Fusiles, pistolas y un lanzacohetes: la venta de municiones por la Web, la clave para descubrir un arsenal en San Isidro
La policía bonaerense detuvo a un hombre que acopiaba armas en una casa de la localidad de Martínez; la investigación había comenzado a fines del año pasado tras una denuncia de la Unidad Fiscal Especializada en la Investigación de Ilícitos relacionados con Armas de Fuego, Explosivos y demás Materiales Controlados (UFI-ARM)
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La llamativa publicación en Internet encendió las alertas. Un usuario de una empresa de comercio electrónico había puesto a la venta partes de fusiles Mauser y municiones para cargar distintas armas. A fines del año pasado, ante la sospechosa oferta, la Unidad Fiscal Especializada en la Investigación de Ilícitos relacionados con Armas de Fuego, Explosivos y demás Materiales Controlados (UFI-ARM), hizo una denuncia para investigar al vendedor. Seis meses después, la policía bonaerense descubrió en un altillo de una casa de Martínez, en San Isidro, un arsenal compuesto de pistolas, revólveres, escopetas, una ametralladora, municiones, un lanzacohetes antitanque y explosivos.
Tras el allanamiento, dado a conocer en las últimas horas, personal de la Dirección Departamental de Investigaciones (DDI) de San Isidro detuvo a un sospechoso que quedó imputado de los delitos de tenencia de armas de guerra, tenencia de material explosivo y acopio de municiones, según informaron fuentes policiales.
Tras la denuncia de la UFI-ARM y un debate sobre la competencia, tomó intervención en el expediente el fiscal de Martínez Gastón Garbus.
“Tras una serie de medidas de prueba y tareas investigativas se pudo ubicar la zona de Martínez donde residía el sospechoso. El lugar exacto se obtuvo a partir de la IP [una dirección única que se asigna a un dispositivo cada vez que se conecta a Internet y que contiene la información de ubicación geográfica del dispositivo y de la conexión] que activaba a partir de las publicaciones en la Web”, explicó a LA NACION una fuente policial.
Finalmente, la Justicia ordenó un allanamiento en un inmueble de Francisco Muñiz al 800, en Martínez. El arsenal estaba oculto en un altillo cuya acceso estaba cerrado con un candado.
La policía bonaerense secuestró:
- Tres pistolas calibre 22 marca Glock
- Dos pistolas calibre 22 marca Bersa
- Una pistola calibre 22 marca Rugger
- Tres revólveres calibre 32 marca Taurus
- Cuatro Revólveres calibre 38 Special marca Smit & Wesson.
- Una escopeta a chimaza marca Battan
- Dos rifles Winchester calibre 50
- Tres fusiles Mausser sin numeración
- Una pistola ametralladora mini Uzi con numeración suprimida
- Un lanzacohetes antitanque LAW 72 de 66 mm
- 500 cartuchos de escopeta de diferentes marcas
- 500 cartuchos calibres 45; 50; 22; 38; 32; 9; 11,25
- 500 cartuchos de escopeta utilizados
- 300 vainas para ser reutilizadas; puntas de diferentes calibres
“De la investigación surge que el sospechoso comercializaba las municiones y cartuchos, similares a los que se secuestraron en el allanamiento”, explicó una de las fuentes consultadas.
El empleado judicial intentó explicar que las armas secuestradas por la policía bonaerense eran de él, pero que no había llegado a renovar las licencias de legítimo usuario ante la Agencia Nacional de Materiales Controlados (ANMaC), el exRegistro Nacional de Armas (Renar).
Entre las armas decomisadas figura una ametralladora Mini Uzi, calibre 9mm, con la númeración limada y por la que un civil no podría contar con autorización para su tenencia.
“En el allanamiento fueron secuestradas dos espoletas de proyectil balístico que fueron detonados por personal especialista de acuerdo al protocolo previsto”; dijeron fuentes de la DDI de San Isidro.
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