Demoraron a tres menores por las amenazas de bomba
Ya suman 2800 los llamados al 911 que denuncian amenazas de bombas en los colegios de la provincia de Buenos Aires, desde el mes pasado hasta hoy. Las autoridades comenzaron a tomar acción y la idea es que estos llamados dejen de ser un juego de niños. Hoy demoraron a tres jóvenes menores de 18 años y detuvieron al padre de otra, por la causa de “intimidación pública”. Además, se secuestraron los teléfonos celulares utilizados para este fin.
Las autoridades se muestran preocupadas por el incremento en este tipo de denuncias. “Lo que venimos diciendo con María Eugenia Vidal es que no es una broma, es un delito”, dijo Cristian Ritondo, ministro de Seguridad de la provincia. Informó que todos los días se realizan entre 15 y 20 allanamientos desde Justicia Federal y Provincial. “Los padres deberán hacerse responsables por lo que le cuesta al estado”, agregó.
Fuentes del ministerio confirmaron que esta mañana se realizaron varios operativos en la zona oeste y sur del conurbano de Buenos Aires a raíz de una investigación federal iniciada por múltiples falsas amenazas de bomba en colegios. Los chicos aprehendidos, con edades entre 11 y 17 años, son el resultado de esta investigación en la zona de Moreno, Ituzaingó y Morón. Están sospechados de estar involucrados en al menos trece llamados de amenaza.
Se cree que el mayor de los chicos, que tiene 17 años, realizó al menos cuatro falsas amenazas de bomba al colegio Jefferson de Ituzaingó Nº 562, de Moreno. El sospechoso no es alumno de ese establecimiento.
Otro de los jóvenes demorados tiene 13 años. Sus llamados fueron dirigidos a tres establecimientos: el colegio J.B. Alberdi, de Santa Rosa, la escuela Arias, de Castelar Norte y el Colegio Americano. “Tenemos verificado al menos siete amenazas”, dijo uno de los investigadores.
El tercer menor aprehendido, tiene 11 años, y habría llamado, al menos dos veces, a su propia escuela, la N°2 de Moreno.
En los operativos se secuestraron además 10 teléfonos celulares. Fuentes judiciales informaron que "el único punible es el chico de 17 años, que fue imputado del delito de intimidación pública." Esta causa es llevada adelante por el Juzgado Federal N° 3 de Morón.
En zona sur también se demoró a una persona hoy. En este caso, es un adulto de 42 años, padre de una joven de 14, que habría usado el celular para realizar amenazas de bomba al colegio San Clemente. La escuela está ubicada en San Mauro entre las calles 390 y 391, en Quilmes. También se secuestró el teléfono celular, marca Iphone, que se habría utilizado para hacer los llamados. En la causa Interviene la Unidad Fiscal de Investigación Nº7, del Departamento Judicial de Quilmes.
Para mitigar este conflcto, el Senador Provincial Andrés De Leo presentó un proyecto de ley que prevé entre 5 y 30 días de prisión para los responsables de amenazas telefónicas. Cuando la falta sea cometida por un menor de edad, como sucede en muchos de estos casos, serán los padres o tutores los responsables y serán ellos los sujetos de la sanción.
Los estudiantes y sus padres están cansados de las amenazas. Los alumnos no pueden estudiar y los padres deben retirarlos continuamente de los establecimientos. “En el colegio de mi hijo, el Colegio Parroquial Inmaculado Corazón de María, ubicado en Morón, acaban de hacer la quinta amenaza en una semana; yo ya autorice a otra madre para buscar a mi hijo porque no puedo dejar mi trabajo todo el tiempo”, dice Gabriela Miño. Cuenta que a los chicos los trasladan cada vez al gimnasio de la escuela que es a una cuadra y ahí los retiran los padres. “El día que sea verdad, ya nadie va a creer nada”, dice.