Concebido por dos familias suizas, tiene un exquisito diseño y se destaca por su oferta wellness con un auténtico hamam que incluye tratamientos de vinoterapia.
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De arquitectura y paisajismo vanguardista, las habitaciones de Entre Cielos Wine Hotel & Spa están inmersas entre exuberantes viñedos con la impresionante cordillera de los Andes y sus picos nevados como fondo. Generosas en espacio y cada una con su terraza privada, están decoradas con tonos tierra, maderas cálidas, telas y accesorios de lujo y aromatizadas con singulares fragancias.
El llamado Loft Suite Limited Edition, una suerte de módulo lunar futurista elevado sobre los viñedos, es quizás el que mejor encarna el concepto del lugar: impecablemente blanco, desde las paredes y los pisos hasta el cuero de vaca bajo la mesa ratona intergaláctica, posee dos ventanas rectangulares –una a ras de la cabecera de la cama y otra a los pies– que dan la sensación de estar durmiendo suspendido “entre cielos”. Esta creación única es la preferida de las parejas. Otras joyitas son los ocho Vineyard Lofts, ubicados en el viñedo mismo y ligeramente retirados del edificio principal del hotel –diseñados para crear un ambiente íntimo y una privilegiada vista a la montaña–, y la suite de lujo Gran Cru, con un jacuzzi privado al aire libre.
El sofisticado complejo fue ideado por las familias suizas Adam y Wager, quienes llegaron a Mendoza en 2009 y encontraron, en este retazo de Luján de Cuyo, la tierra fértil para concretar su sueño: montar un hotel + spa de alta gama centrado exclusivamente en la experiencia del vino. Fueron más allá en la aventura con las uvas y se animaron a desarrollar en el añejo viñedo su propia creación, el Entre Cielos Malbec, un vino de textura aterciopelada con un final de ciruelas maduras.
Desde que fue concebido, el hotel se caracteriza por su excepcional atención y detalles que hacen la diferencia, como la posibilidad de una degustación privada o un pícnic entre viñedos. Por eso, en 2021 resultó ganador en la categoría “Hotel Boutique líder en Argentina” de los World Travel Awards –una especie de premio Óscar del turismo–, aunque ya había sido distinguido con el mismo galardón en otras cinco oportunidades.
En materia gourmet, su restaurante destaca los sabores locales con platos frescos y livianos –gazpacho, cuscús de frutos secos y berenjena con salsa de menta o croquetas de jamón crudo, además de un cuidado menú de 5 pasos– y las etiquetas de las mejores bodegas de la región, que pueden explorarse en las catas, a cargo de un sommelier de la casa.
Un auténtico hamam como en Medio Oriente
Los propietarios del hotel son fanáticos de los spas turcos y quisieron traer y compartir esa sublime experiencia con amigos y huéspedes. Así fue como surgió este oasis de bienestar de 650 m2, un santuario de relajación que honra y respeta la arquitectura y el concepto de los rituales tradicionales de bienestar del hamam. Su belleza de Oriente Medio, matizada con detalles minimalistas y funcionales, es un imán irresistible.
El spa incluye dos salas de vapor con diferentes temperaturas –37 ºC y 55 ºC–; dos salas de exfoliación corporal, la cual se realiza con un guante especial llamado kese; una piscina climatizada y el gobek tasi, una piedra caliente para recostarse que deja al cuerpo liberar las toxinas acumuladas.
El clásico circuito guiado dura una hora y media y permite a los visitantes recorrer los seis espacios del Spa & Hamam, con opción a sumar hasta 11 etapas más, como masajes de espuma, aceites naturales, arcilla volcánica y piedras calientes, aromaterapia, reflexología, mascarillas, sesiones de yoga o hasta un desayuno de tres pasos en el restaurante. En todos los espacios reinan el silencio, la introspección, el goce sensual y la penumbra.
Para quienes quieran combinar estas técnicas de bienestar oriental con los múltiples beneficios de la uva, abundante en sustancias rejuvenecedoras, es posible completar la experiencia con tratamientos dedicados que incluyen exfoliaciones con pepitas de uva y baños de vino dentro de sus pasos.
El gran final pueden ser unos masajes de espuma, o bien horas de pereza ilimitada en el camekan, una sala árabe de relajación en la que se pueden disfrutar jugos naturales, infusiones y los famosos dulces turcos.
- Entre Cielos Wine Hotel & Spa Guardia Vieja 1998, Vistalba, Luján de Cuyo. T: (0261) 361-1439. La doble desde u$s 680 + IVA con desayuno y vino de cortesía.
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