Denunciaron como desaparecidos a dos jubilados y los encontraron asesinados en el conurbano
Después de una semana de búsquedas, los policías hallaron los cuerpos de una mujer, de 75 años y un hombre, de 72, en viviendas de José León Suárez y en José C. Paz
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LA NACIONGustavo Carabajal
A Estela Domínguez Fernández y Osvaldo Devesa, de 75 y 72 años, respectivamente, los buscaban desde hace diez días. Sus familiares habían radicado denuncias por averiguación de paradero. Con una diferencia de 24 horas los cuerpos de los jubilados fueron encontrados en José León Suárez y en José C. Paz, en dos asesinatos en el conurbano sin vinculación entre los casos.
Según fuentes policiales, el cuerpo de la mujer, de nacionalidad española, fue hallado dentro de un tambor de doscientos litros en un terreno situado en Bidondo al 1500, en el partido de San Martín.
Mientras que el cadáver del hombre fue encontrado debajo de un contrapiso en la vivienda situada la calle Luján Sierra, de José C. Paz. Dicho inmueble pertenece a un albañil que realizaba algunos trabajos en la casa del jubilado.
Al revisar la vivienda, los investigadores de la policía bonaerense hallaron el Volkswagen Gol de la víctima, manchas de sangre en una pared y en un sillón. A partir de estos indicios, los responsables de la pesquisa convocaron a los técnicos de la División Policía Científica de la fuerza de seguridad provincial y rompieron el contrapiso en la cochera.
Debajo de la loza, los peritos hallaron el cuerpo del jubilado cuya desaparición había sido denunciada hace una semana. La última señal de vida de Devesa fue su paso, a bordo de su Volkswagen Gol, por el peaje Ituzaingó de la Autopista del Oeste, en dirección a Moreno
Luego de realizar una búsqueda de imágenes de las cámaras de seguridad del municipio, los policías encontraron el vehículo. Un dispositivo grabó su paso el sábado pasado Moreno. Esa misma madrugada, había pasado por una estación de servicio YPF en Ituzaingó. En las imágenes de las cámaras de seguridad el automóvil era remolcado en dirección a Moreno por el conductor de un Renault Sandero.
Con el número de patente de Renault Sandero, los investigadores establecieron la identidad del propietario y localizaron su casa, en José C. Paz. Al llegar a la vivienda, los policías hallaron el Volkswagen Gol de la víctima y dentro de la casa, cubierto con el contrapiso, el cuerpo del jubilado.
Ante el hallazgo del cadáver, los funcionarios de la fiscalía N° 8, de Morón, ordenaron la detención del dueño de la vivienda, un albañil que había realizado una serie de trabajos en la casa del jubilado y que, además, le llevaba remedios. Para los investigadores, el móvil del homicidio habría sido la intención del ahora detenido de quedarse con la propiedad y el automóvil de la víctima.
Casi en el mismo momento, la hija de Devesa denunciaba su desaparición, en José León Suárez, la familia de Domínguez Fernández solicitaba la colaboración social para encontrar a la jubilada. “Por favor, ayúdenme a difundir, buscamos a mi abuela”, expresaba entonces Lucas Pedraza, de 27 años, nieto de Domínguez Fernández, junto a la foto de la mujer desaparecida que difundió por redes sociales. Cuando los policías interrogaron al nieto de la mujer desaparecida encontraron algunas contradicciones entre sus dichos y los testimonios de los vecinos.
La declaración del nieto también se daba de bruces con la descripción de cuándo había visto por última vez a Domínguez Fernández, el testigo Oscar Sanabria. Este hombre alquilaba una de las tres viviendas edificadas en el terreno donde vivían la jubilada desaparecida, su hija y nieto.
Ante las contradicciones halladas en la primera declaración testimonial, los responsables de la pesquisa convocaron nuevamente a Pedraza a la comisaría. Allí, ante las pruebas que indicaban que había mentido, se quebró en llanto y confesó su presunta responsabilidad en el homicidio de su abuela.
Pero el nieto no habría actuado solo. Tuvo un cómplice. Los policías también apresaron al inquilino que vivía en una de las tres casas del terreno. Tanto el sospechoso Pedraza como su cómplice quedaron detenidos, acusados por su presunta responsabilidad en el homicidio de la jubilida.
Con estas pruebas los efectivos de la Dirección Departamental de Investigaciones de San Martín solicitaron al fiscal Ernesto Farber la orden de allanamiento para revisar el predio de Bidondo al 1500, en José León Suárez.
Durante el procedimiento, los efectivos incautaron un búho de madera con el que el nieto habría golpeado en la cabeza a Domínguez Fernández. El segundo allanamiento se concretó en el departamento en el que vivía el inquilino, quien también fue detenido.
Al llegar al fondo del terreno, los policías hallaron un tambor de 200 litros con el cuerpo de la jubilada.
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