La gonorrea forma parte de las llamadas ETS (enfermedades de transmisión sexual), por lo que cualquier persona que tenga relaciones debe estar atenta a qué es, cómo se contagia y qué tipo de tratamientos existen para su cura.
Tanto hombres como mujeres pueden infectarse y padecer los síntomas en los genitales, la garganta o el recto. El rango etáreo más propenso a infectarse de gonorrea es el comprendido entre los 15 y 24 años, siendo una enfermedad más común de lo que se cree.
Es importante recordar que la gonorrea se transmite en las relaciones sexuales. Cualquier persona infectada puede contagiar a otra. De hecho, las mujeres embarazadas que la padecen pueden transmitirla a sus hijos durante el parto.
En estos casos, el bebé puede sufrir graves consecuencias de salud. Por lo tanto, las mujeres embarazadas deben incluir en sus chequeos periódicos los exámenes físicos y las pruebas correspondientes para detectar la enfermedad y abordar los tratamientos necesarios en pos de prevenir una transmisión.
Principales síntomas de la gonorrea
La particularidad de la gonorrea es que, en ocasiones, los síntomas son diferentes para hombres y mujeres. Incluso es posible que un hombre padezca la enfermedad y la curse de forma asintomática.
Pero en los cuadros en los que sí se detecte la presencia de síntomas, en el caso de los hombres podría aparecer:
- Sensación de ardor al orinar.
- Secreción de color blanco, amarillo o verde del pene.
- Dolor o inflamación en los testículos (aunque esto es menos común).
En el caso de las mujeres, la posibilidad de tener gonorrea de forma asintomática es aún mayor. Si existen síntomas estos suelen ser leves y podrían confundirse con otros signos característicos de enfermedades como infecciones de vejiga o vagina.
Sin embargo, es el universo femenino el que presenta mayor probabilidad de complicaciones de salud si tiene gonorrea, cuente o no con síntomas de aviso. En caso de existir, estos son:
- Dolor o sensación de ardor al orinar.
- Aumento de la secreción vaginal.
- Sangrado vaginal entre cada menstruación.
Los únicos síntomas compartidos entre hombres y mujeres son aquellos que pueden aparecer en el recto. Algunos ejemplos son:
- Secreciones.
- Picazón anal.
- Solores.
- Sangrado.
- Dolor al defecar.
Por la clasificación de los síntomas, la gonorrea es una molesta enfermedad que debe tratarse con urgencia. Ante cualquier aparición inusual tanto en la misma persona como en la pareja, es fundamental no demorar una consulta médica con un especialista en ginecología o urología.
¿Existe una cura para la gonorrea?
Afortunadamente, existe una cura para la gonorrea. Se trata de un tratamiento a base de diferentes fármacos que se suministran únicamente bajo receta médica, ya que deben curar una infección de fondo.
Lo que sí se debe tener en cuenta es que si la gonorrea genera lesiones permanentes será muy complejo curarlas y que los medicamentos orales solo se enfocan en el detenimiento de la infección.
Las distintas cepas de la gonorrea han evolucionado y se han vuelto más resistentes a los tratamientos farmacológicos. Por lo tanto, el control "caso por caso" sigue siendo la mejor solución al momento de evaluar una combinación de medicamentos adecuada.
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