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Vacunas: por qué es clave
protegernos en pandemia

En esta época de crisis sanitaria debido a la pandemia, es importante fortalecer la vacunación para evitar el aumento o resurgimiento de enfermedades prevenibles a través de la inmunización.

Muchas de las enfermedades prevenidas con la vacunación tienen los mismos mecanismos de transmisión que el coronavirus. Por ejemplo: el sarampión, la gripe y la meningitis bacteriana son afecciones que se contagian a través de gotitas que salen de la nariz o la boca cada vez que una persona infectada tose o estornuda.

A pesar de que estas infecciones tienen la misma vía de contagio, la evolución y la gravedad son diferentes. Por ejemplo, el sarampión es una enfermedad eruptiva que si bien es más frecuente en menores de 5 años, puede afectar a todas edades y causar complicaciones respiratorias y neurológicas. La meningitis por meningococo es una enfermedad fácilmente mal diagnosticada dado que sus síntomas tempranos (fiebre, irritabilidad, dolor de cabeza, vómitos, diarrea) se asemejan a otras enfermedades comunes y puede llevar a la muerte en 24 a 48 hs. Según datos del Instituto Malbrán, en el 2018, el 68% de los casos en menores de 5 años fueron causados por
el serogrupo B.

El riesgo

Durante esta pandemia aparece el riesgo de que las actividades rutinarias de vacunación se interrumpan debido a la sobrecarga del sistema sanitario, por un lado, y al aislamiento social obligatorio y preventivo,
por otro.

La interrupción de los esquemas de vacunación aumenta el número de personas susceptibles de enfermarse, y con ello el riesgo de resurgimiento de enfermedades como el sarampión, es por esto que la Organización Mundial de la Salud (OMS) establece a la vacunación como un servicio esencial que debe ser priorizado.

¿Cómo seguir?

1.

Recomendaciones para la atención médica.
La Sociedad Argentina de Pediatría considera indispensable brindar sostén a las familias y continuar con los controles pediátricos de rutina. Puesto que la situación sanitaria actual varía cada día, puede que los profesionales de la salud modifiquen el modo de atender a sus pacientes a medida que cambia
la situación.

2.

Unicef recomienda seguir la rutina de vacunación en los servicios sanitarios que haya disponibles. Es importante que los niños mantengan al día sus vacunas para estar protegidos. Para concurrir a aplicarse una vacuna se recomienda previamente asesorarse sobre la necesidad de un permiso local de acuerdo a cada jurisdicción.

3.

Respetar en salas de espera el distanciamiento social.
Quienes vayan a vacunarse tendrán que guardar una distancia mínima de un metro en la fila, y si se sientan deben hacerlo asiento de por medio. Según cada jurisdicción habrá que advertir también sobre el uso del cubreboca.

4.

Aprovechar cada contacto con el sistema de salud para revisar y completar el esquema de vacunación en personas de todas las edades, especialmente en quienes vayan a la consulta por presentar comorbilidades o factores de riesgo.

5.

Es clave informarse para conocer qué estrategia de vacunación se está llevando a cabo en tu zona. El Ministerio de Salud de la Nación emitió un comunicado en el que recomienda que cada jurisdicción evalúe la mejor manera de llevar a adelante las campañas de vacunación.

¿Dónde?

Cada jurisdicción deberá evaluar la mejor manera de llevar adelante sus campañas de vacunación, dentro de las cuales se sugieren alternativas no tradicionales como clubes, sedes de bomberos, oficinas públicas, plazas y bibliotecas.

Más que nunca es momento de valorar y respetar los calendarios de vacunación. En Argentina su calendario se ubica entre los más completos del mundo, ya que fue ampliado en la última década, cubriendo contra múltiples enfermedades como por ejemplo: neumococo, sarampión, rubeola y meningococo ACWY.

Para saber más sobre la importancia de vacunarse
durante la pandemia:

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