Alerta. Investigan en la frontera un aviso sobre la preparación de un atentado
Un aviso anónimo recibido en la embajada argentina en el Reino Unido activó una investigación sobre el potencial intento de ingresar a través de la frontera norte un cargamento de nitrato de amonio, elemento que puede ser utilizado para la fabricación de explosivos. Ese alerta llegó a las redes sociales de la representación argentina en Londres y la Cancillería dio curso de ese dato al Ministerio de Seguridad de la Nación para que se verifique la veracidad de esa información.
Fuentes oficiales aseguraron que la Unidad Antiterrorista de la Policía Federal trabaja con ese informe en procura de identificar a la persona señalada por el anónimo. Para llevar adelante ese trabajo se abrió una causa en el juzgado federal N° 6. Los datos apuntaban a que la supuesta entrada de ese peligroso material se produciría por el puente internacional que une a Posadas con la localidad paraguaya de Encarnación.
"Tras una denuncia anónima recibida en la Embajada argentina en el Reino Unido que alertaba sobre el posible ingreso al país de nitrato de amonio -componente utilizado para la fabricación de explosivos- por parte de una persona proveniente de la República del Paraguay, el Ministerio de Seguridad de la Nación dispuso una serie de medidas preventivas y de investigación con el objetivo de que las cuatro Fuerzas Policiales y de Seguridad Federales a su cargo (PFA, PNA, GNA y PSA) extremen los controles necesarios atento al potencial intento de ingreso de la persona en cuestión", se informó en un comunicado del Ministerio de Seguridad de la Nación.
Debido a que el alerta anónimo notificaba sobre la presunta preparación de un atentado contra la comunidad judía en la Argentina, los funcionarios del Ministerio de Seguridad pusieron en conocimiento de esa información a las autoridades de la DAIA.
En dialogó con la agencia AJNEl, el presidente de la DAIA, Jorge Knoblovits expresó que la institución que dirige ya "estaba informada y tenía conocimiento" del hecho.
El trabajo de inteligencia criminal no habría confirmado aún la autenticidad de los datos recibidos por la delegación diplomática en Londres, pero se mantiene la vigilancia sobre potenciales ingresados de material peligroso disimulado en otro tipo de cargamento. Por eso se fortalecerá, mediante la inspección con escáneres, el control de los vehículos de carga en esa zona de la frontera.
LA NACION realizó consultas con autoridades judiciales paraguayas que trabajan sobre temas de delitos complejos y estas aseguraron que no tienen en marcha investigaciones referidas al informe recibido por sus colegas argentinos.
El aviso en la embajada argentina en el Reino Unido fue recibido ayer. Casualidad o no, ese día fue descubierta en Paraguay la preparación de un coche bomba que estaba diseñado para ser detonado frente a la cárcel de Cambyretá. La intención del grupo criminal era demoler las paredes de ese penal para permitir la fuga de 86 miembros del Primer Comando Capital, el grupo narco brasileño que colonizó a fuerza de su violencia a las bandas locales.
Algunos especialistas en delitos complejos sospechan que la coincidencia temporal entre el alerta sobre un potencial ataque a objetivos judíos en la Argentina mediante el ingreso de material peligroso en el puente de Encarnación-Posadas y la preparación del golpe con explosivos en una prisión paraguaya podría tener que ver con un intento de facilitar ese ataque, que finalmente fue descubierto. La célula del PCC descubierta operaba en Encarnación.
El movimiento de armas y explosivos cerca de la frontera argentina aumentó en los últimos años por la presencia de esos carteles brasileños, que cambiaron el eje de muchas investigaciones criminales de inteligencia que antes se focalizaban en la zona conocida como la Triple Frontera, donde hace años se sospecha de la presencia de grupos terroristas con vínculos en el Medio Oriente.
Frente a esa situación, todo alerta que llega sobre el potencial uso de explosivos es seguido de cerca por las autoridades argentinas, tal como ocurre en la investigación en curso por el aviso recibido en Londres a través de las redes sociales.
La Argentina sufrió dos atentados terroristas en la embajada de Israel, en 1992, y en la AMIA, en 1994, por lo que cualquier referencia a potenciales repeticiones de esos hechos es analizada y seguida por las autoridades argentinas.