Crimen del playero | “No quiero existir más en este mundo de m...”, dijo la novia y madre del hijo de Bruno
En una serie de mensajes, la joven madre se volcó a las redes sociales para pedir justicia y exponer su dolor
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“No puedo dejar de ver las noticias, no puedo creer que sea mi novio, no quiero existir más en este mundo de mierda, donde nadie puede ir ni siquiera a laburar, no podés salir de tu casa porque corres riesgo de que estos hijos de puta te maten. Hagan algo por favor de una vez”, escribió a las 3.14 de hoy la novia y madre del pequeño hijo de Bruno Bussanich que tres horas y media antes había muerto tras recibir tres disparos en su lugar de trabajo en una estación de servicio Puma en la zona oeste de Rosario.
Ese sería solo el primero de los mensajes de Jimena madre que se volcó a redes sociales para pedir justicia y exponer su dolor. “Me duele tanto el corazón, destruyeron mi familia, hijos de re mil puta”, fue el segundo mensaje 15 minutos después.
El siguiente mensaje de la joven sumó: “¿Cómo hago para que mi bebe entienda que él ya no va a volver a casa con nosotros nunca más? ¿Que ya no vamos a dormir los 3 juntitos abrazados? No puedo más”.
El siguiente posteo lo subió pasadas las 9 de la mañana y junto a una foto de la pequeña familia en la que expresó: “Cuidanos desde donde quieras que estés ahora mi amor. Acá te vamos a extrañar mucho con Valu, pero vamos a recordarte siempre con mucho amor. Algún día nos volveremos a reencontrar, por ahora es un hasta luego mi vida. Te voy a mar el resto de mi vida, fuiste el hombre de mis sueños”.
Ya por la tarde y cuando la noticia había tomado conocimiento a nivel nacional, Jimena escribió: “Muchas gracias a todos por sus mensajes, ver cómo hablaban de Bruno me llena el alma, sin dudas él era un ser maravilloso, excelente persona, súper compañero. ¡Siempre con esa hermosa sonrisa a pesar de todo! Él era demasiado para este mundo, por eso le tocó irse a un lugar mejor”.
Padre de Valu y fanático de Rosario Central
Bruno Bussanich tenía 25 años cuando ayer, cerca de la medianoche, recibió tres disparos y murió en su lugar de trabajo en una estación de servicio Puma en la zona oeste de Rosario.
El joven era padre de un pequeño niño de solo dos años e impulsado por esa familia, buscaba obtener un trabajo ligado a lo que había estudiado como Técnico electromecánico en la Escuela de Educación Técnica Profesional (EETP) Nº 466 “General Manuel Nicolás Savio”.
Hincha fanático de Rosario Central, Bruno se presentaba en la red social LinkedIn de la siguiente manera: “Estoy preparado para realizar todo tipo de tareas del área técnica, esto abarca desde interpretar y/o realizar planos, hasta utilizar un torno o una fresadora (computarizados o no). Me gusta el trabajo en equipo, mi objetivo es adquirir experiencia para formarme como profesional”.
La firma de la nota que el sicario dejó tras matar este sábado a la noche a Bruno de tres disparos, decía “Zona norte, sur y oeste. Unidos”. Aunque todavía no hay una certeza sobre quién puede estar detrás de estas maniobras “terroristas” –como coinciden en encuadrar los hechos Pullaro y Bullrich- ese mensaje siembra la hipótesis de que varias bandas criminales se podrían haber unido para enfrentar las políticas de mayor rigor y restricciones en las cárceles. Esa es una versión que manejan en los despachos oficiales.
Junto al cuerpo del joven estaba su billetera, el dinero con el que contaba y la nota mafiosa que alertó a todo Rosario. Horas después del crimen de Bussanich la policía encontró un auto incendiado, que se habría utilizado en el crimen. Es un Fiat Duna, un modelo que varios testigos apuntan que llevó al sicario para matar al empleado de la estación de servicio Puma.
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