Atacaron a balazos el Centro de Justicia Penal de Rosario
Sospechan que ese atentado está vinculado con una interna entre policías
ROSARIO.- Poco después de las 0.15, dos hombres en moto frenaron delante del Centro de Justicia Penal de Rosario y dispararon siete veces, cuatro de esos balazos atravesaron los vidrios de ese edificio, que fue blanco del tercer ataque mafioso desde el 5 de agosto de 2018.
Las medidas de seguridad preventivas en ese lugar, que pasaron desde bloquear la zona con policías e impedir la circulación a la actual vigilancia de dos efectivos, fracasaron. Ese acto de intimidación mafiosa se sumó a la fuga de un preso de alto perfil, Ariel Acosta, sicario de una banda narco, evasión que se produjo el 20 de diciembre pasado, minutos antes de que recibiese la condena en el mismo edificio que fue ayer atacado.
El ministro de Seguridad santafesino, Marcelo Saín, decidió reforzar la seguridad de los tribunales, sobre todo durante la noche. En esa cartera opinan que este ataque no estaría relacionado con las bandas que estuvieron detrás de los atentados anteriores, como las organizaciones narco de Los Monos y la liderada por Esteban Alvarado.
Las hipótesis apuntan a que esta balacera está vinculada con los cambios en la policía que se llevaron adelante a mediados del mes pasado, cuando Saín relevó a 30 jefes de unidades regionales de la policía e intervino la jefatura de San Lorenzo, una localidad portuaria que está a 30 kilómetros al norte de Rosario.
Dos hombres en una moto negra fueron los que dispararon durante la madrugada contra el frente del edificio judicial. Los balazos cruzaron el blindaje de los ventanales. De custodia había dos efectivos de la Policía Comunitaria que caminaban por la zona.
Cuatro disparos dieron contra el vidrio y otros tres rebotaron en la explanada del Centro de Justicia Penal. Las cámaras de seguridad expusieron que los dos atacantes se escaparon por la calle Mitre.
Es el tercer atentado a balazos que se produjo contra el Centro de Justicia Penal. El primero fue el 5 de agosto de 2018 y la segunda vez que ese edificio fue blanco de balas fue el 10 de diciembre de ese año.
En el Centro de Justicia Penal se realizaron juicios y audiencias emblemáticas contra las bandas más poderosas, como el juicio al clan de Los Monos, que terminó con 19 miembros de esa organización condenados en abril de 2018. Ramón Machuca fue sentenciado a 37 años de prisión y su hermanastro Ariel Cantero, alias Guille, recibió una pena de 22 años.
También desfilaron durante los últimos meses los imputados de la banda liderada por Alvarado, acusada de asociación ilícita y de la muerte del prestamista Lucio Maldonado. Por ese caso hay jefes policiales imputados. El ataque del 10 de diciembre de 2018 habría sido organizado por Alvarado, quien fue detenido en febrero de 2018 en Embalse Río Tercero, acusado de instigar el crimen del prestamista.
Ese 10 de diciembre, unos minutos antes de que balearan el Centro Penal de Justicia, fue atacada también la sede de los tribunales de Rosario, donde los atacantes dejaron un cartel que decía: "Con la mafia no se jode". Ese mensaje resultaba similar al empleado por Los Monos en ataques a edificios judiciales y casas de jueces.
Después de este atentado contra los dos edificios judiciales se produjeron otros dos ataques el 14 y el 31 de enero de 2019. En el primer episodio dejaron en una casa en Rioja al 500 una caja con la cabeza de un perro. El 31 de enero esa casa en pleno centro de Rosario, que pertenece a una funcionaria del Ministerio Público de la Acusación, fue baleada desde una moto. Luego, los fiscales Matías Edery y Luis Schiappa Pietra determinaron que los atacantes hicieron una serie de maniobras para que los investigadores adjudicaran a Los Monos ese atentado a balazos.
En once atentados anteriores a esta serie fueron imputados por la Justicia 10 personas ligadas a la banda de Guille Cantero.
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