¿Cuáles son los mejores ecohoteles en Argentina?

Cada vez son más los alojamientos que intentan reducir la huella de carbono. Te contamos bajo qué principios trabajan y te mostramos algunas opciones para ser una viajera sustentable.

6 de diciembre de 2021
09:50
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Silvina Baldino

La necesidad de cuidar el planeta nos lleva a adoptar hábitos con conciencia ambiental. Por eso, una industria tan relevante como el turismo comenzó a incorporar desde hace tiempo prácticas verdes con el objetivo de conservar el medio ambiente y concientizar sobre el impacto que generan algunas actividades. “La sustentabilidad tiene muchas caras y cada establecimiento hotelero puede tener su propio enfoque, dependiendo del entorno y de lo que considere importante abordar”, cuenta la arquitecta Natalia Larocca, con experiencia en construcciones sustentables.

Si ya estás planificando tu próxima escapada y querés conocer qué opciones de ecohoteles hay, te contamos cuáles son nuestros cinco favoritos en Argentina:

En las sierras: Tiny House

Los arquitectos Carlos Verta y Verónica Rivero compraron en 2012 lotes en Sierra de la Ventana y crearon un complejo de alojamiento eco-friendly en medio de la inmensidad del paisaje serrano, con el sonido de las aves como sinfonía natural, las infinitas constelaciones estelares y las luciérnagas resplandecientes en la oscuridad: Tiny House.

El proyecto tiene dos casas de impronta minimalista, de cortes puros, con materiales nobles y las comodidades básicas. Cada Tiny House tiene una habitación con baño, frigobar, ropa de cama, una pequeña biblioteca con autores de la zona y el libro de cabecera para el reconocimiento de las aves de la comarca.

Como arquitectos, conscientes de que la construcción es uno de los factores que más influyen en el cambio climático, adoptaron el sistema steel framing para la construcción de las unidades, que ayuda a minimizar las huellas de carbono. Además de reducir los tiempos y costos de construcción, permite ahorrar un 40% de energía por su capacidad de aislar la temperatura y la utilización de materiales reciclables. Según sus dueños, el siguiente paso del proyecto será la utilización de tecnología solar térmica.

Cuánto: desde $4000 el día. Seguilos en Instagram: @tinys.houses.56

En la playa: Alterra

Lo que al principio empezó como una galería de arte, con el tiempo se transformó en una opción hotelera. En 1997, el gran arquitecto Clorindo Testa diseñó Alterra, una de sus obras más importantes, que comenzó como un espacio cultural en medio del bosque en Pinamar.

En 2011, se convirtió en Alterra Glamping, con la incorporación de containers en desuso que fueron convertidos en viviendas sustentables que garantizan una auténtica estadía natural. Los containers están acondicionados con todo el confort –todos tienen una sala de estar, una cocina equipada, una habitación matrimonial y un baño– y fueron diseñados con el objetivo de generar el menor impacto posible, respetando la propuesta original del arquitecto italiano.

Ofrecen opciones con capacidad para 2 y 4 personas y también los ateliers (habitaciones en la planta baja de lo que fue la galería de arte).

Los interiores poseen aislación térmica para conservar la temperatura y toda la decoración está realizada con materiales reciclados, así como también el deck de madera que rodea a la pileta. La iluminación es LED y permite el ahorro de energía.

Cuánto: desde $31.500 la estadía de 4 noches. Seguilos en Instagram: @alterraglamping

En el fin del mundo: Los Cauquenes

Desde su concepción e inauguración, en 2005, el hotel Los Cauquenes, en la ciudad de Ushuaia, ha estado comprometido con la preservación de los recursos, con la ecoeficiencia y con mejorar cada día para dar una experiencia de lujo a los turistas que llegan desde todas partes del mundo. Conscientes de la necesidad de conservar el privilegiado entorno sureño, trabajan con prácticas eco-friendly y también participan en el programa de reciclado de plásticos del Hospital Garrahan.

Además, el hotel cuenta con iluminación de bajo consumo y LED, iluminación con sensores de presencia en algunos sectores, ventanas dobles para optimizar el sistema de calefacción, interruptores con tarjetas magnéticas para reducir la energía eléctrica y cartelería para concientizar sobre el cuidado del medioambiente.

Un proyecto nuevo en el que están abocados es la realización de un invernadero, ya que la huerta que funciona en la actualidad está a la intemperie y sufre las heladas del invierno, lo que la convierte en una huerta estacional (primavera/verano). De este modo, el restaurante Reinamora se proveerá de cultivos orgánicos todo el año.

Cuánto: desde US$ 204, para estadías de más de 5 noches. Seguilos en Instagram: @loscauquenes

En la selva misionera: Cuña Pirú Lodge

¿Quién no soñó alguna vez con dormir en una cabaña en la copa de un árbol? En un entorno idílico, Cuña Pirú cumple esta fantasía, porque fue creado para que el huésped logre sentirse como en la selva. El lodge se encuentra a solo 400 metros del Parque Salto Encantado, en pleno corazón de Misiones.

En este escenario verde se emplazan confortables cabañas y un amplio House. Entre las opciones, las casitas/habitaciones están construidas a 8 metros de altura, escondidas a la perfección entre los árboles. Dormir ahí es una experiencia inigualable. Y desde los inicios, este alojamiento estuvo comprometido con el medio ambiente. Fue construido con materiales de la zona –madera dura y roca basáltica–, diseño bioambiental y decoración basada en el trabajo ético y justo de las artesanías misioneras.

En las excursiones, participan pobladores de la zona, quienes conocen mejor que nadie las riquezas del monte. Además, el hotel de selva cuenta con 16 camas para 20 hectáreas de selva, lo que garantiza más de 1 hectárea de selva por persona, contribuyendo a que el impacto en el medio ambiente sea lo más bajo posible.

Cuánto: desde $14.000 (en la casita del árbol). Seguilos en Instagram: @cunapirulodge

En la ciudad: Palo Santo

En la ciudad de Buenos Aires se encuentra Palo Santo, que presume ser el primer hotel urbano sustentable de Latinoamérica, con un programa innovador, que cubre diferentes aspectos desde lo sustentable: energía, agua, CO2, O3, aire, aislaciones y materiales nobles y certificados.

El edificio se caracteriza por su estructura verde natural, con fachadas de hierro en desarrollo vertical y horizontal diseñadas para guiar el crecimiento de dos jardines verticales de 28 metros de altura, una aislación natural: ayudan a aislar tanto el frío como el calor y absorben el CO2 que permite compensar parte de lo emitido.

Además, el hotel tiene como objetivo la reducción del consumo de energía –iluminación LED, detectores de movimiento, equipos de bajo consumo, equipos de aire acondicionado con refrigerante ecológico, entre otros– y cuenta con una gestión inteligente de agua: recuperación del agua de lluvia y alivianamiento del sistema pluvial, inodoros de doble descarga y riego por goteo. También llevan a cabo un programa de reciclaje, como la reducción del uso de papel y la cantidad de lavados de blanquería, e insumos de limpieza de baja contaminación.