber y nada más”, dijo este lunes Laurentino, como se identificó el padre del joven, desde la puerta del Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez, adonde el menor está internado.

La madre del chico hizo una denuncia por paradero en una comisaría de la Ciudad el viernes a las 19.45, después de que su hijo no volviera de la Escuela Normal Superior en Lenguas Vivas Sofía E. Broquen de Spangenberg, conocida como Lengüitas -adonde supuestamente había ido-, y luego de enterarse que en realidad nunca había llegado al colegio. Al menor finalmente lo encontraron oficiales de la Policía Federal Argentina (PFA) ayer.

En esa línea, el padre confirmó a la prensa que su hijo fue hallado con un disparo en la cabeza junto a las vías del ferrocarril Belgrano Norte, a la altura del predio de la empresa de residuos Cliba, tal como había adelantado LA NACION.

Además, hizo un pedido para aquellas personas que pueden haber visto al adolescente llegar a ese lugar y les solicitó que se acerquen a las comisarías porteñas para aportar datos.

”Nos enteramos por un llamado. No sabemos nada más”, se limitó a decir el hombre, quien agregó que el menor se encuentra internado en coma farmacológico. En esa comunicación el menor decía que se encontraba en un “lugar lleno de piedras”. Entonces, agentes del Departamento Antisecuestros de la PFA analizaron los datos y establecieron el sitio exacto adonde estaba, en el que se levantó también un revólver calibre .22 y un teléfono celular.

”Estamos analizando a la familia, no por si tienen antecedentes, sino a nivel relaciones entre ellos, estado emocional del chico”, aseguró a la Agencia Télam un investigador.

Ahora el fiscal federal Santiago Marquevich espera la evolución del adolescente y mientras ordenó una serie de diligencias para establecer si fue víctima de un delito.

Secuestro, descartado

Desde la desaparición hasta que hallaron al joven se abrieron una serie de líneas de investigación. Una de ellas tenía que ver con un posible secuestro debido a que la familia había recibido un llamado que pedía una recompensa de $80.000 para que el chico apareciera.

Sin embargo, esta mañana el ministro de Seguridad porteño aclaró con respecto a eso que la comunicación impactó en celdas de penales en la zona bonaerense de Florencio Varela, por lo que las autoridades creen que se trató de una estafa que intentaron cometer presos que vieron desde la cárcel en las redes sociales los carteles de búsqueda del menor.

Por eso, los investigadores intentan determinar si ese mensaje extorsivo fue realizado por internos de algún penal de la zona -las Unidades 23, 24, 32 y 42 del Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB)-, luego de conocerse la difusión de la búsqueda del adolescente por parte de la familia.

“De la tarjeta SUBE y de las llamadas telefónicas, de fotos que realizó el chico, se determina que hubo una serie de movimientos de él que determinan que no estaba secuestrado”, precisó D’Alessandro en Radio Mitre este lunes y agregó en ese sentido: “Lo del secuestro extorsivo en principio está descartado por diferentes razones”.

El sábado ya casi por la noche, la hermana del adolescente recibió un mensaje y fotos de él, según dijo el funcionario capitalino. “No se entendía bien, pero se podía determinar la zona por la celda [del teléfono]. La investigación la tenía la Brigada Antisecuestro y determinan que era por atrás del Club de Amigos. Se inicia un rastrillaje. Lo encuentran con vida, no se podía incorporar bien, habla, manifiesta que se habría disparado, se encuentra un arma y el teléfono al lado de él. Se van a hacer los peritajes”, detalló D’Alessandro.

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