El pequeño había sido ingresado al hospital por un dolor de rodilla en la noche del viernes; después de varios estudios fue derivado al CTI y falleció el pasado sábado
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Un niño de cuatro años murió de púrpura fulminante en Maldonado, confirmaron a El País fuentes del Ministerio de Salud Pública (MSP).
El niño inicialmente fue llevado a un hospital por un dolor de rodilla en la noche del viernes, dijeron fuentes de ASSE a El País. Si bien en su casa no había presentado fiebre, esta sí se constató en el hospital.
Luego de algunos estudios, el niño fue ingresado al CTI con traslado inmediato al Sanatorio Mautone. Su cuadro se agravó más y sufrió varios paros respiratorios, hasta que falleció sobre las 13:30 horas de este sábado, señalaron las fuentes.
El director del departamento de Salud de Maldonado, Pablo García, informó a El País que esta tarde tiene lugar una reunión con las autoridades de la escuela a la que asistía el pequeño y los padres de sus compañeros.
El objetivo es administrar medicación de manera preventiva a los niños que estuvieron en contacto con el pequeño que falleció, por el riesgo de contagio. La medicación, señaló García, consiste en cápsulas que se diluyen en agua y se administran durante dos días.
¿Qué es la púrpura fulminante?
El MSP explicó tiempo atrás qué es la púrpura fulminante y cómo se transmite. “La meningococemia es una enfermedad bacteriana que puede involucrar distintas partes del organismo. Puede ser inocua, como en la mayoría de los casos, pero puede afectar las meninges y producir meningitis por meningococo o, como en este caso, llegar a la sangre y provocar púrpura. Cuando avanza de manera extremadamente rápida, se le llama fulminante”, señaló el organismo.
También detalló que la transmisión de la enfermedad se da de persona a persona a través de las vías respiratorias. “Para que la transmisión ocurra, es necesario un contacto estrecho, directo (personas que residen en la misma casa, que comparten el mismo dormitorio, lugares de hacinamiento, guarderías y escuelas) o contacto directo con secreciones respiratorias del paciente”, indicó el organismo.
En Uruguay normalmente se notifican entre 20 y 30 casos por año. De estos, de dos a tres llevan a la muerte.
El País (GDA)