No sólo dan sabor a la infusión, además contrarrestan los efectos estimulantes de la clásica yerba. Te contamos cuáles son los “yuyos” ideales y qué aportan
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El amor por el mate es una pasión compartida por la mayoría de los argentinos. Dulce o amargo, solitario a la mañana o como pretexto ideal para compartir un momento, el mate es parte de la vida diaria de muchos.
Pero la yerba –al igual que el té y el café- contiene elementos que además de ser estimulantes, impiden la absorción de nutrientes. Por eso se puede combinar con algunas hierbas que podemos cultivar en nuestra huerta, o incluso en macetas en la cocina o el balcón si no tenemos suficiente espacio disponible.
Las hierbas aportan nutrientes, sabor y, por supuesto, reducen la cantidad de mateína que consumimos.
A diferencia de la yerba, las hierbas no aportan taninos, esos compuestos que actúan inhibiendo la absorción de algunos nutrientes como el hierro, el calcio y el magnesio, entre otros. Por eso son ideales para sumarlas al mate y facilitar la digestión.
Hay hierbas que cumplen una función sedante y relajante y otras que tienen una excelente función diurética. De acuerdo a los efectos buscados, se pueden agregar estas hierbas a la preparación del mate.
Algunas ideas para sumar al mate
- Hierbas con efecto relajante:
Son grandes aliadas para conciliar el sueño, reducir el insomnio o aportar calma en momentos de impaciencia. Algunas de ellas son el tilo, la valeriana, la pasionaria, la melisa, la manzanilla y la lavanda.
- Hierbas aliadas de la buena digestión:
Ideales para después de las comidas o para apaciguar sensaciones de pesadez estomacal: cedrón, boldo, manzanilla, carqueja, congorosa, burrito, artemisa y marcela.
- Hierbas con función diurética:
Diente de león, cola de caballo, lapacho y uva ursi son algunos ejemplos de las hierbas que estimulan la diuresis y por lo tanto favorecen la eliminación de toxinas.
- Para un toque de sabor:
Coco rallado, manzanilla, lavanda, burrito, poleo, cáscaras de cítricos, matchá, pétalos de rosas.
LA NACION