A diez años de su muerte, repasamos las entrevistas que la leyenda del rock nacional realizó con Rolling Stone y seleccionamos sus declaraciones más importantes
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En los noventa, Luis Alberto Spinetta salía con Carolina Peleritti, una de las modelos más exitosas de la época, y la prensa los perseguía para tener la foto de la pareja. Cansado del acoso periodístico, salió con un cartel que decía “Leer basura daña la salud, lea libros”. Toda una declaración que daba cuenta de su relación con los medios. Spinetta no daba muchas entrevistas, pero cada vez que hablaba una dejaba en claro sus ideas sobre la música, su compromiso con el arte y una cierta mirada esperanzadora sobre el futuro. A continuación, algunas de las declaraciones que uno de los músicos más importantes de la historia del rock argentino dejó en sus encuentros con Rolling Stone.
Su rechazo a las entrevistas
“La gente que va a leer esto no quiero que sepa de mí [...] ¿Por qué “no quiero que sepan de mí”? Porque la gente quiere saber tooodo de tooodo. Por ahí las lesiones con respecto a inmiscuirse en mi vida privada (cuando estuve de novio) me han afectado tanto, que ahora no tengo interés en que sepan absolutamente nada. No aporta. Ni a mí ni a la gente. La gente me encantaría que escuchara buena música; no necesariamente la que hago yo: buena música. Punto. ¿Entendés?” (RS 40, julio 2001, entrevista de Gloria Guerrero)
La música en general
“La música existió antes de que el hombre organizara la materia sonora y va a existir aunque no haya instrumentos. Es una de las pocas cosas que no podemos usar para destruir. Pienso, igual, que la mala música enferma a la gente y la destruye, y ese es un proceso muy lento y muy difícil de comprobar. Es cierto que la buena música eleva el espíritu: cuanto mejor escrita esté más feliz es el alma. Quizás yo pueda ayudar a la gente y curarla con la música. Es una buena meta, pero es un poco utópica”. (Entrevista de Julieta Mortati, realizada a comienzos del año 2000 y que estuvo inédita hasta su publicación en el Bookazine dedicado a Spinetta)
La música como una terapia
“La música es un orden que de por sí tiende a curarte las penas. Lo que pasa es que también te podés enfermar de música por la pasión que ponés en ello. Hay que entender que para transmitir los sentimientos es necesario un procedimiento que exige demasiado de uno. A veces, cuando descubro una nueva tonada y esa tonada contiene esa emoción, ese fuego que yo quiero en mi música generalmente me rompe el alma. No sé si me enferma o me cura, pero de por sí me como una angustia y un momento… Es como una cosa que me ahoga y, bueno, ¡tanto lío por este tiraratarirara! Listo, te jodés y punto”. (Entrevista de Julieta Mortati, realizada a comienzos del año 2000 y que estuvo inédita hasta su publicación en el Bookazine dedicado a Spinetta)
El virtuosismo
“No soy virtuoso, soy un ejecutante con bastantes trucos ya. Es decir, al ser autodidacta, autoincorporás técnicas berretas, digamos. Por supuesto, hay autodidactas que son realmente excepcionales, pero yo en promedio estoy bien. Porque entre componer y cantar y tocar, estoy más o menos bien, pero no soy un virtuoso.[...] Un virtuoso es alguien que toca el instrumento de una manera arrolladora”. (Entrevista de Julieta Mortati, realizada a comienzos del año 2000 y que estuvo inédita hasta su publicación en el Bookazine dedicado a Spinetta).
Su familia
“Las relaciones de familia son privadas... y son maravillosas. Porque la relación que tengo bien con mis hijos es excelente, con los cuatro, y con mi ex señora tengo una excelente relación que me permite... estar feliz. Podríamos tener una relación muy incómoda e infeliz, como a veces sucede con un hombre y su ex mujer, o con una mujer y su ex marido, y tener problemas, reclamos... Acá el amor y las ganas de crecer hicieron, en los años de pareja, en los años de hijos, inclusive ahora en la separación, su efecto bien hechor. Eso es el producto de mi vida: apreciar verdaderamente lo bien que salieron varias cosas”. (RS 40, julio 2001, entrevista de Gloria Guerrero)
Hacer publicidad
“Me he negado a participar de muchos comerciales. Si hice una propaganda de violas, como ahora para Taylor, es porque primero me regalaron violas y después me propusieron hacer fotos. Y si yo les decía que no, las violas no me las iban a quitar. Jamás voy a aceptar hacer una publicidad en particular con mi música. Hace poco me hicieron una oferta realmente muy conveniente para mi cuenta bancaria. Mi cuenta bancaria dice “venga, venga” y mi corazón dice “no venga nada, Flaco, olvidate”. No es para mí, no me quiero ver nunca en esa situación. Y yo creo que Lennon no hubiera hecho nunca una publicidad de Pepsi ni de ningún carajo, como no la hacen los músicos más o menos serios que habitan el mundo. Honestamente no vinimos para esto a hacer música. Vinimos para crear una música que no se detenga en su evolución”. (RS 126, septiembre de 2008, entrevista de Claudio Kleiman)
La muerte
“No hay miedo [en mí], no debería existir el miedo al observar ese confinamiento de nuestra alma. Deberíamos aceptarlo y comprenderlo”. (Entrevista de Julieta Mortati, realizada a comienzos del año 2000 y que estuvo inédita hasta su publicación en el Bookazine dedicado a Spinetta)
La música digital
“En el caso del MP3, le perdono cantidad por calidad. Podés llegar a tener la disponibilidad de mucha más música. Tendrías que haber transportado aviones con un trailer con los discos que querías escuchar para llevarte lo que tiene un iPod. Se escucha un poco como el orto pero por ahí en ese producto no encuentro algo tan nocivo. Permite que los pendejos puedan tener un montón de discos en vez de uno solo en un mismo aparato. En parte, es como un beneficio que obtenemos de los crackeadores de tecnología. Todos esos que inventaron formas para que quepa más música en los lugares donde uno la va a reproducir”. (RS 126, septiembre de 2008, entrevista de Claudio Kleiman)
“Que la gente que no tiene guita se baje los discos, los temas, que se los piratee, no me causa tanto dolor. Es un horror, es una estafa a todos nosotros. Lo creó la misma industria al no proteger la publicación”. (RS 126, septiembre de 2008, entrevista de Claudio Kleiman)
La industria musical
“Ahora hay artistas que los lanzan en la web con un single. Y si en la web tienen pedidos y son aceptados, recién ahí empiezan a grabar su disco. El artista tiene que tener la capacidad de atraer a quienes sean. Pero por ahí viene un gordo que se pone una maraca en el culo y lo ven 20 millones de personas y le graban un disco. Entonces la música sonó con eso. Sonó, pero sonó mal”. (RS 126, septiembre de 2008, entrevista de Claudio Kleiman)
Su fe en el futuro
“Tengo fe en la humanidad ante todo, en las personas, tengo fe en el amor, en todo lo que adoro, en las violas, en mi música, en mis nietos, en mis hijos, en mis padres, en los seres queridos, ¿entendés? Tengo una gran fe. Quisiera contagiarla, eso es todo, contagiarle a la gente más fe, que la gente se mire para ser solidaria y no para tenerse miedo. Ahora pasa un pibe mal vestidito y creés que te va a robar. Típico, es una escalada de miedo de la cual no te podés eludir, entonces está minando la tranquilidad. Me genera mucha bronca la injusticia, la cana, la puta que lo tiró. De nuevo vuelve a ser aquel aparato siniestro que comete unos crímenes horribles cuando asesinan pendejas, las violan. No es que me gustaría que todo el mundo se dé la mano, sino que la gente realmente se ponga las pilas para laburar, que venga un gobierno que te quite la guita, lo que sea, pero que la ponga donde la tiene que poner. Salud y educación, cabeza nueva, pibes que sean jueces con la cabeza incorruptible, sanos. Sanos espiritualmente”. (Entrevista de Julieta Mortati, realizada a comienzos del año 2000 y que estuvo inédita hasta su publicación en el Bookazine dedicado a Spinetta)
“Yo quiero pensar en un mañana, porque el tiempo se dirige a un mañana, no está en el ayer. No podemos reconstituir lo que fue pasado, sí podemos seguir curando las heridas que nos dañaron en el pasado tratando de no olvidarnos de ninguna de las premisas para tener la visión del futuro. Olvidándote de todo no podés construir”. (RS 126, septiembre de 2008, entrevista de Claudio Kleiman)
El amor
“Es como que el amor es lo más importante, la mujer. Como dice Martín Fierro: ‘Sin flete y sin china no vas a ningún lado’. Después, las violas son la herramienta. Obviamente que amo mis guitarras, son como manos mías, mejores que las mías, pero son instrumentos para crear la música. Estoy fascinado con la música, pero fascinado como si fuera una obsesión de mi existencia [...]. Sin amor un hombre es un tarado [...]. Creo igual que estar enamorado es el clima más perfecto de la naturaleza humana. El amor cura todas las heridas de la vida. No siempre se puede mantener”. (Entrevista de Julieta Mortati, realizada a comienzos del año 2000 y que estuvo inédita hasta su publicación en el Bookazine dedicado a Spinetta)
Su mirada del rock en 2008
“El rock hoy pasa más por la visión que nos da Capusotto, que nos hace reír con todos los personajes que son del rock. Porque si es por la cultura del rock un poquito chatito, barrial… Me encanta la gente junta y creando calor, no es que odio a las masas. Pero no me gusta la violencia. El rock en tanto y en cuanto sea una arenga hacia la violencia se convierte en la violencia de las canchas de fútbol, y la gente no se conecta con la música”. (RS 126, septiembre de 2008, entrevista de Claudio Kleiman)
La felicidad
“La felicidad no ha sido un objetivo en mi vida, aunque es el objetivo más importante de toda nuestra vida. No he sido feliz por ningún motivo en sí. Mi preocupación excede las felicidades, aun en los momentos en que me pudiera ver de la manera más feliz. Realmente en ese aspecto soy muy obsesivo, hay un fuego que me carcome, que me aqueja desde que nací y que se va a terminar cuando esté en el monoplaza [el ataúd], evidentemente. Todo eso tiene que ver con la lírica y el tipo de música que hacés, la fuerza y el hígado que le metés a todos esos dolores, esas preocupaciones, la injusticia, la miseria humana, todo eso que toda la vida te dejó loco, siempre volando en un helicóptero sin poder tocar el piso. A mí me tuvo toda la vida así y me va a seguir teniendo. También se sufre. No pretendo ningún tipo de compensación ni nada, algún día voy a dejar de romper las pelotas y punto”. (Entrevista de Julieta Mortati, realizada a comienzos del año 2000 y que estuvo inédita hasta su publicación en el Bookazine dedicado a Spinetta)
Su fanatismo por los autos
“El automóvil es como ese conocimiento transitorio. Es transitorio porque es… un mundo que se mueve. Cuando vos conducís un automóvil es la alfombra mágica, de algún modo. Yo tuve algunos buenos autos y sé lo que es tener un auto hermoso. Pero básicamente los autos, para mí, son para mirar. Son objetos bellísimos. Bellísimos. Y bueno, eso empezó con Fangio pasando a dos cuadras de casa”. (RS 40, julio 2001, entrevista de Gloria Guerrero)
La cocaína
“Veo a los mejores colegas de mi generación destruidos, como dijo Ginsberg, por un raviol. Déjense de joder. A mí no me iban a agarrar muy fácil con esa. Por desgracia tuve una época en la que me gustaba y le di. Pero terminó. Ese es un antes y un después. Yo empecé en los 80 y todo terminó en el 92. Exactamente el 31 de diciembre de 1991. Así [...] Una decisión interior profunda. Yo no estaba tratando de jugar. Es una de las cosas más importantes que me sucedieron en mi vida: es vida o muerte, eso. Ahí sí necesitás tener poder. Pero ese poder no te lo da el que llenes conciertos o que vendas 800.000 discos. Te lo da tu propio corazón y la certeza de no estar más coimeándote a vos mismo, porque te sigue gustando algo que ya no te gusta ni te hace bien. Esa es la primera coima: la de meterte algo que te hace daño”. (RS 40, julio 2001, entrevista de Gloria Guerrero)
Sus colegas
“[Fito] tiene la capacidad para hacer que quiera. Y yo lo admiro más de lo que él produce. Soy fan de él y lo amo, soy fan por amor, y aparte pienso que es un músico brillante. Por ahí degustaba más su temática cuando estaba más rosarino, pero si nos juntáramos trabajar ahora, sé musicalmente él haría algo extraordinario. No sé si yo, pero él seguro”. (RS 40, julio 2001, entrevista de Gloria Guerrero)
“Me encantaría hacer algo con Juanse [...] Lo adoro, Es intocable para mí, me parece gran rockero del rock canyengue. El equilibrio entre lo que dice una letra de ese género y la música es… perfecto. Hay que llegar a un “yo quiero mi pedazo” o “Juana Arco”: esas letras son maravillosas. Me encanta. Es como con Charly, con Fito, esos tipos a los que yo adoro. También me gustaría mucho trabajar una onda electrónica con [Gustavo] Cerati, soy ávido de esa tecnología y sé que hay tener como un guía para hacer esas cosas”. (RS 40, julio 2001, entrevista de Gloria Guerrero)
Producción: Ayelén Cisneros y Emilio Zavaley
LA NACION