Burundanga y Clonazepan. El cóctel de pastillas que usaba una “viuda negra” para doblegar a sus incautos pretendientes
La mujer, de 40 años, utilizaba la plataforma Tinder para conocer a hombres que seducía y, luego, asaltaba; uno de ellos, un jubilado de 80 años, estuvo 48 horas durmiendo por los sedantes que le dio la mujer
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LA NACIONGustavo Carabajal
La policía apresó a una mujer de 40 años que se dedicaba a seducir a hombres mayores a los que, en plena cita, sedaba para robarles. La “viuda negra” fue arrestada en las últimas horas durante un allanamiento realizado por efectivos de la Policía de la Ciudad en Los Polvorines, partido de Malvinas Argentinas.
Cuando los investigadores policiales revisaron la casa de la acusada hallaron un arsenal de pastillas que la mujer utilizaba para sedar a las víctimas y minar su resistencia, con el fin de apoderarse de todos los objetos de valor y dinero de los hombres a los que seducía.
La viuda negra recurría a la plataforma de citas Tinder para conocer y seducir a los hombres a los que robaba. El hecho por el que fue acusada la mujer, de 40 años, ocurrió en octubre, en el barrio porteño de Saavedra. La víctima, un jubilado, de 80 años, denunció que la acusada le robó un celular y 50.000 pesos.
En su denuncia, el jubilado recordó a la mujer, a la que conoció por Tinder y a la que invitó a su casa. Luego de tomar una bebida juntos, se desmayó y se despertó 48 horas después.
Según fuentes policiales, la viuda negra tenía seis tabletas de clonazepam, una de Alplax, 14 pastillas de Rivotril y 38,1 gramos de burundanga, tal como se conoce a la escopolamina, una droga hipnógena que, entre otras características, doblega la capacidad de resistencia de una persona, con la agravante de que la víctima no recuerda qué ocurrió.
El principal componente de la escopolamina se utiliza especialmente para anestesias. Por tal motivo, sorprendió a los investigadores encontrar semejante arsenal de drogas y pastillas en la casa de la imputada, que era investigada por haber asaltado a un jubilado, de 80 años, el 26 de octubre pasado, en Saavedra.
Si bien la única denuncia contra la mujer fue presentada por ese jubilado, en función del dinero y la cantidad de pastillas secuestradas en su casa, los investigadores policiales abonan la sospecha de que hubo más víctimas.
En el juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional N° 33, a cargo del juez Alberto Brizuela, esperan que a partir de la difusión del caso aparezcan más víctimas.
Además del lote de pastillas, al revisar la casa de la imputada, situada en Coll al 2500, de Los Polvorines, los efectivos de la División Investigaciones Comunales 12 de la Policía de la Ciudad, encontraron ocho teléfonos celulares, 14 chips, una ganzúa, dos facas y $177.500 en efectivo.
Luego de revisar los registros del Ministerio Público Fiscal de San Martín, los investigadores comprobaron que la acusada había cometido otro asalto bajo la modalidad “viuda negra” en la zona. Además, a partir del hallazgo de 50 gramos de marihuana, se le inició una causa penal por infracción a la ley de estupefacientes.
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