Conurbano salvaje: cortaba el césped y murió de un balazo al quedar en medio de un tiroteo entre policías y delincuentes
El crimen ocurrió en Caseros, en Tres de Febrero, cuando la víctima fue alcanzada por una bala mientras trabajaba cortando el pasto en la vereda de una casa
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Un hombre que trabajaba cortando el césped y podando árboles fue asesinado en Caseros, en el partido bonaerense de Tres de Febrero, de al menos un balazo, al quedar hoy en medio de un tiroteo entre policías y delincuentes que huían tras robar una camioneta.
Así lo informaron a la agencia de noticias Télam fuentes policiales y judiciales. La víctima, Mario Iannizzotto, de 38 años, era un “podador” autorizado por la Municipalidad de Tres de Febrero y fue alcanzado por una bala cuando estaba por comenzar a cortar el césped de la vereda de una casa.
La persecución terminó en la esquina de la avenida Pedriel y Ángel Pini, en Caseros, donde los delincuentes, que están aún prófugos, dejaron abandonada la camioneta blanca marca Toyota tras chocar contra un móvil policial.
“Nuestro apoyo y acompañamiento a la familia de Mario, laburante de 38 años, que recibió un tiro mientras trabajaba en Caseros. Quedó en medio de una persecución entre un grupo de delincuentes y la policía de la provincia, que comenzó en Villa Bosch por el robo de una camioneta”, informó la Municipalidad de Tres de Febrero en un comunicado de prensa en la red social X.
Nuestro apoyo y acompañamiento a la familia de Mario, laburante de 38 años que recibió un tiro mientras trabajaba en Caseros. Quedó en medio de una persecución entre un grupo de delincuentes y la policía de la provincia, que comenzó en Villa Bosch por el robo de una camioneta.
— Municipalidad de Tres de Febrero (@Municipalidad3F) February 7, 2024
Según una filmación de una cámara de seguridad instalada cerca de donde trabajaba la víctima, todo ocurrió a las 7.46.
Según las imágenes, Iannizzotto estaba cerca del cordón de la vereda, a punto de comenzar a trabajar, junto con un compañero, cuando pasó a toda velocidad la camioneta Toyota Hilux blanca donde escapaban los delincuentes y un patrullero. A los pocos segundos, la víctima cayó desvanecida.
“Mario era podador autorizado de la Muni y se capacitó en este oficio para ganarse la vida. Es muy injusto que un inocente pierda la vida mientras la Policía combate el delito. Esperamos que la Justicia haga su tarea para que no haya más ´Marios´ que lamentar”, se agregó en el citado comunicado de la Municipalidad de Tres de Febrero.
El raid delictivo había comenzado a las 7.30 cuando los delincuentes robaron la camioneta Toyota Hilux blanca en Tres de Febrero.
Ante el robo de la camioneta 4x4, se emitió un alerta y unos minutos más tarde un patrullero de la jurisdicción localizó el vehículo e inició una persecución que quedó registrada por varias cámaras de seguridad de la zona.
Un jefe policial explicó a Télam que los asaltantes comenzaron a dispararle a los policías que los perseguían y que en esas circunstancias la víctima resultó baleada en la zona abdominal cuando trabajaba frente a una casa de la calle Guaminí y General Hornos, en Caseros.
Como se dijo, la secuencia quedó registrada a las 7.46 por una cámara de seguridad y en la filmación se observa que la Toyota pasa a toda velocidad perseguida por el móvil y la víctima, que estaba con un compañero con un rastrillo y junto a una desmalezadora apoyada en el suelo, que se asoma para ver cómo continúa la persecución, tras lo cual se desploma tras recibir al menos un impacto de bala.
Iannizzotto fue auxiliado primero por su compañero y otros dos vecinos de la cuadra, y luego fue trasladado al hospital Carrillo de Ciudadela, adonde llegó fallecido.
Mientras que en la vereda quedaron tiradas las herramientas de los dos jardineros y sus respectivas bicicletas apoyadas contra la pared de la vivienda frente a la que cortaban el pasto al momento del crimen.
En tanto, los delincuentes continuaron con su huida por unas siete cuadras hasta que en la esquina de la avenida Perdriel -Diagonal 60 República- y Ángel Pini, también de Caseros, chocaron contra otro móvil, bajaron efectuando más disparos, abandonaron la camioneta robada y se escaparon a pie.
“Los imputados están prófugos, se fugaron en dirección a la villa Carlos Gardel”, dijo a Télam una fuente judicial.
Desde el lugar en el que embistieron al patrullero hay unas cuatro cuadras hasta ese barrio de la localidad de El Palomar, partido de Morón, ubicado detrás del Hospital Posadas.
La causa está en manos del fiscal Ernesto Farber, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 6 del departamento judicial San Martín, quien ya impartió una serie de directivas y puso a trabajar a los detectives de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de esa jurisdicción para procurar identificar y detener a los autores.
Los voceros judiciales indicaron que el fiscal también dispuso la realización de los peritajes balísticos para determinar con precisión si solo dispararon los delincuentes o si también hubo balazos policiales y de qué armas partieron la o las balas que asesinaron a la víctima.
Al respecto, los investigadores secuestraron dentro de la camioneta en la que iban los asaltantes una pistola calibre .22, vainas servidas de 9 milímetros y una munición intacta del mismo calibre.
Además, la fiscalía dispuso el secuestro de dos pistolas Bersa Thunder 9 milímetros utilizadas por los uniformados que persiguieron a los delincuentes con el objetivo de que sean sometidas a peritajes.
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