A medida que pasa el tiempo los discos intervertebrales pierden agua y elasticidad lo cual aumenta el riesgo de padecerla; qué hacer para evitar esta afección
- 2 minutos de lectura'
La hernia de disco es una de las patologías más comunes de la columna y afecta a millones de personas en todo el mundo. Esta condición se produce cuando una parte de un disco intervertebral se sale de su lugar y comprime a las raíces de los nervios cercanos, causando dolor y/o debilidad muscular. Son más comunes en las regiones cervical y lumbar porque éstas soportan una mayor carga de peso (lumbar) o por mayor movimiento (cervical). En las hernias cervicales, el dolor o pérdida de fuerza se localiza en brazos, antebrazos o manos, mientras que en las lumbares, se focaliza en glúteos, muslos, piernas o pies.
Las causas son múltiples, desde lesiones hasta caídas de altura, movimientos repetitivos, malos hábitos posturales, obesidad y envejecimiento. Puede afectar a personas de cualquier edad, pero es más común entre los 35 y los 55 años. A medida que pasa el tiempo, los discos intervertebrales pierden agua y elasticidad, lo cual aumenta el riesgo de padecerla.
Algunas medidas pueden ayudar con la prevención son mantener una buena postura, realizar ejercicio regularmente, refortalecimiento muscular, conservar un peso saludable y evitar movimientos bruscos o levantar objetos pesados.
La hernia de disco puede ser recurrente en algunas personas o presentarse otra en otro nivel, especialmente, si no se tratan adecuadamente o si las causas subyacentes no se abordan. Su frecuencia es difícil de precisar ya que muchas personas pueden tener hernias asintomáticas que nunca llegan a diagnosticar. El dolor es muy intenso porque el disco aprieta e irrita directamente las fibras nerviosas que traen sensibilidad de las extremidades.
Los tratamientos varían según la gravedad de la condición y la causa subyacente. En algunos casos, se recomiendan cambios en el estilo de vida, fisioterapia, analgésicos, antiinflamatorios o realizar un bloqueo. En las más graves, puede ser necesaria una cirugía para retirar la parte del disco herniado y descomprimir la raíz nerviosa afectada.
En síntesis, es una afección muy dolorosa y debilitante, que puede afectar a cualquiera, sin embargo, con tratamiento y la prevención adecuados, la mayoría controla el dolor y mejora su calidad de vida. Es importante que quienes las experimentan busquen atención médica lo antes posible para obtener un diagnóstico preciso y un tratamiento efectivo.
*Por Dr. Matías Baldoncini, médico neurocirujano, Facultad de Medicina, Universidad de Buenos Aires. IG @drmatiasbaldoncini
Otras noticias de Salud
Más leídas de Salud
Para fanáticos de la diversidad marina. La isla holandesa que muestra otra cara del Caribe
Horóscopo. Cómo será tu semana del 17 al 23 de noviembre de 2024
Arthur Brooks. El profesor de Harvard revela cuáles son los hábitos para ser cada día más feliz
“El apego más disfuncional de todos”. Cuando los problemas de la infancia afectan las relaciones de pareja