Una terraza diseñada para reverenciar el paisaje urbano y generar intimidad
Con una selección de especies nativas y exóticas, el espacio ubicado sobre la Avenida Figueroa Alcorta, goza y aprovecha de las vistas de la Ciudad de Buenos Aires y cuenta con rincones para usar, disfrutar y relajarse en compañía.
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PARA LA NACIONEugenia Anaya
Sus diseñadores bautizaron el proyecto como “Terraza Alcorta”, en alusión a la avenida porteña sobre la que se asienta la casa que alberga el espacio. Con una superficie de 300 m2, este reducto urbano se implanta entre el skyline urbano, el horizonte de la ciudad, y los parques del barrio de Palermo. Como cuenta el arquitecto Hernán Aguilar, su paisaje se mentó considerando los elementos preexistentes de la terraza: así, se pensaron espacios compartimentados, de escala doméstica y social, copiando la cuadrícula rectangular del piso.
Los rincones, planteados, trabajados y sectorizados entre vegetación, contienen las visuales y los efectos del viento propios de esta zona de la ciudad. A la vez, se generaron circulaciones claras, entre los distintos usos que propone la terraza, con los maceteros de mampostería y los bancos fijos.
A la salida del comedor, un sector para el fogonero amplía la expansión visual del ambiente. Y el espacio para camastros outdoor, a la salida del dormitorio principal, invita al relax con pérgola y hamaca paraguaya.
La intención de la botánica del proyecto fue reverenciar el paisaje del entorno urbano y, al mismo tiempo, generar intimidad entre los espacios diseñados. La propuesta responde a una combinación entre especies nativas, más algunas especies exóticas en los sectores de sombra.
Al sol se plantaron Salvia guaranitica, Nassella tenuissima, Baccharis articulata, Baccharis trimera, Poa iridifolia y lantanas. Para las zonas de sombra, se eligieron las tropilicalísimas Strelitzia nicolai, Alocasia odora, Alocasia rubra, boina de vasco, cañas de ámbar, heliconias y jazmines, que cubren los 2 metros de altura de la medianera lateral de ladrillos.
Los muebles, diseñados por Federico Churba, son una cómoda sumatoria de poltronas con estructura de hierro pintado, asientos y respaldos hilados con hilos de PVC, reposeras y mesas circulares de distintos diámetros, modelo Pluvial, de aluminio. Son aptos para exterior y promotores del disfrute y el relax en compañía.
- Proyecto de paisaje: Estudio Bulla
- Arquitectura: Arq. Lucía Korcarz + Arq. Anthony Sibbald
Por Eugenia Anaya
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