Son las smart cities, que implican un quiebre en varios sentidos: urbes más naturales, autónomas, inclusivas y, sobre todo, sustentables; conocé el top 5 de ciudades más inteligentes
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Bienvenidos a un nuevo paradigma arquitectónico en el que el quiebre introducido por la pandemia se cristaliza y da lugar a nuevas formas de pensar y diseñar el paisaje urbano. Aunque esta evolución ya se venía vislumbrando precovid, hoy el concepto de ciudad está en revisión, y planificadores y especialistas se preguntan por la nueva cara de las ciudades: ¿cómo deberíamos repensarlas para que sean más seguras, inclusivas y sustentables? Las smart cities son la respuesta y parte del cambio.
A la hora de imaginar o darle forma a una smart city, un aspecto importante es tener en cuenta la sustentabilidad, ya que la emergencia climática pide por nuevos modelos de planificación urbana y de viviendas, y se apunta a desarrollos de menor impacto ambiental. También resulta crucial contemplar la accesibilidad y el estilo de vida en estas grandes urbes: disminuir el impacto de los autos, incitar al desarrollo de actividades físicas (como caminar o andar en bici) y alcanzar un vínculo real con el entorno que nos rodea y la naturaleza.
A la par, para lograr que una ciudad sea inteligente, cuanta más data haya de los residentes, más fácil es poder tener una ciudad adaptada a la visión 360° de ellos. ¿Qué abarca esto? Desde la frecuencia y acceso al transporte público hasta las decisiones sobre construcción de infraestructura. Para lograr esto, muchas ciudades utilizarán un conjunto de tecnologías, inteligencia artificial y la computer vision, que van a permitir una mejora sin precedentes de la seguridad de los datos.
Pero, ojo, porque también hay una alarma encendida sobre este último punto: que no se use la tecnología para acercarnos, sino para aislarnos. “Con la tecnología corremos el riesgo de que toda esa cercanía que tendríamos que tener con mixtura de usos desde comercios hasta viviendas, como era antes, desaparezca, lo cual no es una contra de las smart cities, pero sí lo veo como un riesgo. Con la tecnología, uno tiende a aislarse y no a compartir. La clave sería lograr el equilibrio”, afirma Ricardo Pomphile, arquitecto y fundador de OpenHouse BA.
Mirando hacia el futuro: ¿por dónde se empieza?
A la hora de pensar en los desafíos que hay en la reconversión de ciudades comunes a aquellas inteligentes, Patricia Pomies –chief operating officer de Globant– nos explica que hay que entender que esto involucra modernizar las infraestructuras actuales, así como también la adopción de nuevas tendencias tecnológicas. Para aquellas ciudades ya consolidadas, el secreto estará en empezar por iniciativas de alto impacto y bajo costo, como el uso de aplicaciones que conectan al ciudadano por un costo reducido y retorno grande.
La clave está en la adopción de la tecnología pensando en el ciudadano y el uso eficiente de recursos. ¿Y los retos? Esos están dados por el acceso a la tecnología, que debe ser para todos al fomentarse un modelo de ciudad inteligente, y en cómo las grandes ciudades planean sus estrategias de transformación para lograr la evolución de la infraestructura para soportar las soluciones y la ciudadanía para adoptarlas.
100% tecnología
Estará presente a través de Internet de las cosas (IoT), en la que se conectan dispositivos, redes de comunicaciones, plataformas y aplicaciones. A su vez, las casas inteligentes contemplan desde cámaras y cerraduras inteligentes hasta calefactores y aires con termostatos que se apagan cuando no hay nadie en casa para optimizar la energía.
Un nuevo estilo de vida
Hay un cambio de paradigma en la forma de habitar y de convivir: hoy las necesidades de habitabilidad pasan por otros factores, tales como la flexibilidad, la conectividad y la convivencia grupal. Esto redunda en los tan mentados coliving y coworking, con espacios recreativos y comunes que agrupan a personas con intereses e incluso trabajos similares.
Ecología: una prioridad
Se apunta a pensar en energías 100% renovables y limpias y en una gestión de residuos inteligente. Por ejemplo, la mezcla de energías convencionales junto con renovables se irá incrementando en busca de aumentar el porcentaje de generación de las segundas. Así que todas las soluciones alrededor de cómo serán importan en función de la optimización y la reutilización de recursos.
El ABC de un edificio inteligente
- Modo green. Para mejorar la calidad de vida de los habitantes, los “edificios del mañana” tienen techos más altos y translúcidos, ventanas más grandes y más espacios verdes.
- Todo con smartphone, chau llaves. Aun estando fuera de casa, podés manejar y controlar todo desde el celu: desde apagar la luz hasta controlar la temperatura o abrir y cerrar las puertas.
- Todo cerca. Olvidate del subte o del tráfico: en las ciudades “de 15 minutos”, todo lo que necesitás para vivir queda a esa distancia para que puedas trasladarte a pie o en bici.
- Casas chicas. Son unidades de entre 38 y 45 m2, que buscan una mayor accesibilidad a la vivienda. Son una invitación a que la vida transcurra mayoritariamente fuera de casa.
- Eco 2.0. Con diferentes sensores en la recolección de la basura, mejoran su eficiencia y las rutas. Además, los desechos son transformados en abono para la huerta orgánica comunitaria.
Top 5: ¿Cuáles son las ciudades más inteligentes del mundo?
- Copenhague. Es el primer ejemplo, ya que es una de las ciudades inteligentes líderes en Europa. Sus acciones van desde la sustitución de combustibles fósiles hasta el uso de energías renovables para calentar la ciudad.
- Oslo. Es reconocida por sus esfuerzos por disminuir el impacto ambiental: para 2030 se propuso reducir al 95% sus emisiones de carbono. Además, utiliza lectores de matrícula inteligentes para aliviar las congestiones de tráfico.
- Zurich. Se encuentra segunda en el Smart City Index del año pasado y, entre sus acciones, lleva adelante la iniciativa conocida como “smart participation”, que hace énfasis en la participación de los pequeños negocios y ciudadanos.
- Singapur. Es una de las ciudades más tecnológicas a nivel global y aparece recurrentemente en el top 10 de smart cities. Pueden medirlo todo: desde el nivel de limpieza de un área hasta la cantidad de personas que asisten a un evento.
- Dubái. Es considerada una de las más nuevas del mundo. Entre sus acciones disruptivas, puso en marcha un plan de siete años para transformar digitalmente todos los servicios gubernamentales de la ciudad.
Expertos consultados:
Nicolás Mieres, arquitecto y director de Área Proyecto +Colonia
Patricia Pomies, Chief operating officer de Globant
Fran Okecki, cofundador de Cloudgaia y +Colonia
Dafna Nudelman, activista eco
Ricardo Pomphile, arquitecto y fundador de Openhouse BA