Crimen en Barracas: el policía acusado de ayudar a “plantar” un arma dijo que fue a la comisaría a buscar un rollo de cinta
Se trata del oficial de la Policía de la Ciudad Facundo Torres, quien fue detenido anteayer después de haber sido sido señalado como colaborador en la modificación de la escena del crimen del joven futbolista Lucas González
- 5 minutos de lectura'
Está detenido y acusado de haber colaborado en la decisión de “plantar” un arma en la escena del crimen de Lucas González, el futbolista de las inferiores de Barracas Central asesinado por personal de la Policía de la Ciudad en noviembre de 2021. Hoy, durante su declaración indagatoria, el oficial Facundo Torres, apodado Cachorro, negó haber participado en el encubrimiento del homicidio del adolescente. Admitió que después de que sus compañeros (que estaban de civil y en un móvil no identificable) balearon sin motivo el auto en el que iban la víctima y otros tres chicos, fue con uno de los autores del tiroteo a la comisaría donde cumplía funciones, aunque sostuvo que lo hizo para buscar de su locker una cinta para preservar la escena de los hechos y no para procurar buscar un arma de réplica para modificar el contexto de la balacera y simular un tiroteo o una amenaza previa que no existió.
Así lo pudo reconstruir LA NACION de fuentes judiciales. Torres, detenido anteayer tras haber sido señalado en el juicio oral y público contra los supuestos asesinos del joven por uno de los oficiales imputados por el encubrimiento, fue indagado por la jueza Vanesa Peluffo y el fiscal Leonel Gómez Barbella, que están a cargo de la investigación.
Torres, de 25 años, está imputado por los delitos de “falsedad ideológica, privación ilegal de la libertad agravada por abuso funcional y sin previsión de la ley, encubrimiento agravado por la condición de funcionario público y por ser el delito precedente especialmente grave e imposición de torturas” en perjuicio de tres amigos de González.
“Nunca vi nada que me llamara la atención. Yo sé que hay un montón de gente que está involucrada como imputados en esta causa sin tener ningún tipo de vinculación”, sostuvo Torres en su indagatoria.
Según dijeron las fuentes judiciales consultadas, en su declaración indagatoria, Torres afirmó que el 17 de noviembre de 2021, tras el crimen del joven futbolista, fue a la sede la Comisaría Vecinal 4D de la Policía de la Ciudad, situada en Barracas, junto con Gabriel Issasi, uno de los tres policías juzgados como autores del homicidio.
“Torres dijo que fue con Issasi a la comisaría. Afirmó que él entró para buscar un rollo de cinta para preservar la escena del crimen y que su compañero lo esperó afuera de la seccional. Negó haber participado del encubrimiento”, sostuvo una fuente al tanto de la declaración indagatoria del sospechoso.
“No hay nada raro, que yo haya visto”, sostuvo en su declaración. Los informantes dijeron que Cachorro Torres no hizo referencia al arma “plantada” en el Volkswagen Suran en el que viajaban la víctima y tres amigos cuando fueron atacados a tiros por los tres uniformados que cumplían funciones en la Brigada 6 de la Comisaría Vecinal 4D, con jurisdicción en Barracas. Los cuatro jóvenes se dirigían hacia Florencio Varela después de haber ido a entrenar al club Barracas Central.
Según la agencia de noticias Télam, cuando el representante del Ministerio Público Fiscal le preguntó al sospechoso si su versión podía ser corroborada por algún testigo, Torres respondió que no lo había visto nadie. Luego agregó que, en su opinión, su detención obedecía a cuestiones políticas y que en el marco del caso “hay muchos policías inocentes detenidos”. Tras la indagatoria, la defensa del policía pidió la excarcelación.
Torres fue involucrado en la causa el jueves pasado por el oficial principal Héctor Cuevas, detenido y juzgado por el encubrimiento del crimen, quien al pedir declarar ante el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) N°25 lo señaló como uno de los policías que ayudó a plantar el arma en el auto en el que iban los cuatro jóvenes con la intención de simular un enfrentamiento con supuestos delincuentes.
Según Cuevas, el día del crimen Torres arribó a la escena del crimen en una moto y colaboró con el oficial Issasi, uno de los tres policías acusados del homicidio de Lucas, en la maniobra de encubrimiento.
Según el relato del imputado, Issasi fue quien “tira el arma” en la parte trasera del vehículo, luego de que otro de los policías enjuiciados, el subcomisario Roberto Inca, le dijera “andá a poner eso”. Cuevas dijo que la misma persona se acercó hasta la parte trasera del Volkswagen Suran, el vehículo donde viajaban González y sus amigos Julián Salas, Joaquín Zuñiga y Niven Huanca, que estaba abierto y “tiró el arma”.
Ante la declaración del principal, la Justicia solicitó a la Oficina de Transparencia de la Policía de la Ciudad informes sobre la geolocalización de la moto de Torres y de su celular para chequear los datos aportados por el oficial arrepentido. La información reveló que, efectivamente, ese policía se desplazó por la zona en donde se produjo el crimen y también se dirigió ida y vuelta a la Comisaría Vecinal 4D, donde se cree que pudo haberse apoderado de la réplica de pistola que luego fue “plantada” a las víctimas para crear un falso contexto de una amenaza armada repelida por los efectivos de la brigada.
Además, una cámara de seguridad registró el paso de una moto de la Policía de la Ciudad, la cual sería conducida por Torres, y cuyo acompañante es Issasi, lo que puede corroborarse mediante la vestimenta que este presentaba el día del hecho.
Además de Issasi, al debate llegaron imputados por el homicidio de Lucas y la tentativa de homicidio de sus amigos el oficial mayor Fabián Andrés López y el oficial Juan José Nieva.
Otras noticias de Gatillo fácil
Más leídas de Seguridad
Tragedia familiar. Un padre y su hija murieron tras caer a un arroyo en medio de una pelea
Drama en Mendoza. Murió un hombre que fue baleado por su madre anciana porque “no podía cuidarlo más”
40 segundos de horror. El violento ataque a cuchillazos de un hombre a una mujer en una pizzería de Núñez
Tiroteo en Villa Lugano. Un policía de la Ciudad recibió un balazo en el cuello mientras perseguía a un sospechoso