En Aldo Bonzi: llamó al 911 para que dispersara a unos jóvenes en la calle pero denunció que un policía se puso a beber con ellos
El efectivo acudió al lugar y, después de unos segundos, tomó de una botella que le compartieron los hombres; se inició una investigación
- 2 minutos de lectura'
Una vecina de la localidad bonaerense de Aldo Bonzi denunció a un efectivo policial por tomar de una botella, que supuestamente contendría alcohol, que le había compartido un grupo de jóvenes. Se suponía que el uniformado se había acercado al lugar para dispersar a los hombres por un llamado al 911 por ruidos molestos, pero la queja concluyó en una situación insólita.
A través de la línea telefónica, una mujer se comunicó con las autoridades para quejarse de que había un grupo de chicos que estaban bebiendo y protagonizando algunos disturbios en una plaza del municipio de La Matanza.
Entonces, un patrullero se acercó al sitio para disuadir a los jóvenes, pero el efectivo que descendió a hablar con ellos aceptó tomar un trago de una botella de plástico -en las imágenes que se viralizaron no se distingue el contenido, aunque se presume que es alcohol- y luego se quedó conversando un rato más.
Minutos después el policía se retiró del lugar, por lo que la vecina, indignada, volvió a llamar al 911 y señaló: “Acá la Policía está tomando con los chicos. Un policía paró y está tomando cerveza con ellos”.
Tras la difusión de la llamativa imagen, el uniformado, que prestaba servicio en la seccional de Aldo Bonzi, fue pasado en disponibilidad preventiva para iniciar una investigación oficial sobre su accionar.
Otras noticias de Hoy
Más leídas de Seguridad
Dio una vuelta en el aire. Cruzó la calle sin mirar, fue embestido por un auto y se salvó de milagro
Conurbano. Quisieron robarle cuando iba a trabajar a un frigorífico y mató a uno de los delincuentes con una cuchilla
Ciberestafas. Alerta por falsos mensajes de WhatsApp con la imagen de uno de los fiscales que acusó a Cristina Kirchner
Accidente y polémica. Los policías fallecidos habían sido enviados a dar seguridad a un partido de fútbol a más de 700 kilómetros de su base