Sangriento robo: detuvieron al dueño del auto que usaron los autores del homicidio del empresario en San Antonio de Padua
Lo acusan de facilitar el vehículo utilizado por los asesinos a los que todavía siguen buscando
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La policía apresó al dueño del Volkswagen Gol gris que usaron los autores del homicidio del empresario Gabriel Esteban Izzo, ocurrido en la madrugada de ayer en su casa de San Antonio de Padua, durante un sangriento asalto, en el que también resultó herida de gravedad su esposa, Silvana Petinari.
Los investigadores buscan ahora al hombre que manejaba ese vehículo y que fue filmado por cámaras de seguridad cuando descendía de ese automóvil tras estacionarlo el viernes pasado, minutos después de las 3.30, frente al kiosco situado en Gervasio Pavón 3525, en Castelar Sur.
Según fuentes judiciales, el conductor del vehículo que fue grabado por las cámaras de seguridad instaladas en las adyacencias a la casa de Izzo y su esposa, en Italia al 1000, en el mismo momento en que ocurría el sangriento asalto, fue identificado por un vecino del kiosco que pertenece al propietario del vehículo y vive, frente al local. Este domicilio fue allanado de urgencia, aunque no encontraron rastros del sospechoso, que ya fue identificado. El testigo agregó que el sospechoso tiene problemas de adicción y trabaja, ocasionalmente, como mecánico.
El dueño del Volkswagen Gol gris había sido detenido horas antes, durante un operativo en el que la policía también identificó a dos hombres, uno de ellos hijo del propietario del vehículo. Ambos sospechosos quedaron como aprehendidos, con el objetivo de ser identificados y establecer si poseen antecedentes, según informaron fuentes de la investigación. Fueron liberados algunas horas después.
Hasta el momento, ninguno de los sospechosos identificados habría participado directamente del homicidio de Izzo ni del ataque contra Petinari. “Todavía no sabemos los nombres de los dos agresores que ingresaron en la casa y dispararon contra Izzo y apuñalaron a su esposa”, indicó una fuente policial.
El dueño del automóvil, habría sido identificado como Walter Rodríguez Sierra, de 53 años y nacionalidad uruguaya: Fue detenido cuando salía de la casa de su hijo, situada en Juan Martínez al 2400, entre Cuyo y Hortiguera, de Ituzaingó.
Al revisar la vivienda, la policía encontró 80 municiones calibre .40; 151 municiones calibre 9 mm, y seis municiones .380. Algunas de esos proyectiles coinciden con las marcas y calibres de las usadas durante el tiroteo registrado en la casa de la víctima, en Italia al 1000.
Rodríguez Sierra está acusado como presunto coautor del homicidio de Izzo por haber sido el facilitador del automóvil que usaron los autores del homicidio que, ayer a la madrugada irrumpieron en al casa de la víctima, luego de romper una persiana de gruesos listones de madera. Se declaró inocente al ser indagado en la fiscalía.
El Volkswagen había sido encontrado en Gervasio Pavón 3525 de Castelar, frente a un kiosco llamado “Mandale mecha”. En su interior, los efectivos secuestraron una manopla, una barreta, un cortador neumático tipo cizalla (corta candado), y herramientas que serán sometidas a peritajes para tratar de establecer si fueron usadas en el sangriento asalto.
Además del seguimiento a través de las cámaras de seguridad, una de las claves para encontrar el automóvil, fue declaración de un testigo que afirmó que se cruzó con un rodado de esas características desde el que arrojaron dos objetos que corresponderían a elementos robados de la casa del matrimonio atacado. Dichos elementos fueron hallados a tres cuadras de la esquina de Aquino y Blas Parera.
Los allanamientos que derivaron en la detención del dueño del vehículo y el secuestro del mencionado rodado, fueron autorizados por el juez de Garantías de Morón que aceptó los requerimientos de los fiscales Marisa Monti y Claudio Oviedo.
No pasó inadvertido para los investigadores que el dueño del automóvil, tenía en su casa dos monitores de 50 pulgadas conectados a dos CPU, que usaba para observar las imágenes de las cámaras de seguridad instaladas en varios kioscos de la zona, que le pertenecen.
Mientras tanto sigue la búsqueda de los autores del homicidio de Izzo y del ataque contra la empresaria Silvana Petinari, quien seguía internada en grave estado.
Un brutal ataque
Izzo sufrió cinco heridas, provocadas por los balazos que les dispararon los asaltantes, y dos puntazos que le asestaron. Murió en el acto. Su cuerpo fue hallado, ensangrentado, en el pasillo distribuidor de ambientes. El empresario había enfrentado a los delincuentes tras escuchar el ruido provocado por la irrupción en su hogar.
A su lado tenía el revólver calibre .38 y un poco más lejos, los investigadores hallaron la pistola 9 mm con la que intentó defenderse primero. Pero debido a que el proyectil quedó trabado, descartó la pistola y tomó el revólver. Los allegados a Izzo reconocieron que ambas armas pertenecían a la víctima y que era legítimo usuario, informaron fuentes de la investigación.
La esposa de la víctima mortal fue apuñalada en el ojo derecho y la cadera.
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