El nuevo espacio escénico, ubicado en el Barrio Chino, ofrece una programación ecléctica en tiempos pandémicos
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En una cancha de fútbol 5 en pleno Barrio Chino porteño, la cultura independiente da pelea a este tiempo todavía pandémico. Que Tren (Olazabal 1784) nació en 2003 como escuela de circo y de movimiento detrás de la cancha, junto a las vías del ferrocarril Mitre, pero a medida que avanzó el aislamiento social, en 2020, sus integrantes decidieron aprovechar el “patio de adelante” como espacio cultural. “Tiene todas a favor, porque es al aire libre, pero tiene un tinglado que permite no suspender actividades por lluvia”, explica Alejandra Ceciaga, artista de circo y del staff de Que Tren.
Finalmente, en enero pasado, el nuevo club cultural fue de los primeros en activar eventos apenas se eliminaron algunas restricciones. Alboroto, la compañía de circo fundada hace 15 años, se convirtió en productora. “Los y las artistas habían estado muy relegados en la pandemia, sin una respuesta del Estado ni de ningún lado. Entonces la idea fue abrir la cancha literalmente, draguearla como espacio escénico para artistas musicales, de danza y teatro. Y también representar al colectivo de mujeres y a otras voces que tampoco tenían lugar, como el colectivo LGTBIQ+”, explica Florencia Schrott, actriz y productora.
Que Tren centraliza en dos festivales su ecléctica programación: Alboroto de picnic, destinado a las infancias, y Canchera, para adultos. Ceciaga explica de qué se trata Alboroto: “Es un espacio para las familias como nosotres, que están aprendiendo todo de vuelta. Esto viene de la mano de nuestra propia maternidad, con un intento de ver y de vivenciar otra vez el mundo a través de los ojos de nuestres hijes”. Los adultos también pueden pasarla bien en este festival, asegura Schrott: “La idea es que sea un programa para toda la familia, que esto sea un lugar de encuentro, que ver un espectáculo para chicos no signifique estar embolado. Una manera quizás menos opresiva de transitar la mapaternidad”.
Paula Maffia, Barbi Recanati, Sofía Viola, Flopa, Paula Trama, Kumbia Queers, Chocolate Remix, Ayelén Beker, entre otras músicas, ya participaron del lineup del festival Canchera. “Es un espacio para voces disidentes. Es este salir a la cancha a dejarlo todo, a armar equipo. Una de las cosas que caracteriza el espacio es la diversidad enorme de propuestas que tiene que ver con el cocoliche que somos”, describe Ceciaga. Schrott prefiere el concepto de “festival” al de “sala”: “Reivindicamos este término desde un lugar que defiende el goce y el encuentro como política para intentar estar mejor”.
Si bien la consigna es el disfrute, no se olvidan de los cuidados. “Tuvimos suerte, mientras a muchos centros se les hizo difícil, pudimos mantener un aforo grande. Igual, somos muy cuidadoses: tomamos temperatura, ponemos alcohol, pedimos una declaración jurada de salud. Más allá de ser respetuoses de la ley, es una invitación a cuidarse. Con cuidado, la actividad es viable y segura”, define Ceciaga.