Crimen de Morena: se negaron a declarar los dos motochorros detenidos por el homicidio

Los hermanos acusados de matar a Morena Domínguez, la niña de 11 años asesinada ayer cuando fue asaltada por dos motochorros cuando caminaba hacia la escuela, se negaron a declarar esta tarde ante la fiscal Silvia Bussano, funcionaria a cargo de la investigación del crimen.

Así lo informaron a LA NACION fuentes judiciales. Se trata de Miguel Ángel Madariaga, de 28 años y apodado Miguelito, y a Darío Humberto Madariaga, conocido por su alias de Lolo. Los hermanos están imputados del delito de homicidio en ocasión de robo en concurso real con encubrimiento, que tiene prevista una pena máxima de 25 años de cárcel.

La imputación de encubrimiento se debe a que la moto secuestrada a los sospechosos y que, se presume, fue utilizada por los motochorros, tenía pedido de secuestro porque había sido denunciada como robada.

Paradójicamente, ese rodado fue sustraído en la esquina de la Unidad Funcional de Instrucción 7, de la fiscal Bussano.

Morena, según la autopsia, murió por un desgarro en el hígado producto del golpe profundo que recibió.

“Después de todas las tareas de investigación que se llevaron a cabo ayer, se logró determinar la identidad de los dos autores que están detenidos”, había explicado la representante del Ministerio Público en una entrevista con el canal de noticias C5N.

La fiscal Bussano agregó: “La fiscalía tiene las pruebas necesarias para acreditar prima facie que estos [por los hermanos Madariaga] son los autores del hecho”.

Morena fue asesinada ayer, a las 7.27 según registró una cámara de seguridad privada que grabó la secuencia del mortal ataque de los motochorros en Molinedo al 3200, en Villa Diamante, Lanús. La chica estaba a metros de ingresar en la escuela Almafuerte, donde estudiaba. Había sido una de las primeras veces que caminaba sola rumbo al colegio. La agresión fue brutal. Morena fue golpeada y arrastrada.

La autopsia determinó que la muerte fue causada por un fuerte golpe en la zona abdominal. Los forenses determinaron que sufrió un desgarro en el hígado y una lesión en un rinón. Los peritos especulan en el informe preliminar que se trataría de lesiones provocadas por una patada. La grabación de las cámaras de seguridad exponen el momento en que, con la chica en el suelo, uno de los motochorros baja del rodado y golpea a la menor para llevarse el celular.

Miguel Madariaga fue detenido cuando intentaba intercambiar ese teléfono por paco. Ese sospechoso había cumplido una condena en el Complejo Federal de Marcos Paz desde diciembre hasta junio pasado, cuando recuperó su libertad. También tenía un pedido de detención vigente del 7 de agosto pasado emitido por el Tribunal Oral en lo Criminal y Correccional 30 porteño a la Policía Federal Argentina, por una condena dictada el año pasado, señalaron las fuentes.

El rastro hace ese sospechoso llegó por la delación intempestiva de M.A.A., el menor inimputable de 14 años que había sido demorado por los agentes de la Patrulla de Respuestas Inmediatas de la Municipalidad de Lanús (PRI) se convirtió, así, en el primer dato que condujo la investigación hacia Miguel Ángel Madariaga, de 28 años, detenido junto a su hermano, Darío, como presuntos autores del conmocionante crimen.

Un sargento de la policía bonaerense afirmó que un menor que acababa de ser aprehendido por efectivos de las patrullas municipales de Lanús dijo de manera espontánea, y sin que nadie se lo preguntara: “Mirá, el que la mató fue Miguelito. Yo estaba con Miguelito en la moto Corven gris y la guardó en la casa”.

Finalmente, se descartó la participación de ese menor (que registra 21 ingresos en comisarías en solo dos años) en el crimen y se avanzó en el arresto de los hermanos Madariga, que esta tarde se negaron a declarar.

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