Justicia en Florencio Varela: condenas de 19 y 20 años para los acusados de violar en grupo a una joven que, luego, se suicidó
Un tribunal de Quilmes dictó una fuerte sentencia en el caso del abuso sexual en “manada” sufrido por Paula Martínez, la chica que a fines del año pasado, al cumplirse cinco años del ataque, se quitó la vida; los magistrados consideraron que “la víctima no tuvo posibilidad de discernir de sus actos” porque la habían drogado con burundanga en una fiesta y se la llevaron a una casa, donde la vejaron durante horas; afirmaron que quedó expuesta a una situación de “asimetría de poder”
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El Tribunal Oral en lo Criminal N°4 de Quilmes condenó a penas de entre 19 y 20 años a los cuatro acusados de raptar y violar en grupo, a fines de 2016, a Paula Martínez, una joven que, devastada psicológicamente por el salvaje ultraje que sufrió en su propio barrio, en Florencio Varela, se suicidó el año pasado. Tenía 23 años.
Diego Domínguez recibió la pena mayor, de 20 años, y Gonzalo Sandoval, Gustavo Carbonel y Guillermo Chávez deberán purgar 19 años de cárcel por el delito de “abuso sexual con acceso carnal agravado por la participación de dos o más personas”. En el caso de Mauro Nahir Goncalves, que estuvo prófugo hasta abril de este año, enfrentará un juicio por separado.
“¡Para vos, hija!”, gritó Sandra Zapata, madre de la víctima, luego de que se diera a conocer la sentencia. Es que Martínez, agobiada por el calvario de los recuerdos, cansada de esperar que se haga justicia y hostigada constantemente por el entorno de los imputados, se quitó la vida en diciembre pasado.
“Me siento orgullosa de mi Paula, por su lucha. Por cómo peleó hasta lo último para que se haga justicia, y llegó el día en que la tuvo. Pero ella ya no está. Igualmente, estoy contenta porque se honró su nombre y su memoria, y quedó demostrado que Paula no mentía” expresó Zapata a LA NACION.
En los argumentos de la sentencia, los jueces Alberto Ojeda, Andrea Calaza y Pablo Pérez Marcote, reseñaron el concepto de “violencia de género” y detallaron que la víctima “no tuvo capacidad de discernir sus actos, tras sentirse mal luego de ingerir una bebida [que contenía escopolamina, más conocida como burundanga], por lo que fue sometida sexualmente en total estado de vulnerabilidad”.
Además, el tribunal consideró que la joven estuvo expuesta a una situación de asimetría de poder, en la cual los imputados tuvieron la decisión común de llevar adelante la acción con un plan que tuvo la finalidad de abusar sexualmente de Paula Martínez.
Por otra parte, respecto a la situación de violación en grupo a la cual fue sometida a víctima, los jueces consideraron que “todos los encartados tuvieron acceso carnal con la víctima, sin el consentimiento de esta y en una total situación de aprovechamiento”.
En fallo, además, se dictó la absolución para Carbonel y Chávez por los delitos de “desobediencia” y se resolvió que Goncalves, que estuvo prófugo hasta hace pocas semanas, enfrente un juicio aparte. También se ordenó girar actuaciones a la fiscalía en turno para investigar a una testigo por la presunta comisión de delitos de acción pública que alcanzarían a la titular de la casa en donde fue la víctima, a fin de determinar si la propietaria tuvo algún grado de participación.
“Sentimos que la justicia se tomó cinco años para escuchar a Paula, pero que al fin, un jurado por unanimidad concluyó que ella decía la verdad. Eso nos trae mucha paz, más allá del dolor de que ella ya no esté con nosotros”, expresó Romina Doncel, especialista en temas de violencia de género y coordinadora del equipo de asistencia que acompañó a la familia de la víctima durante el proceso judicial.
Doncel contó que los últimos dos meses fueron “terribles, intensos y emotivos”, principalmente por lo que tuvieron que vivir y escuchar los familiares de la víctima por parte de los abogados defensores de los imputados, y también por los “amedrentamientos y amenazas que recibieron los familiares a lo largo de este tiempo”.
Dijo que tanto ella como los familiares están conformes con la pena que recibió cada uno de los imputados: “El fiscal, Claudio Pelayo, había propuesto penas de 24 años y nosotros apoyamos también que se les imponga la máxima pena. De todos modos, estamos tranquilos con la decisión del tribunal” expresó.
Paula Martínez denunció que durante una fiesta de cumpleaños de una vecina, el 10 de diciembre de en 2016, tras tomar una bebida alcohólica que le proporcionó uno de los imputados, comenzó a sentirse desorientada, hasta perder la conciencia. Horas más tarde recordó que había sido llevada en una camioneta Renault Trafic a una casa, contra su voluntad, donde al menos cinco hombres abusaron sexualmente de ella.
Desde ese momento, Martínez vivió un calvario: además del peso de la violación, tanto ella como su familia recibieron constantes amenazas de parte del entorno de los denunciados, según manifestaron los allegados a la víctima. El 26 de diciembre de 2021, su tío la encontró muerta en su casa. Se había colgado de una cadena atada a un ventilador. Tenía 23 años. Ya había tenido otros intentos de suicidio desde el momento de la violación grupal, hecho que quebró su psiquis y arrasó con su proyecto de vida.