El caso de una joven universitaria en Misuri (Missouri) que no sabía que tenía coronavirus cuando regresó de Italia ilustra cómo un simple incidente puede provocar una enérgica respuesta de las autoridades empeñadas en evitar el surgimiento de una epidemia (ahora declarada pandemia por la OMS).
La joven, de unos veintitantos años, había participado en un intercambio estudiantil en Italia. Al regresar, pasó por uno de los aeropuertos más transitados de Estados Unidos y tomó el tren a una estación en San Luis que es usada por la empresa ferroviaria Amtrak y la empresa de autobuses Greyhound. El padre de la chica, que estuvo en contacto con ella pero no muestra síntomas, fue a un café y luego se llevó a otra de sus hijas a un baile y a una fiesta.
La joven, estudiante de la Universidad de Indiana residente del condado San Luis, llegó el 2 de marzo al Aeropuerto O'Hare de Chicago, por el cual pasan más de 230.000 personas cada día.
Luego de quedarse con una amiga, la joven se fue en un tren de Amtrak hacia San Luis el miércoles. Un vocero de la municipalidad señaló que no se sabe con certeza cuántas personas la joven pudo haber contactado en la Gateway Transportation Center, pero otro tren de Amtrak pasó por allí más o menos a esa misma hora, y por la estación pasan también autobuses Greyhound.
Marc Magliari, vocero de Amtrak, indicó que la empresa ha contactado a unas 169 personas que compraron boletos para ese mismo tren _ el número 303 de Amtrak _ para decirles sobre el resultado de la prueba de la joven y para recomendarles que monitoreen su salud.
Amtrak canceló una ruta de Chicago a San Luis el domingo, aunque para el lunes restauró la normalidad y las estaciones de Chicago y San Luis fueron desinfectadas.
Doug Moore, vocero del condado San Luis, dijo que la joven contactó al departamento de salud del condado el jueves para avisar que sentía mal. Se quedó en casa y no tuvo contacto con otras personas hasta que se le pidió ir al Hospital Mercy Hospital el viernes para sometida a la prueba. Entretanto, reveló el gobernador del condado, Sam Page, se le pidió a la familia colocarse en auto-cuarentena en su vivienda en Ladue.
El sábado, la prueba arrojó que la joven tenía el COVID-19.
AP
LA NACION