Así es el entrenamiento de los policías que usarán las pistolas Taser

Luego de la licitación pública internacional mediante la cual el Gobierno adquirió las primeras 100 pistolas electrónicas Taser X26P -a un costo de $5.285.000-, comenzó el entrenamiento para los agentes de la Policía Federal Argentina (PFA) y de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) que, a partir de septiembre, usarán esta nueva arma, considerada no letal por las autoridades nacionales, para inmovilizar a sospechosos y personas potencialmente peligrosas en contextos de gran aglomeración de público, como andenes de trenes y terminales aeroportuarias.

Cada una de las Taser X26P que serán provistas por la empresa Axon, ganadora de la licitación internacional, mide 18,5 centímetros de largo, pesa 204 gramos y tiene un costo de US$862. Su característica principal es que permite efectuar la captura de un criminal sin actuar con armas de fuego y está conformada por 12 partes diferentes: un cartucho que contiene el cable de conexión y el proyectil-electrodo, una mira láser, una linterna, el disparador, una sofisticada batería, una pantalla de navegación con botones de control, un seguro de uso ambidiestro, un generador interno de pulsos eléctricos, el alza y el guion, según consta en la información técnica a la que accedió LA NACION.

Cuando una de estas pistolas eléctricas es disparada, dos proyectiles con forma de dardo -enlazados a la Taser a través de un hilo de conexión- salen impulsados a 175 kilómetros por hora por la detonación de un cartucho de nitrógeno comprimido; su alcance máximo es de siete metros, aunque también puede ser utilizada directamente contra el cuerpo de un sospechoso sin necesidad de que haya una distancia mínima para accionarla: según el manual de uso de las fuerzas de seguridad, cada descarga eléctrica -que interfiere en la comunicación de los músculos con el cerebro y genera una perturbación del sistema nervioso- puede durar hasta cinco segundos.

"Los agentes solo podrán realizar una descarga. Cada una de estas pistolas será utilizada por una pareja de efectivos policiales; mientras uno de los integrantes del binomio realiza el disparo, el otro concretará la detención", explicaron a LA NACION los oficiales instructores de la Policía Federal que dictaron el curso. En la misma línea se expresó la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, al subrayar que esta herramienta será utilizada cuando haya dos o más agentes trabajando en conjunto: "En principio, las Taser van a reemplazar las armas comunes. Tal vez más adelante cada policía pueda utilizar ambas al mismo tiempo. Queremos sumar 200 pistolas más en el corto plazo, y por eso analizaremos en qué espacios o lugares es mejor utilizar un arma no letal para proteger la vida de las personas y de los agentes".

Para los instructores que están familiarizados con esa arma, representa una ventaja táctica en algunas situaciones. "Una pistola Taser evita la utilización de un arma de fuego; ante ciertas agresiones, los agentes policiales no tenían muchas opciones, estaban muy limitados respecto de su despliegue de fuerza, y con esta herramienta se puede evitar el contacto y neutralizar un ataque sin riesgo grave para la vida o la salud de la persona que tiene una actitud agresiva" y se necesita inmovilizar, explicaron los instructores federales que dictaron el curso en el Cuerpo de Policía Montada de la PFA.

Entre las novedades de las nuevas pistolas, se destaca que estas nuevas armas no letales tienen un complejo software que permite controlar la utilización de la herramienta para poder evaluar luego la legalidad de las acciones de los federales que las utilizarán. En una memoria digital, según explicaron funcionarios nacionales, se almacenan "todos los datos encriptados", y así queda un registro de "todas las acciones, fechas de uso, temperatura ambiente y duración de la descarga".

A su vez, con respecto a los mecanismos de control, se explicó que en el momento del disparo la pistola Taser expulsa también 20 microetiquetas con el número de serie de cada cartucho para identificar distintos patrones, como por ejemplo qué efectivo fue el que accionó el arma y desde qué lugar. El modelo X26P cuenta con un mecanismo interno que controla de forma permanente la estabilidad de la intensidad de las descargas.

Según afirma el Gobierno, al menos 105 países utilizan esta herramienta actualmente, entre ellos Alemania, Austria, Bélgica, Canadá, España, Francia, Grecia, India, Chile, Ecuador, Colombia y Brasil. Los manuales oficiales para aprender a utilizar las Taser dicen: "Los impulsos eléctricos controlados son similares a los que utiliza nuestro cerebro para transmitir las órdenes al sistema nervioso central, y cuando alcanzan al agresor le provocan hasta 20 contracciones musculares por segundo, inmovilizándolo de manera inmediata; sin embargo, el individuo nunca pierde el conocimiento y puede escuchar las órdenes del oficial".

Sobre la peligrosidad de esta herramienta y la posibilidad de que las descargas eléctricas generen una muerte, la Policía Federal explicó en los manuales de las pistolas Taser: "Depende de múltiples factores, pero si el amperaje es bajo y la duración de los pulsos es corta, los riesgos son casi nulos". Sobre la seguridad de uso, los manuales de la PFA destacan que "no hay en el mundo una herramienta que haya sido más estudiada por organismos independientes que las pistolas Taser".

La nueva herramienta policial

• Cien unidades: El Gobierno compró, mediante una licitación internacional, 100 pistolas Taser X26P y 1000 cartuchos. La operación comercial tuvo un costo de $5.285.000. El Ministerio de Seguridad pretende adquirir al menos otras cien unidades luego de un período de prueba. El miércoles se iniciaron los adiestramientos con esas pistolas.
• Parálisis momentánea: Esas pistolas disparan dos dardos, que quedan enlazados con el arma mediante un cable. Su máximo alcance es de 7 metros y cada descarga tiene la capacidad de perturbar el sistema nervioso y causar una momentánea parálisis durante cinco segundos. El arma cuenta con una memoria digital para controlar al usuario.

¿En qué casos podrán ser utilizadas?

En la resolución 395/2019, que lleva la firma de Patricia Bullrich , titular de la cartera de Seguridad, el Poder Ejecutivo indicó en qué casos los agentes podrán emplear las Taser.

• Para inmovilizar, proceder a la detención o para impedir la fuga de quien manifieste peligro inminente de lesionar a terceras personas o de autolesionarse.
• Cuando deba ejercerse la legítima defensa propia o de terceras personas.
• Para impedir la comisión de un delito de acción pública.

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