Piletas que supieron integrarse a la naturaleza
En Salta y en Córdoba, una pileta-estanque rodeada de vegetación nativa y otra inspirada en las ollas de los ríos
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PARA LA NACIONEugenia Anaya
1- Estanque norteño
Este jardín, ideado por la Arq. María Elena Acuña, está ubicado en una de las zonas más altas de un barrio en la provincia de Salta desde donde se veían los tejados y los tanques de agua de los vecinos.
De modo que se buscó borrar las vistas indeseables del paisaje cercano, proyectar sombra sobre el espacio exterior, ganar sectores de uso para contrarrestar la abrupta pendiente del terreno y enmarcar visuales más lejanas.
¿Qué plantas se usaron?
Con la vegetación, la premisa fue restaurar el bosque nativo con plantación de grupos de chañares, espinillos, cina-cinas.
Además unos olivos de porte arbustivo enmarcan las vistas. Por último unas gramíneas y aromáticas completan la propuesta paisajística.
2- Olla de río
En esta casa, el perfume de la madera es protagonista y, junto a la piedra, forman un dúo imbatible, tanto en el interior como en el exterior.
Tres bloques de piedra independientes conforman la casa. El diseño de la pileta está inspirado en uno de los puntos más interesantes de la esencia cordobesa: las ollas de río.
La pileta fue realizada con piedras planas de pórfido patagónico de varios tonos conforman el borde húmedo.
Por Eugenia Anaya
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