Córdoba. El atacante del intendente de San Francisco aceptó su culpa y una pena de 8 años, pero igual será juzgado

CÓRDOBA.- El próximo martes 4 de abril será el juicio por el intento de asesinato contra el intendente de San Francisco, Damián Bernarte, ocurrido en noviembre del año pasado en esa ciudad del sudeste provincial. En la audiencia no se expondrán los hechos y ya se sabe –según consta en el acta-acuerdo de procedimiento abreviado firmada por los abogados de las partes– que el acusado acepta ser condenado a ocho años de prisión.

El odontólogo Carlos Lucato, de 52 años, aceptó ser el autor del disparo que casi se cobra la vida de Bernarte. El Juzgado de Control aprobará lo que decidieron la defensa del imputado y el fiscal Bernardo Alberione, a cargo de la investigación.

Bernarte recibió un tiro en el abdomen la madrugada del 6 de noviembre, a la salida de un evento que se realizaba por el Día del Bancario en el estadio Superdomo de San Francisco. Fue baleado cuando estaba por subir a su auto, estacionado en la esquina de 25 de Mayo y Vélez Sarsfield. Regresó al salón para buscar ayuda. Allí mismo dio el nombre y apellido de quien lo había baleado.

Lucato, según la investigación judicial, esperó a Bernarte dos horas y media en la calle, cerca de su auto, para atacarlo. Antes del disparo, Lucato y Bernarte discutieron y hubo un forcejeo. Luego de disparar, no escapó de inmediato: según captó una cámara –las imágenes son borrosas, pero el hecho se distingue–, abrió el vehículo de Bernarte y sacó lo que parecer ser un bolso. Después, se fue a una discoteca y regresó a las siete de la mañana a su casa, donde lo detuvieron. Antes había sido arrestado su hijo Renzo, de 27 años, por el parecido físico con el tirador. Pero lo liberaron al mediodía, cuando se comprobó que él no tenía ninguna relación con la consumación del ataque.

El fiscal enfatizó que lo primero que se logró descartar es que el ataque estuviese vinculado con el rol de intendente de la víctima. “Es una cuestión afectiva con una persona de su entorno que derivó en este hecho de violencia”, explicó el fiscal en ese momento.

La esposa de Carlos Lucato es empleada municipal; la familia estaría vinculada con la del intendente. Según la información que manejan los investigadores, Bernarte habría mantenido una relación sentimental con ella. Las esposas de ambos compartían una excursión al cerro Uritorco el día del ataque.

Hasta que la ambulancia llegó, recibió primeros auxilios por parte del presidente del Concejo Deliberante, Gustavo Klein, que es médico y estaba allí con su esposa, Verónica Pepino, vicedirectora del Hospital Iturraspe.

Diez días de internación tuvo el intendente. Cuando recibió el alta, siguió la recuperación en su casa; después, el 20 de diciembre pasado, reasumió su cargo: “Tenía muchas ganas de volver y creo que eso, además del increíble trabajo de los y las profesionales que me acompañaron en mi recuperación y el cariño recibido de tantas personas, es lo que verdaderamente me impulsa a seguir por este camino”.

“Una vez más le agradezco a cada uno de ustedes por el apoyo y el respeto, a Gustavo Klein por el compromiso y la responsabilidad con la que asumió su rol durante este tiempo, y a todo el equipo de gestión por su desempeño en la continuidad de todo este proceso”, añadió.

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