Los primeros días de otoño, son los días ideales para plantar los bulbos que florecerán en primavera.
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A principios del otoño podemos sumar bulbos de narcisos o junquillos debajo de los grupos de árboles caducos, que florecerán a fin de invierno y principios de primavera.
Se recomienda plantarlos bajo robles o arces y es ideal buscar zonas altas, que no se aneguen.
Es fundamental el buen drenaje para el éxito de la plantación de los bulbos
La profundidad de plantación deberá ser 3 veces mayor que la medida del bulbo (si el bulbo tiene 5 cm hay que plantarlo a una profundidad de 15 cm).
Debemos colocarlos con la punta hacia arriba, sin hacer mucha presión para no dañarlos.
Se cubren con la tierra extraída, pero le podemos sumar un poco de arena y compost para mejorar el drenaje.
En general, la distancia ideal para bulbos grandes es de 7 a 15 cm y para los medianos y pequeños entre 3 y 7 cm.
Pasada la floración hay que dejar que se sequen bien las hojas y recién entonces cortarlas. No es necesario levantar los bulbos todos los años.