Condenaron a 14 años de cárcel a Jonathan Fabbro por el delito de abuso sexual
LA NACION
Abrazada con familiares, la mujer escuchó el veredicto. "Mi hija no mentía", dijo pocos minutos después. Jesica esperaba la sentencia para llevar "algo de tranquilidad" a la menor abusada sexualmente durante cinco años. "Les pido a todas las mujeres que denuncien porque se puede, más allá de quién sea quien las daña. Se hizo justicia", comentó la madre de la víctima. El exfutbolista Jonathan Fabbro fue condenado a 14 años de prisión por abuso sexual y corrupción de menores. En el juicio quedó expuesto que el hombre, de 37 años, que jugó en Boca, River y el seleccionado paraguayo, había atacado a su ahijada al menos cinco veces cuando la menor tenía entre seis y once años.
La resolución fue tomada por el Tribunal Oral en lo Criminal y Correccional (TOC) porteño Nº 12, integrado por los jueces Luis Márquez, Claudia Moscato y Darío Medina.
Fabbro no estuvo presente en la sala de audiencias cuando se leyó el veredicto. Está preso en el penal de Marcos Paz desde mayo del año pasado, cuando llegó extraditado desde México, donde había sido capturado por Interpol a fines de 2017. La familia de la víctima, representada por el abogado Gastón Marano, había solicitado una pena de 24 años de cárcel. En tanto, en su alegato, el fiscal Gustavo Gerlero había pedido que Fabbro fuera condenado a la pena de 12 años de prisión.
Fabbro fue encontrado culpable del delito de abuso sexual gravemente ultrajante al menos en cinco oportunidades agravado por estar a cargo de la guarda de la damnificada.
"Es muy duro para toda la familia. Es algo que no debería ser concebible. Por una parte esto nos pone tranquilos. Pero no hay alegría, solo tranquilidad para mi hija, y mucha tristeza. Mi hija no merecía lo que le hicieron. La Justicia argentina llega. Mi hija es una valiente que habló", afirmó Jesica, la madre de la víctima.
"Hubo ocasiones en que la familia sintió que se ponía en duda a la víctima, y eso es duro, es como una doble victimización que sufre la persona a la que le sucede esto y se la pone en duda, pero todo ha culminado en esto que es la palabra de la Justicia", afirmó el abogado Marano, según consignó Télam.
El representante legal de la víctima explicó que para el tribunal fue "fundamental" lo que se encontró en el teléfono celular del acusado, junto a otros elementos y testimonios. Fabbro, mientras fue leído el veredicto, estuvo en una sala contigua. También esperó el fallo allí su novia, la modelo Larissa Riquelme, que al conocer el veredicto se descompuso y tuvo que ser retirada de los tribunales en una ambulancia del Servicio de Atención Médica de Emergencias (SAME).
La condena impuesta a Fabbro tiene como fecha de expiración el 19 de diciembre de 2031. Fabbro había sido detenido en el estado mexicano de Puebla, cuando jugaba para el equipo los Lobos BUAP. La orden de arresto fue firmada por el juez en lo criminal y correccional porteño Santiago Quian Zavalía, que estuvo a cargo del expediente.
El impacto provocado en la familia al conocerse que Fabbro había atacado sexualmente a la adolescente quedó expuesto en la frase de Agustín, el hermano de la víctima: "Él era mi ídolo. Todas mis camisetas eran de él". Nadie en el entorno cercano de la menor abusada había sospechado que ese hombre al que llamaban afectuosamente "tío" tenía un comportamiento oculto tapado por su figura de deportista reconocido. El joven detectó el anormal contacto que tenía Fabbro con su hermana menor al encontrar conversaciones de chat.
Su ahijada puede no ser la única víctima de Fabbro. El exfutbolista tiene abierta otra causa en su contra en Paraguay, donde está acusado por el abuso sexual de una menor de cinco años.
El hombre condenado por abuso pasaba en México sus últimos años como deportista profesional, en el final de una carrera futbolística, que lo transformó en un personaje conocido. Vistió la camiseta de los dos principales equipos argentinos y se nacionalizó paraguayo -nació en Santiago del Estero- para competir internacionalmente con la camiseta de rayas blancas y rojas.
En Boca alcanzó su mayor logro deportivo al formar parte del plantel que ganó la Copa Intercontinental en 2003, con Carlos Bianchi como director técnico. Un año después se sumó al equipo colombiano de Once Caldas, con el que levantó la Copa Libertadores de América. Entre 2007 y 2013 jugó en los equipos paraguayos de Guaraní y Cerro Porteño, donde fue elegido mejor futbolista y resultó goleador durante varias temporadas. En 2010 obtuvo la ciudadanía de Paraguay y disputó 13 partidos para el seleccionado. Su presencia en revistas paraguayas fue permanente, no solo por sus triunfos deportivos, sino también por su relación con la modelo Larissa Riquelme. En julio de 2013 volvió a la Argentina con la camiseta del River Plate de Ramón Díaz, donde estuvo a préstamo un año, jugó 16 partidos e hizo un gol. Su carrera deportiva empezó entonces a dar sus últimos pasos y deambuló por ligas menos competitivas hasta que fue capturado en México.
"Fabbro mintió siempre", dijo la madre de la menor abusada sexualmente. El abogado de la querella señaló, por su parte, que estudiará el argumento de los jueces para fijar la condena a 14 años y dejó abierta la posibilidad de apelar el fallo para insistir con una sentencia mayor.
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