Atraparon a uno de los jefes de las bandas de La Salada
El detenido es Leonardo Gaitán y estaba prófugo desde el 21 de junio pasado
A Leonardo Gaitán lo buscaban desde el 21 de junio pasado. Había logrado eludir los más de cincuenta allanamientos que terminaron con la captura de Jorge Castillo, también conocido como el "rey de La Salada". Un grupo de fiscales de Lomas de Zamora había pedido su captura por considerarlo el líder de una fuerza de choque que se dedicaba a golpear a los puesteros que no pagaban el alquiler de los lugares que les concedían para vender mercaderías en las calles adyacentes a las ferias Punta Mogote y Urkupiña.
Gaitán, alias "Cuco", fue apresado ayer por efectivos de la Jefatura Departamental Lanús en la localidad de Alejandro Korn, partido de San Vicente. Los policías encontraron al prófugo en la vivienda de un familiar.
Según declaró un testigo en el expediente, la banda que comandaba Gaitán manejaba el estacionamiento sobre las calles Pergamino y Virgilio, en el perímetro de la feria La Salada.
A partir de las declaraciones aportadas por otros testigos, los investigadores determinaron que el grupo comandado por Gaitán, también estaría integrada por otros sospechosos a los que se habría identificado en el expediente como Miguel Miculan, alias "Jairo"; Luis Romero, alias "Gato"; Sergio Miculan, alias "Tarta", y un imputado de quien sólo trascendió su nombre de pila: Gabriel, alias "Piti".
"Esta banda paraba al lado del portón de la feria Urkupiña y desde ahí señalaban a los clientes que salían de la feria y abordaban los remises. Si alguno de los integrantes de la banda advertía que el pasajero llevaba dinero o mercadería valiosa, seguían al remise y los asaltaban", explicó uno de los testigos.
A partir de una serie de pruebas incorporadas en el expediente, el equipo de investigadores del Ministerio Público de Lomas de Zamora, coordinado por el fiscal general adjunto, Sebastián Scalera, determinó la existencia de tres bandas o asociaciones ilícitas que se repartían diez cuadras adyacentes al complejo La Salada para cobrarles alquileres de entre 500 y 800 pesos a más de 7000 comerciantes, a cambio de tener un "permiso" para instalar armazones de un metro cuadrado en las calles y veredas.
El precio del alquiler variaba según la ubicación del puesto, si estaba en la esquina era más caro y los que se instalaban contra la pared, más económicos. Una de esas bandas era la de Los Cucos, que junto con Los Chaqueños y Los de River se repartían varios millones de pesos de los alquileres que cobraban por cada día de feria.
Según consignaron los fiscales en el dictamen de más de 400 páginas, en el que pidieron el procesamiento con prisión preventiva del denominado clan Castillo, el máximo referente de Los Chaqueños era Jorge Castillo; mientras que su hermano, Hugo; sus sobrinos, Leandro y Adrián, y su cuñada, Gladys Arrieta, comandaban el grupo Los de River. En tanto que la tercera organización operaba al mando de "Cuco" Gaitán.
Además del clan Castillo, también fueron detenidos Enrique Antequera, máximo referente de la feria Urkupiña, y otros 40 sospechosos, entre los que figuran varios barrabravas de Boca y de Los Andes.
La Justicia estableció que cada una de las ferias tenía su ejército privado formado por custodios que aplicaban un reglamento interno en connivencia con un grupo de policías.