La gran ciudad balnearia tiene diversidad de propuestas para dormir, desde hoteles boutique y de perfil urbano hasta “la” postal de la arquitectura local frente al mar.
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1. Casa Camarón
La casa, de 1944, se emplaza en la esquina de una calle en pendiente en la zona de Playa Varese. Tiene diez habitaciones y es una sobreviviente. Se calcula que entre las décadas del 50 y 70, cuando Mar del Plata profundizó su intención de convertirse en un balneario de masas, se demolió más de la mitad del patrimonio original.
Mientras que otros tantos chalets del estilo exhiben un letrero de venta, esta casa corre mejor suerte: desde hace cuatro años es un alegre hotel de estilo playero y excelente base para explorar la Feliz hasta fuera de temporada. Combina bien el estilo surfer con la estética original del chalet, de esos típicos recubiertos en piedra Mar del Plata. Tiene varios espacios comunes (hasta un patio con parrilla en el que se pueden hacer asados) y se ubica a metros del mar. Muy buen desayuno.
Gascón 604, Playa Varese. T: (0223) 451-2016. casacamaron.com.ar
2. Altos de Güemes
En una de las primeras casonas del barrio Stella Maris, de 1918, se encuentra este encantador hotel de 25 habitaciones con desayunador en el porche, escaleras y pisos originales. Los cuartos son luminosos y restaurados con estilo. En la sala, cubierta de boisserie y con bow window, reina un señorial hogar de piedra. Uno de los rincones más encantadores es el jardín delantero, rodeado por una gran enredadera y donde se puede desayunar absorbiendo el ritmo sosegado del barrio.
Falucho 1240, barrio Stella Maris. T: (0223) 451-4938. altosdeguemes.com.ar
3. NH Gran Hotel Provincial
Entre 1998 y 2008 estuvo abandonado. Sus monumentales salones, sus 460 habitaciones a las que a través de un sistema de cañerías de plomo llegaba agua de mar, su enorme piscina, su lobby, sus escaleras, pasillos y confiterías revivieron y hoy se encuentran concesionados por la cadena NH. El Hotel Provincial de Mar del Plata, abierto oficialmente el 18 de febrero de 1950, fue el más grande de Sudamérica y conformó, junto al Casino, su edificio gemelo, “la” postal de La Feliz. Para construirlos hubo que demoler la coqueta rambla Bristol. Obra de Alejandro Bustillo, el hombre se inspiró en los edificios de la parisina Plaza Vendôme, con sus mansardas en pizarra negra, y le sumó elementos típicos de la ciudad como los frentes revestidos en piedra Mar del Plata y los vivos en ladrillo.
Aunque no se sea huésped, el hotel se puede recorrer con guía. El tamaño da vértigo: ocupa una superficie de más de 75.000 m2. El lobby exhibe murales pintados por César Bustillo, hijo de Alejandro, que fueron varias veces tapados por considerárselos obscenos. La primera, cuando se celebró el primer Festival Internacional de Cine de Mar del Plata, en 1954. Hasta sus famosas escaleras helicoidales –donde la persona que sube no puede encontrarse con quien baja– son maravillosas.
Las habitaciones se distribuyen en seis plantas y combinan detalles de época, como los pisos de madera originales, con otros contemporáneos, como los escritorios y las sillas. Además, hay dos piscinas climatizadas cubiertas, sauna y acceso al club de playa (con importe adicional).
Av. Patricio Peralta Ramos 2502, Mar del Plata. nhgranhotelprovincial@nh-hotels.com
4. Nuit Hotel
Abierto en 2016 en la muy estratégica zona de Güemes, el apart hotel tiene 12 espaciosas habitaciones distribuidas en cuatro pisos y equipadas con cocina y vajilla. Hay jacuzzi en las habitaciones triples, ducha escocesa en las dobles. Tiene un acogedor patio de enormes macetones verdes donde se sirve un copioso desayuno, ideal para arrancar el día. En el último piso, una piscina y solárium completan la buena propuesta.
Alvarado 1452. T: (0223) 451-7360/ 15 454-2106. www.nuithotel.com
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