Algunos centros de cuidado están brindando a los adultos mayores una forma de visitar su pasado para mejorar su bienestar
- 9 minutos de lectura'
John Faulkner, de 76 años, se estaba volviendo emocionalmente retraído antes de llegar a Central Parke Assisted Living and Memory Care, el lugar donde vive en Mason, Ohio. En su momento había sido un ávido viajero, pero el deterioro cognitivo terminó con eso y se aisló socialmente. Cuando Faulkner llegaba a Central Parke, se sentaba solo en su habitación durante horas, según Esther Mwilu, quien organiza actividades para dicha comunidad.
Su plan de tratamiento para la ansiedad relacionada con la demencia incluía medicamentos antipsicóticos y terapia de reminiscencia, una práctica de décadas de antigüedad en la que los adultos mayores se involucran con recuerdos de su juventud, como música o fotografías personales, destinados a generar recuerdos y cultivar alegría y significado.
Faulkner estaba inmerso en la nostalgia. Entonces, el personal de Central Parke decidió intentarlo nuevamente, pero agregando la realidad virtual. Si bien los estudios sugieren que la terapia de reminiscencia tradicional puede mejorar significativamente el bienestar de las personas mayores, la realidad virtual tiene el potencial de hacerla más inmersiva e impactante. Cuando se puso los cascos de RV, Faulkner podía caminar por los acantilados virtuales de Moher en el oeste de Irlanda, tal como lo hizo con su esposa varios años antes.
Aquel fue su punto de inflexión. Ahora, tres meses después, tiene una sesión de terapia de reminiscencia virtual de 45 minutos todos los lunes. Incluso, Mwilu dijo que necesita menos medicamentos para la ansiedad y es más sociable. También comenzó a dar clases a otros residentes sobre cómo hacer aviones de papel.
En la actualidad aproximadamente media docena de empresas se enfocan en proporcionar terapia de reminiscencia de realidad virtual para personas mayores en hogares. Una de las más grandes, Rendever, trabaja con más de 450 instalaciones en los Estados Unidos, Canadá y Australia, mientras que otro, MyndVR, está también asociado con cientos de estos.
Forman parte de una tendencia creciente que usa la realidad virtual en la atención médica, incluido el tratamiento de pacientes con trauma y dolor crónico . Y dado que se espera que la cantidad de personas mayores de 65 años casi se duplique para 2060 en los Estados Unidos, hay una necesidad urgente de ayudas tecnológicas como la RV para el cuidado de los ancianos. Más de 11 millones de estadounidenses actúan como cuidadores no remunerados de un pariente con demencia. La “generación sándwich " de mediana edad , que hace malabarismos entre carreras y múltiples roles de cuidado, busca apoyo en la realidad virtual y otras tecnologías, como las mascotas robóticas.
Eddie Rayden de Rhode Island dijo que su madre de 91 años, Eileen, se sorprendió cuando usó la realidad virtual para ver el vecindario de Cleveland donde creció. “Ella se iluminó de inmediato”, dijo. “De repente, estaba parada frente a la casa en la que no había estado en más de 80 años”.
Cómo funciona
El concepto de la terapia de reminiscencia se remonta a 1963. En ese entonces muchos psiquiatras de la época desaconsejaban cualquier cosa que pareciera vivir en el pasado, pero Robert Butler, quien más tarde fundó el Instituto Nacional del Envejecimiento, argumentó que las personas mayores podían obtener un valor terapéutico al poner su vida en perspectiva. Desde entonces, los psicólogos recomiendan cada vez más el uso de videos viejos de casamientos o de las comidas favoritas de la infancia como herramientas para ayudar a las personas mayores, incluidos aquellos que sufren de demencia. Los expertos dicen que los adultos mayores que suelen preocuparse por la disminución de la memoria a corto plazo a menudo se sienten tranquilos al recordar su pasado, especialmente sus épocas de juventud.
Durante la última década, la tecnología más rápida y potente hizo que la realidad virtual sea cada vez más realista y ha dado lugar a estudios que muestran cómo las personas mayores pueden usar la misma para volver a experimentar partes significativas de sus vidas. En 2018, investigadores del Instituto Tecnológico de Massachusetts descubrieron que la realidad virtual reducía la depresión y el aislamiento entre las personas mayores. Otros estudios sugirieron que la reminiscencia de la realidad virtual mejora la moral , el compromiso , la ansiedad y la cognición al estimular la actividad mental, aunque no necesariamente puede revertir el deterioro cognitivo.
Aún así, todavía se necesitan estudios más amplios antes de que todas las personas mayores de 75 años se pongan los cascos. El doctor Jeremy Bailenson, director del Laboratorio de Interacción Humana Virtual de Stanford, dirige en la actualidad un ensayo clínico en 12 estados para tratar de obtener más información concreta sobre el tema.
“Nunca quisiera que la realidad virtual reemplazara por completo la terapia de reminiscencia que no es de realidad virtual”, dijo, pero “diferentes personas necesitan diferentes herramientas”.
Las personas mayores hoy pueden pagar a las empresas por cascos de realidad virtual y por acceso a una biblioteca de experiencias virtuales, muchas de las cuales están diseñadas para la terapia de reminiscencia. Además van a poder participar en ellas individualmente o en sesiones grupales.
No se necesitan recetas y los participantes generalmente superan en número a los cascos virtuales. Los cuidadores e investigadores dijeron que comienzan a ver los beneficios después de varias sesiones durante uno o dos meses. Stephen Eatman, vicepresidente de Sunshine Retirement Living, que administra Central Parke, dijo que el uso de antipsicóticos por parte de la compañía disminuyó hasta en un 70 por ciento en las personas mayores que usan la terapia de realidad virtual.
Además de revivir viajes a lugares como Irlanda, los usuarios pueden teletransportarse a bares o clubes que les recuerdan su juventud. MyndVR ofrece visitas a locales de música flamenca, ragtime y clásica, con músicos y actores vestidos como en esa época.
Pero los usuarios no se limitan a experiencias nostálgicas “preempaquetadas”. Los familiares, amigos y cuidadores también pueden grabar un video en 3D de algún festejo u evento al que la persona pueda asistir virtualmente una y otra vez para reforzar nuevos recuerdos. Otros miembros de la familia buscan en Google Streetview lugares importantes en la vida del adulto mayor que se pueden convertir en reinos de realidad virtual.
Dorothy Yu, una consultora de negocios de Weston, Massachusetts, decidió convertir las calles alrededor del campus de la Universidad de Missouri a realidad virtual para que su padre pudiera ver los edificios donde había sido profesor. Ahora, siendo un residente de 90 y tantos años de Maplewood Senior Living en Massachusetts, puede recordar el trabajo que hizo ahí con orgullo, tanto durante la sesión como después.
“Nunca había visto reacciones similares a esta tecnología”, dijo Brian Geyser, vicepresidente de Maplewood, que ahora ofrece realidad virtual en cada una de sus 17 comunidades.
No es adecuado para todos
Para participar en la terapia de realidad virtual deben ponerse un casco tecnológico que cubra sus ojos y bloquee toda la luz para adentrarse en el mundo tridimensional. Para algunas personas mayores que no crecieron con computadoras, esta tecnología inmersiva puede ser abrumadora, dijo Amanda Lazar, investigadora de interacción humano-computadora de la Universidad de Maryland.
“La cara es una parte muy personal del cuerpo”, dijo Davis Park, vicepresidente del Centro Front Porch para la Innovación y el Bienestar, una organización sin fines de lucro que brinda tecnología, incluida la realidad virtual, a las comunidades de adultos mayores. Alguien con demencia puede preocuparse si nota que sus ojos están cubiertos o puede tener problemas para entender el propósito de atarse una máquina sobre la cara, dijo Park.
Para disminuir estos riesgos, Sunshine Retirement limita las actividades de realidad virtual a ciertas habitaciones donde las personas mayores pueden usar la tecnología de manera segura. También evitan mostrarles a estos lugares que podrían desencadenar recuerdos traumáticos, dijo Eatman, pero las reacciones de las personas son difíciles de predecir.
La mayoría de los proveedores también limitan las sesiones de reminiscencia de RV a 45 minutos, aunque incluso con esa duración, pueden causar mareos y dolores de cabeza, especialmente con ciertos medicamentos. Los cascos de realidad virtual también pueden ser demasiado pesados para el cuello de algunos adultos mayores o pueden no tener en cuenta las deficiencias auditivas y visuales.
Otro inconveniente: la realidad virtual puede aislarte socialmente. Tradicionalmente, la terapia de reminiscencia ha alentado a grupos de personas mayores a vincularse entre sí y con los cuidadores a través de recuerdos especiales. “Si alguien se pone el casco, las personas que lo rodean quedan bloqueadas”, dijo el Dr. Lazar.
El Iona Washington Home Center en el sureste de la capital estadounidense intenta resolver esto al proyectar las experiencias de realidad virtual de las personas mayores en una pantalla 2-D para que otros las vean y las discutan. El centro, administrado por una organización sin fines de lucro, recibió sus cascos de RV a través de una subvención del gobierno que es común para los hogares de jubilados. “La gente de acá no tiene mucho dinero”, dijo Keith Jones, el especialista del programa. “La mayoría de ellos no llegó a ver el mundo”. Cuando lleva grupos a otro país en realidad virtual, Jones coloca a los pocos miembros que han visitado el lugar a la cabeza de la mesa para que compartan sus recuerdos.
El futuro del metaverso de la memoria
En el futuro, la realidad virtual puede ofrecer otra forma para que las personas mayores combatan la soledad al adentrarse a la experiencia con sus seres queridos.
Tamara Afifi, investigadora de la Universidad de California en Santa Bárbara, estudió la realidad virtual y la demencia y ahora está investigando nuevas tecnologías que permitan a los familiares viajar juntos. La señora Rayden, residente de 91 años de edad de Maravilla Senior Living, una comunidad en Santa Bárbara, participó en la investigación de Afifi. Ella y su hijo de 66 años, hicieron juntos un recorrido por su antiguo barrio de Cleveland, a pesar de que él estaba en Rhode Island.
“Le mostré dónde jugábamos a la rayuela y tirábamos el trineo en invierno”, dijo. “Era importante que conociera la casa que teníamos y el barrio. Fue mi infancia. Me trajo recuerdos maravillosos”.
Desde que el esposo de Rayden murió en 2019, ella ha estado luchado contra la tristeza y la soledad. Hasta ahora la realidad virtual le permitió llevar a su hijo al Canal Intracostero de Florida, donde había disfrutado de unas vacaciones de pesca con su esposo. “Le encantaba pescar”, dijo. “Qué recuerdos tan felices”.
Ruth Grande, directora ejecutiva de Maravilla, dijo que los hijos adultos pueden “dejar de ser cuidadores por 30 minutos” cuando tienen estas experiencias con sus seres queridos. “Recuerdan lo que es disfrutar estar con su pariente”, dijo.
Otras noticias de Bienestar
- 1
Una “cueva” y dos cuentas: así fue la trama que llevó al juez Lijo a sobreseer a Andrés Vázquez, actual director de la DGI
- 2
John Goodman, el actor de Los Picapiedra, luce irreconocible tras su gran cambio físico
- 3
España: el cuerpo de Santa Teresa mantiene el mismo aspecto desde hace más de 100 años
- 4
José Mayans dijo que Milei se comporta como un dictador y lo acusó de manipular el Indec