Cayeron otros dos barras por el homicidio del hincha de Luján y buscan a los hijos del presidente de Alem
Son los únicos prófugos por el asesinato; uno de ellos es el jefe de la barrabrava del club de General Rodríguez y, hasta el día del asesinato era director de Transporte del municipio
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LA NACIONGustavo Carabajal
La policía apresó en las últimas horas a otros dos barrabravas de Leandro Alem, por su presunta participación en el asesinato del simpatizante de Luján, Joaquín Coronel, ocurrido el 10 de julio pasado, en el estadio Municipal.
Según fuentes policiales y judiciales, los sospechosos detenidos habrían sido identificados como Diego Barrientos y Carlos David Capellani quienes se sumaron a Facundo Esteban Serrano, quien había sido apresado ayer. Del listado de cinco acusados sobre los que pesan órdenes de capturas dictadas por la fiscal Laura Cordiviola, seguían prófugos Ariel y Mariano González, los hijos del presidente del club Leandro Alem.
Capellani y Barrientos fueron apresados por efectivos de la Dirección Departamental de Luján en allanamientos realizados en San Miguel y General Rodríguez, respectivamente. A las órdenes de capturas contra los hermanos González, en las últimas horas la fiscal Cordiviola decidió sumar el pedido de detención de otro sospechoso.
En el caso de Ariel González, sería el presunto jefe de la barra brava del club Alem y, hasta el 11 de julio pasado, se desempeñaba como director de Transporte de la Municipalidad de General Rodríguez.
Luego de la agresión a los hinchas de Luján, perpetrada por un grupo de simpatizantes de Leandro Alem que recorrieron los 17 kilómetros desde General Rodríguez hasta Luján, en siete vehículos desde los que abrieron fuego contra los hinchas del club local, el municipio decidió cesantear a Ariel González de su cargo como director de Transporte.
Dos días después del crimen habían sido apresados César Ramírez, Mauricio Pare y Hugo Prezzo, debido a que conducían tres de los siete vehículos en los que se trasladaron desde General Rodríguez hasta Luján, los agresores.
Ramírez y Prezzo fueron imputados por “homicidio simple, lesiones leves y lesiones graves, todo calificado por uso de armas de fuego”. También se los acusa de “resistencia a la autoridad en concurso real agravado por ser cometido en el marco de un espectáculo deportivo”, indicaron.
En cambio, Pare es investigado por el delito de “encubrimiento calificado por la gravedad del hecho precedente y resistencia a la autoridad en concurso real”.
La causa pasó el lunes pasado al ámbito de la UFI para delitos complejos, lo que implica que fueron ampliadas “las herramientas y el personal necesario para llevar adelante el expediente”.
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