Estaba perdida hace tres años y su familia la encontró gracias a un video en redes sociales
La joven, de 24 años, en un principio no reconoció a sus familiares; la justicia ordenó que reciba la asistencia médica
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Una joven con problemas psiquiátricos que se encontraba perdida hace tres años, y vivía en situación de calle, fue hallada por su familia luego de hacerse visible en un video de Tik Tok. A partir de una denuncia recibida desde la línea telefónica 145, y el aporte la red social, los gendarmes dieron con la joven en los alrededores de estación Once.
En el video, que lejos de ayudar a la joven se burlaba de ella con música de Thalia, la gente comenzó a solidarizarse con ella en los comentarios mencionando datos referenciales, de ayuda alimentaria y más. Así, terminaron comunicándose a la línea de asistencia y denuncia por trata de personas.
La búsqueda estuvo a cargo del Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Federal Nº 8, quien orientó la inmediata judicialización de la denuncia por la presunta infracción a la Ley Trata de Personas. En esa línea de trabajo, efectivos del Escuadrón de Investigación de Delitos Complejos y Procedimientos Judiciales “Buenos Aires” iniciaron tareas de búsqueda y cotejo de datos sobre la mujer.
Tras ubicar la zona donde deambulaba la joven y los posibles lugares donde podría pasar las noches, determinaron que se encontraba en la intersección de las avenidas Rivadavia y Pueyrredón. A partir de ese hallazgo, familiares se hicieron presentes en el lugar y pudieron reconocerla acreditando su parentesco.
Según fuentes de la fuerza de seguridad, en un principio la joven estaba muy confundida y no reconoció a los familiares. Ante la presión intentó darse a la fuga subiéndose a un colectivo, pero integrantes de la fuerza de seguridad federal junto a personal del SAME lograron tranquilizar a la mujer y trasladarla hasta el Hospital Ramos Mejía donde diagnosticaron su cuadro psiquiátrico. Allí, además se dio a conocer que había ingresado al hospital varias veces a causa de abusos.
El magistrado interviniente dispuso que no se trataría de una situación de Trata de Personas y ordenó que reciba la asistencia médica pertinente, quedando a cargo de sus familiares.