En Warnes al 1500: un nuevo golpe a la mafia de los desarmaderos de autos de alta gama
Casi 8000 piezas provenientes del desguace de unos 200 vehículos estaban almacenadas en el depósito de un local de venta de repuestos; se usaron cinco camiones para retirar las piezas, pero fue insuficiente, dado el volumen del material incautado
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LA NACION
No bastaron cinco camiones para cargar el inmenso volumen de autopartes de origen ilegal encontradas en el depósito de un comercio de repuestos automotrices de la zona de Warnes, en Chacarita. Las autoridades de la Ciudad seguirán durante toda la semana con viajes para poner a resguardo las casi 8000 piezas incautadas, la mayoría, provenientes del desguace de autos de alta gama presumiblemente robados.
El operativo, que se concretó ayer y continuaba hoy, fueron dispuestos por el fiscal porteño Federico Jorge Taramelli y ejecutado por la División Sustracción de Automotores de la Policía de la Ciudad, fue realizado en un negocio situado en la avenida Warnes al 1500. Allí, según informó el Ministerio Público Fiscal de la Ciudad, “los investigadores comprobaron que se comercializaban piezas ilegales provenientes de vehículos robados, ya que no tenían su homologación para ser vendidas”.
Además, se verificó que el negocio comunicaba con un galpón lindante, donde se hallaron autopartes usadas pertenecientes a vehículos de alta gama, estando todas en infracción a la Ley 25.761, ya que no contaban con la autorización del Rudac (Registro Único de Desarmaderos y Actividades Conexas).
Como resultado del allanamiento, se incautaron un total de 7887 autopartes, entre las cuales se encontraban 457 computadoras de automotor, 232 amortiguadores, 94 radiadores, 256 puertas, 28 cajas de velocidades, 89 guardabarros, 253 tapas de cilindro, 1.732 pistones, 459 cigüeñales, 58 paragolpes, 2 tubos de GNC, 212 capots, 25 volantes con airbag y 212 espejos retrovisores.
Entre las autopartes halladas también se observó que había material prohibido por cuestiones de índole ambiental, debiendo haber sido desguazadas y compactadas oportunamente. La investigación de la fiscalía maneja como hipótesis que las mismas se encontraban allí para su comercialización.
Lo hallado, según se deduce, es el producto del desaguace de al menos 200 vehículos.
A raíz del hallazgo, se identificó al responsable, un hombre argentino de 43 años, a quien el fiscal Taramelli imputó el delito de “desarmado de automotores y venta de autopartes ilegales, previsto en la Ley 25.761”. El imputado quedó a disposición de la jueza María Carolina De Paoli. En tanto, el comercio fue clausurado.
Los repuestos y autopartes incautados fueron trasladados a la playa judicial de Ferré al 2800, en el barrio porteño de Villa Soldati. Según explicaron fuentes del Ministerio Público, en el lugar trabajaron cinco camiones de la Unidad Operativa de Fiscalización Integral, “pero dada la magnitud de lo hallado se espera que deban hacerse presentes en el trascurso de la semana más camiones para poder retirar la cantidad de autopartes en infracción”.
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