Aumentó en un 18% en 12 años, entre 1960 y 2018, debido a la innovación farmacéutica
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“Cuando hablamos de innovación en la industria farmacéutica, hablamos de esperanza”, determinó Lorice Scalise, gerente general de Roche Pharma Argentina y miembro del directorio de la Cámara Argentina de Especialidades Medicinales (CAEME) en su paso por Bienestar & Salud. Las claves para disfrutar el lado bueno de la vida: capítulo 2, el evento organizado por LA NACION.
La esperanza de vida al nacer aumentó en un 18% en 12 años, entre 1960 y 2018, y esto tiene que ver con la innovación farmacéutica. “Diez años atrás hablábamos de cáncer como una sentencia, y hoy hablamos de cáncer como algo que se afronta y que se soluciona”, explicó la directiva del laboratorio en su mano a mano con José Del Rio, secretario general de Redacción en LA NACION.
“El impacto en el sistema sanitario es directo porque, diferente a lo que se imagina, la innovación farmacéutica impacta directamente en ahorros para el servicio sanitario porque cuando se reconoce, se puede tratar una enfermedad y devolver ese paciente a una situación de bienestar se deja de tener todos los costos que una enfermedad no tratada trae”, desarrolla Scalise.
Los nuevos medicamentos entre 2003 y 2013 evitaron un 53% de muertes prematuras en 20 países, lo cual tiene que ver con el tercer impacto: el económico y social. “Una persona que no tiene acceso para cuidarse va generando una discapacidad y eso afecta a todo el entorno del paciente, que necesita de cuidadores, etcétera”, indica la directiva de Roche con respecto al impacto económico-social que tiene la salud.
“¿La investigación clínica es un sector que genera dólares?”, preguntó Del Rio. “Absolutamente, es un generador de divisas. Se exporta conocimiento de la Argentina a través de los estudios clínicos. No nos olvidemos que tenemos cinco Premios Nobel en la Argentina, dos de ellos en Medicina y uno en Química (los otros dos son de la Paz). Entonces sí, el país exporta y genera divisas a través del conocimiento”, sostuvo Scalise.
En cuanto a la importancia de la innovación en la salud, la directiva de CAEME afirma que estamos en un punto de inflexión, de dónde venimos y a dónde queremos ir, y que la tecnología es una herramienta fundamental en este sentido. “Tener todos los datos que nos brinda la tecnología nos lleva a tomar otras decisiones. Vivimos un poco eso en la pandemia: gracias a los datos, pudimos tomar decisiones. Cuando tenemos la información tomamos otras decisiones”, aseguró.
Las nuevas tendencias en salud y bienestar tienen que ver con la conciencia, según Scalise, y deberíamos utilizar este momento para potenciar la prevención. “Darle voz a la salud ayuda a incentivar a que las personas tengan más conciencia”, dijo.
La gerente general de Roche Pharma Argentina expone un dato importante: en el sector de la salud, y principalmente en el de las investigaciones clínicas, hubo un crecimiento de 17% en los últimos años, y sigue en auge. En 2021, en la Argentina se generaron más de $20.000 millones en investigación clínica en divisas para el país, además de 3.200 empleos.
“Absolutamente, confío que esta tendencia de generar más esperanza de vida va a crecer de la mano de la investigación y sobre todo va a mejorar la expectativa de vida con calidad, que es lo más importante. El bienestar y la salud están directamente conectados a la innovación en su sentido más amplio, no solo de la industria o la tecnología. Innovar en la forma cómo vivimos, cómo entendemos la vida y cómo interactuamos es la clave”, cerró Scalise.
El evento comenzó con Belén Ortega, diseñadora de experiencias de bienestar, que introdujo una sesión de baños de sonidos exprés. Se trata de una serie de armonías generadas por cuencos y otros elementos similares.