Almacén de Campo Quito: venden sándwiches ruteros que son un éxito, con 300 gramos de fiambre y untados con manteca

En el centro de la provincia de Córdoba, se ofrecen al costado de la ruta, en un almacén de campo que tiene 130 años.

LA NACIONAna van Gelderen

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A 7 kilómetros de Alta Gracia, sobre la RP E96, en Falda del Carmen, el Almacén de Campo Quito es parada obligada. Lo eligen los viajantes, los locales y también turistas. Del otro lado del mostrador está Rubén Arias, uno de los hijos de Quito, dueño del negocio. “Aquí había una pulpería, que luego fue almacén de ramos generales. Esta edificación tiene 130 años. Antes hasta acá llegaban solo los lugareños, que ataban sus caballos en un palenque que estaba justo enfrente. Este era un paraje de muy poquita gente”, comenta Rubén, mientras marcha un sándwich de jamón crudo que sale con manteca.

“Mi papá, que es nativo de Alta Gracia, hace esto hace 50 años. Antes tuvo otro negocio, tipo bar”, comenta sobre el almacén de Quito Arias, que poco a poco se convirtió en un éxito del que habla toda la zona. “Cuando mi papá llegó, aquí se vendían picadas. Pero, poco a poco, la gente empezó a pedir algún sanwichito de mortadela con gaseosa. Y empezaron a venir los turistas que se habían hecho su casa de veraneo en San Clemente. Pronto se corrió la voz de que los sándwiches estaban buenos”, reflexiona Rubén.

Del otro lado del mostrador también están Mariela y Marian, dos empleadas que preparan en el momento los sándwiches –generosos y bien frescos– que los clientes le piden a Rubén. “Mi papá empezó a hacerlos, pero ahora nos tiene a nosotros. Somos tres hermanos: Marcos, Silvana y yo. Además de las chicas que nos ayudan. Hasta septiembre del año pasado estaba mi mamá, que murió. Se llamaba María Ester, pero todos la conocían como Micha”, cuenta Rubén y detalla que Quito suele ir al negocio todos los días, un rato a la tardecita, mientras no haga demasiado frío.

“El secreto está en que mi papá nunca resignó la calidad de los productos que usamos. Todo se hace en el momento y nada es envasado. Hacemos los sándwiches como si fueran para uno; como nos gustaría comerlos a nosotros. Llevan muy buen queso, muy buen fiambre y también muy buen pan –que es tipo francés, pero sin costra, que hace una panadería en especial–. Para elegir los proveedores, vamos probando y saboreando hasta elegir lo mejor”, señala Rubén sobre los sándwiches que recomiendan con manteca, pero también está la opción de ponerle mayonesa. “Se pueden compartir, porque son enormes”, agrega mientras nos alcanza el nuestro. “El que más sale es el de jamón crudo –que puede ser nacional o ibérico–, pero también piden mucho el de lomo ahumado”, destaca entre las varias opciones de sándwiches ruteros, que para muchos son los mejores de Córdoba.

“Una vuelta vino Lionel Scaloni, porque es amigo de Lito Oviedo, un ciclista de Alta Gracia. Se dio con todos y firmó autógrafos. Pero a través de los años han venido otros tantos, como David Nalbandian… Y artistas, como Sergio Denis, César Banana Pueyrredón y Peter Alfonso, que venía desde Carlos Paz, donde hace teatro. Traía a todos los integrantes del elenco. Es que el boca en boca nos ayudó siempre”, resume Rubén Arias.

Datos útiles

Almacén de Campo Quito. Gran variedad de sándwiches, que se pueden comer dentro del almacén, en la barra, o en mesas afuera. Muchos compran para llevar. Todos los días, de 10 a 22 horas. RP E96 s/n. T: (3547) 40-2813. IG: @almacendecampoquito

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