Cocaína con carfentanilo. Detuvieron al hijo del capo narco que vendió la “droga mala” que causó la muerte de 24 adictos

Con las primeras luces del día, la policía bonaerense sorprendió a Luca Nahuel Baigorria cuando salía de una reunión familiar. Intentó escapar, pero no llegó muy lejos. Y aunque se había jurado e insistía con que nunca más volvería a caer preso, perdió. Baigorria, más conocido como Dylan, hijo de Miguel Ángel Villalba, alias Mameluco, uno de los históricos narcos del noroeste bonaerense, era buscado desde hace un año y medio por envenenar con carfentanilo un cargamento de cocaína que, fraccionado, se vendió en un búnker de Puerta 8, de Tres de Febrero, el 1° de febrero de 2022. Ese veneno provocó la muerte de 28 adictos y dejó internados a decenas de consumidores.

Según confirmaron fuentes de la investigación al portal especializado de noticias Encripdata, personal de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) San Martín y de la División de Unidad Operativa Federal San Martín de la Policía Federal, junto con el Comando Unificado Federal de Recaptura de Evadidos (Cufre), coordinaron la búsqueda y captura en las últimas horas del sábado.

Sobre Dylan pesaba un pedido de captura desde febrero de 2022, acusado de formar parte de la banda que vendió la cocaína con carfentanilo que mató a 24 personas en Puerta 8. Las autoridades ofrecían una recompensa de 4 millones de pesos para quien aportara “información que conduzca directamente a su arresto”.

A las 6 de este domingo, efectivos de la DDI San Martín, a cargo de la comisario mayor María Cristina Suárez, sorprendieron a Dylan cuando salía de una reunión familiar. Intentó escapar, pero no llegó muy lejos. De 29 años, había jurado, se había jurado, que nunca más volvería a caer.

Dylan compartió la cárcel con su medio hermano Iván Gabriel Villalba, alias «Salvaje». A su madre le había prometido que nunca más pasarían un cumpleaños lejos, pero cuando recuperó la libertad en septiembre del 2021, se hizo cargo de Villa Lanzone y Villa Lavalle.

Kako, su otro medio hermano, se ocupó de El Gaucho, a pocas cuadras de Puerta 8. Y su primo Chucky se quedó por un tiempo con Villa Sarmiento, donde vive la madre de Dylan y Kako. Todos, obviamente, bajo las órdenes de Mameluco.

Pero la noche del 1º de febrero del 2022 todo cambió: después del partido de la Selección argentina contra Colombia por las eliminatorias hacia la tercera estrella, los transas de Mameluco vendieron las bolsitas rosas en Puerta 8. En el preciso instante en el que la droga entró en sus cuerpos, 24 personas murieron. Otras 80 tuvieron suerte: familiares y amigos pudieron llevarlas a tiempo al hospital más cercano.

Ocho días después, la Procuración General bonaerense, a cargo de Julio Conte Grand, informó que la cocaína estaba cortada con carfentanilo, un opioide sintético completamente desconocido hasta entonces en la Argentina.

En los Estados Unidos, en cambio, padecen hace muchos años una crisis de salud pública por el consumo problemático o recreativo de este tipo de drogas. En 2021 fallecieron 107.000 personas. El 66% fue por fentanilo. Según la Drug Enforcement Administration (DEA), el carfentanilo es 100 veces más potente que el fentanilo.

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