Descubren que Benedit era dueño de una flota de cinco teléfonos celulares
A dos meses de su muerte, la policía intenta determinar quiénes utilizaban esos aparatos y con quién se comunicó el asesor financiero
Dos meses después del hallazgo de su cadáver en la Costanera Sur, el análisis de la computadora de Mariano Benedit aportó un dato que podría orientar a los investigadores hacia los motivos del trágico final que tuvo el asesor financiero, de 31 años. Los peritajes pusieron al descubierto que el joven tenía una flota de cinco teléfonos Nextel a su nombre.
Son datos que hasta el momento los investigadores desconocían. Y ahora se tratará de determinar con quiénes se comunicaba Benedit desde esos aparatos.
Así lo informaron a LA NACION calificadas fuentes con acceso al expediente. Después de recibir los peritajes hechos por la División de Apoyo Tecnológico de la Policía Federal, la fiscal Graciela Bugeiro, a cargo de la investigación, dispuso una serie de medidas de pruebas sobre la flota de teléfonos.
"En el peritaje hecho en la computadora de Benedit, se descubrió una factura de pago de cinco líneas de teléfono Nextel a nombre del asesor financiero. Ahora los próximos pasos serán tratar de determinar quiénes, además de Benedit, usaban esos teléfonos y con quiénes se comunicaban", agregó la fuente consultada.
La existencia de la flota de teléfonos Nextel no fue comentada a la fiscal por dos de los socios de Benedit que declararon como testigos. Otro dato que se incorporó en la causa judicial es que después de la muerte del asesor financiero se cambió la clave de un mail personal de él, agregaron fuentes del caso.
El 16 de diciembre pasado, Benedit salió de su departamento de Arenales al 1600 a las 12.30 para ver a un cliente. A las 13, debía comunicarse con su hermana Dolores para arreglar un punto donde encontrarse. Pero a las 13.01, según las imágenes de las cámaras de seguridad del astillero Tandanor, Benedit llegaba a la Costanera Sur en su moto, que dos meses después sigue sin aparecer. El cuerpo del asesor financiero -que había sido padre quince días antes de morir- fue descubierto por un colectivero cerca de las 16 del día siguiente. Tenía un disparo en su sien derecha.
"En el lugar se encontró la pistola Bersa calibre 9 milímetros con la que se efectuó el tiro que terminó con la vida de Benedit y la cual estaba registrada a su nombre, y su mochila, en cuyo interior se encontró su celular y su computadora", había explicado la fiscal Bugeiro, que ordenó la pericia sobre la computadora.
El 29 de diciembre, la esposa del financista, Ángeles Fornieles, declaró como testigo. La mujer contó que su marido era asesor financiero, que trabajaba en su oficina de Esmeralda al 1000 y que no podía aportar muchos detalles más, ya que Benedit "era muy reservado sobre sus clientes". Fornieles es representada en el expediente por los abogados Roberto Durrieu Figueroa y Juan Martín López Quesada.
Fornieles brindó una información que hasta hace poco tiempo atrás la familia no le daba importancia: entre 30 y 45 días antes de la muerte de Benedit, una persona se cruzó con la madre del asesor financiero, Cristina, en la puerta del edificio de Arenales, y le preguntó: "Señora, ¿acá vive Mariano?". A ese hombre nadie lo conocía.
La principal hipótesis de los detectives de la Policía Federal es que Benedit se suicidó. En su mano derecha se encontraron rastros de explosivos. La familia quiere saber si fue una decisión propia o si el asesor financiero fue inducido a quitarse la vida. Es lo que quiere determinar la fiscal Bugeiro.
Sospechas
La funcionaria, agregaron las fuentes consultadas, también espera que la Secretaría de Inteligencia (SI) aporte la información sobre una presunta relación que tenía Benedit con una ciudadana peruana sospechada.
La información llegó a la Policía Federal, pero no a la fiscal. "En el expediente no consta el documento de Inteligencia", explicó, tiempo atrás a LA NACION, una importante fuente judicial.
La información que la SI le entregó a la Policía Federal sostenía que Benedit habría estado vinculado con el mercado negro de dólares falsos, que eran ingresados en la Argentina por una organización liderada por una mujer de origen peruano. Además, ésta comandaba una banda que traficaba cocaína camuflada en gel y cremas.
"La presunta líder de la banda desapareció de los lugares que solía frecuentar después de que Benedit fue hallado sin vida. Suponemos que ya no está en el país; quizá se fue a Perú. La SI sostiene que el día que desapareció el asesor financiero [16 de diciembre] se tenía que encontrar con ella", explicó la calificada fuente con acceso al expediente. Pero nada de esa información de la SI está en el expediente.
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